Capítulo 66

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Nueva York, Agosto del 2034.

Las cosas iban mejorando para María, su novio había vuelto a ser ese hombre dedicado que siempre buscaba la forma de sorprenderla, ese castaño risado del que estaba enamorada y que amaba con todo su corazón.

A principios del mes habían disfrutado del cumpleaños de Peter en compañía de sus amigos y familiares. Por supuesto que Henry y Howard aún no regresaban del campo por lo que se perdieron de la celebración.

Para su suerte o mala suerte, el verano estaba acabando y las clases se acercaban por lo que sus hermanos volverían pronto. Sin embargo, Henry debía viajar a Cambridge y sus padres lo acompañarían pero Howard se negó a ir.

— Por favor María, sólo será una semana. Cuida a tu hermano hasta que regresemos — Rogó su madre.

María suspiró, odiaba tener que quedarse con Howard una semana completa soportando sus tonterías, pero no podía negarle un favor a sus padres y a regañadientes terminó aceptando la petición.

Ese día al salir del trabajo decidió pasar a recoger a Peter a las instalaciones de Innovaciones Williams. No obstante, a las afueras del edificio se vió interrumpida por el dueño de la compañía.

— Buenos tardes, señorita Stark — Saludó el hombre.

— Buen día, Simon — Saludó con una sonrisa.

No era extraño encontrarse con Simon Williams, es más, últimamente se veían más seguido y se trataban con más familiaridad, aún así el presidente de Innovaciones Williams la continuaba llamando señorita Stark.

— Vienes por tu novio? Ya casi es hora de la salida — Comentó.

— Sí, deberías darles más vacaciones a los empleados, Simon — Reclamó riendo.

— SPIT sí lo hace? — Preguntó.

— Los empleados de SPIT tienen derecho a vacaciones dos veces al año y Peter sólo tiene una vez — Reprochó.

— Lo siento, mi padre lo estableció así — Mencionó.

Sanford Williams era el fundador de la compañía y padre de dos hijos, Eric y Simon. El primogénito rechazó los derechos a la presidencia de la empresa por lo que Simon, el hijo menor, tuvo que hacerse cargo de la compañía de su padre.

Innovaciones Williams, antiguamente era una fábrica de municiones, pero considerando la evolución de la ciencia y la humanidad, las armas de fuego habían quedado atrás por lo ahora se dedicaban al descubrimiento medicinal.

— Bien, debo irme. Tengo una reunión en Hummer Industries — Se despidió.

María se quedó estática en su lugar por unos segundos y trató de rememorar dónde había escuchado el nombre de esa empresa hasta que lo recordó. Justin Hummer, el antiguo dueño, tuvo una disputa con su padre y actualmente estaba en prisión.

En el pasado, la compañía de Sanford Williams había sido una de las grandes competencias de Stark Industries o Hammer Industries. Sin embargo, su padre al retirarse del negocio armamentista dejó a Hammer, Williams y otras empresas solas en ese rubro.

Justine Hummer, actual presidenta de la industria armamentista del mismo apellido, era quién llevaba el mando de la empresa y al parecer estaba haciendo algún tipo de negocios con Innovaciones Williams o eso podía deducir ante las palabras de Simon.

Lo único que María esperaba era que ese pequeño detalle no trajera consecuencias. La castaña no le dió más importancia y continuó su camino hasta la oficina de Peter, dónde lo encontró ordenando sus cosas para ir a casa y al verla le dedicó una brillante sonrisa.

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