Aprendiendo Junto A Ti

Capítulo 77

Nueva York, Septiembre del 2038.

Harley miraba atentamente a su amigo, los últimos días Peter parecía una especie de zombie. El castaño tenía un rostro demacrado, cansado y las ojeras marcadas bajo sus ojos lo hacían lucir enfermizo.

Esa mañana se encontraban trabajando en los reactores que iluminarían la ciudad por lo que tuvieron que realizar una inspección al terreno, bueno, Henry estaba inspeccionando y ellos estaban platicando.

— Estás bien? — Preguntó llamando la atención de Peter.

— Sí, estoy bien — Aseguró cortante.

— No te ves bien. Seguro que no tienes una especie de crisis? Ya sabes yo solía enfermarme del estómago a los treinta — Comentó.

— Sólo estoy cansado — Se excusó.

— Escucha... Entiendo que estés nervioso, yo también lo estaba cuando iba a nacer Dylan, pero ya verás que todo saldrá bien — Intentó animarlo.

— Eso espero — Susurró el castaño.

Henry regresó con ellos para avisar que todo estaba bien en esa área y que ahora debían inspeccionar la siguiente. Harley bufó antes de dirigirse al lugar indicado por el jefe del proyecto.

No podían culparlo. Quién se levanta un domingo en la mañana para trabajar? Esa zona de Nueva York estaba poco transitada y esa era la razón por la que habían elegido un domingo para realizar la inspección.

— Ya casi terminamos, sólo falta revisar ese sector y la próxima semana comenzaremos con la instalación — Comentó Henry.

Una vez que el trabajo estuvo terminado, los tres tomaron sus automóviles para conducir hasta la residencia Stark. Cassie estaba esperándolo allá junto a su hijo Dylan, pues habían quedado para almorzar.

Su esposa pasaría a recoger a María y a Lila para esperarlos y disfrutar de un día en familia. Era irónico ver como pasaban más tiempo con los señores Stark que con Scott, Maggie, Ava, Jim o su propia madre.

La distancia no era un tema fácil de lidiar, los padres de Cassie vivían al otro lado del país en San Francisco. Mientras que su madre vivía más cerca, pero para llegar a Ross Hills se necesitaba un avión y un bus.

Por suerte existían las videollamadas, algo que a Dylan le encanta. Desde pequeño, su hijo podía estar horas frente a una pantalla escuchando a sus abuelos hablar y viendo las caras graciosas de su tío Cameron.

Al llegar a la casa de los Stark se encontró con su hijo regañando los jardines junto a Hope. El niño al verlo bajar del vehículo dejó sus tareas a un lado y corrió para recibirlo con un fuerte abrazo.

— Para mí no hay abrazos? — Preguntó Henry.

— Tío Yenyi — Saludó Dylan.

— Qué haces hijo? — Preguntó al rubio menor.

— Degal pantas abuedita — Respondió apuntando al jardín donde estaba Hope.

— Qué dijo? — Cuestionó Henry confundido.

— Regar plantas con la abuelita — Aclaró.

— Cómo le entiendes? Los padres tienen algún superpoder? Mamá también le entendía todo a Howard, nunca supe cómo si hablaba horrible — Comentó.

— Creo que es porque los niños pasan más tiempo con sus padres — Dedujo.

— Tiene sentido — Murmuró Henry.

El castaño caminó hasta el jardín para ir a saludar a su madre antes de entrar a la casa. Mientras que Harley aún con Dylan en sus brazos procedió a esperar a Peter que venía más atrás y estaba estacionando su vehículo.