Cap. 45 - ¿Qué somos?

4.3K 218 6
                                    


Pov Vane.

Después de saber que Poché esta muy bien decidimos con Kim regresar a su departamento, pero ahora no sé que pasa entre nosotras dos, estoy demasiado confundida y desde que salimos del hospital no hemos dicho casi nada.

Llegamos a el departamento y ella solo se fue a su habitación dejandome sola en la sala sentada en el sofá reflexionando todo lo que ha pasado.

Principalmente lo que sucedió con Poché, no entiendo muy bien como es que estuvimos demasiado cerca de una narcotraficante y no nos dimos cuenta de eso, supongo que era más que obvio por su aspecto.

— Vane — la voz de Kim me sacó de mis pensamientos.

— ¿Si? — la miré, se comenzó a acercar hasta sentarse en un sofá individual mirándome.

Kim es una chica muy guapa, dudo demasiado que no tenga ningún pretendiente por ahí, pero ahora que me pongo a pensar... Y es que yo la quiero, la quiero demasiado y sentir sus labios se siente demasiado bien que lo haría todo el tiempo, pero es que ella no se ve muy segura de eso y me pone a dudar a mi también.

— ¿Qué somos? — wow, no esperaba esta pregunta, me dejó atónita.

No dije nada solo me quedé callada, las palabras no salian de mi boca.

— ¿Te gustó lo que sucedió? — ¡Si! ¡Obvio! Me encantó.

Pensé todo eso, pero de mi boca aún no salian las palabras.

Sentí como mi corazón se rompió al ver como sus ojos se cristalizaban ¡Dios! ¡Vanessa, dile que te encanta y que quieres tener algo con ella!

Nada.

— lo supuse — dijo con la voz entrecortada, se levantó y camino hasta llegar a su habitación y azotar la puerta dejándome de nuevo sola.

¡Mierda Vanessa! ¡La has cagado! ¡La cagué!

Pov Calle.

— oye... —

— ¡No! — me detuvo.

— Amor, ¿Qué sucede? —

— osea yo estoy aquí internada en un hospital sin poder hacer nada ni moverme y lo primero que tu haces es ir a ligar con el chico del restaurante — dijo medio enojada y con un puchero.

— ¿Ligar? ¿Enserio crees que fui a ligar? Neta no puedo creer que creas eso de mi — dejé la comida en una mesita y me senté en el sillón recargando mis codos en mis piernas para poder observarla mejor.

No contestó y cerró los ojos por unos largos segundos.

¡No es justo! ¡Se enoja conmigo por hacer algo que claramente no hice! ¡¿Qué mierda pasa por su cabeza!?

Me levanté del sillón y ahora me senté en el banquito que estaba cerca de la camilla, recargue mis codos en la camilla y agarré su mano para después dejar un par de besos en ella. Abrió los ojos y me miró con el ceño fruncido.

— Poché ¿Enserio crees que fui a ligar con el chico del restaurante? —  hablé con voz de bebé, ella sonrió — no cariño, no fui a ligar con el chico del restaurante — dije mientras negaba con la cabeza — fui por una ensalada de pollo, como vi a Eder llegar en su moto salí de inmediato de ese lugar, el chico me llamó para darme mi orden, pero como yo salí casi derrapando pues supongo que me siguió hasta acá — me levanté un poco y dejé un beso en su barbilla — yo te quiero a ti, no al chico del restaurante — dejé un beso en su mejilla — ni a nadie más — ahora dejé un beso en la comisura de sus labios — así que mi amor a mi no me vengas con que te engaño con el chico guapo del restaurante, porque el puede estar muy guapo y todo, pero él no es el amor de mi vida — dejé un beso en su nariz — tú si eres el amor de mi vida, ahora déjame comer mi ensalada de pollo porque si no lo hago muero de hambre ¿Ok? — ella negó divertida con la cabeza e hizo un puchero con los labios, besé su puchero y me levanté para después agarrar la comida y sentarme en el sillón para comer mi pasta con ensalada de pollo.

Pov Paula.

— oh, si muy bien gracias — le dije a la enfermera para comenzar a caminar hacia la habitación de Poché.

Caminando por aquel pasillo me encontré a un chico demasiado guapo, cabello castaño, ojos color café claro, un poco más alto que yo ¡Dios! Es demasiado guapo, pude notar que salió de la habitación de Poché ¿Este chico guapo que estaba haciendo en la habitación de Poché? Ahhhh, todo se aclaró cuando vi su mandil, supongo que había traído comida.

El chico me miró y me sonrió, le regresé la sonrisa y en ese momento sentí como toda la sangre subió a mis mejillas, pasó a mi lado y siguió caminando al igual que yo solo que en diferentes direcciones.

Antes de llegar a la habitación otro chico salió de esta ¿Qué denominios? ¿Acaso son todos los pretendientes de Poché?

Este chico también estaba guapo ¿Que digo guapo? ¡Precioso! Creo que hoy tengo dos nuevos crush que nunca volveré a ver en mi vida. Este chico al igual que el otro me sonrió y yo también le devolví la sonrisa.

— ¡Ehhhhh! No te recomiendo que entres — me detuvo aquel chico, lo miré confundida — arreglando problemas de pareja —

— ¿Pareja? — seguía sin entender.

— si, de novias...

— ¿Novias?... ¡Dios! ¡¿Ya son novias?! ¿Cuándo sucedió? ¿Por qué yo no me había enterado? — comencé a preguntar.

— hey... Tranquila — el muchacho comenzó a reír — ¿Quieres tomar un café mientras ellas terminan de arreglar asuntos de celos? Ah por cierto soy Eder — ¿Eder? Ese nombre me suena.

— ah, si claro — comenzamos a caminar — yo soy Paula —

Pov Poché.

¿Por qué Daniela estará tan hermosa? No sé que hice para traerla a mi vida, simplemente es perfectamente imperfecta.

Me quedé un momento más observándola mientras devoraba su ensalada, tenía una ganas inmensas de ir, quitarle la ensalada de las manos, besarla y que me dejase con el sabor de esa ensalada que se veía tan delicioso, pero no más que Daniela.

Agarró la bolsa de papel donde venía la ensalda, y miró hacia adentro, las dos fruncimos las cejas ¿Qué habia dentro de la bolsa de papel? Mis dudas se fueron y los celos regresaron.

Sacó un papelito con un nunero telefónico, supongo que es del chico que le regaló aquella ensalada.

Me miro y sonrió pícaramente ¿Está pensando en llamar a aquel chico? Comencé a negar con la cabeza.

Cerré los ojos un momento y cuando los abrí ya no estaba, había salido de la habitación en segundos.

¿Qué mierda piensa hacer? ¿Prefirió irse con el chico que le regaló la comida o que onda?

Minutos después de llegar a la conclusión de que si me dejó y se fue muy lejos con aquel chico, regresa muy sonriente.

Yo estaba muy enojada ¡Obvio que había ido con aquel chico! ¡Mierda!

— amor, mira lo que conseguí — la miré y tenía un celular en la mano, seguía enojada eso no justificaba nada y miles de hipótesis recorrían todo mi cerebro — ¡Dios mío! ¡Poché! Pensé que yo era la más celosa, pero ahora lo estoy dudando — se acercó a mí — no me digas que pensaste que había salido directo hacia aquel chico — no dije nada y quité mi vista de ella.

Pov Calle.

¡Madre mía! Pensé que yo era la celosa, pero ahora veo que no, Poché es una celosa, la celosa que yo amo.

— fui por un celular para hacer una  broma telefónica — sonrei pícaramente.

— ¡Wow! ¡Que emoción! — dijo irónicamente. Volteé los ojos y me acerque a ella.

— ¡Amor! Eres una celosa — acerque mi cara a la suya. Quería sonreir, pero se reprimía — pero ¿Sabes? Me encanta que seas celosa, así yo te puedo encontentar con mis besos — dejé un beso en su sien — todas — beso cerca de los labios — las — otro beso — veces — beso en su boca — que sean necesarias —

Comencé a dejar besos desde el lóbulo de su oreja hasta su pómulo, de ahí baje hasta la comisura de sus labios y terminé estampando estos sobre los suyos creando un beso.

Después de ese beso nos dedicamos a hacer bromas telefonicas todo lo que restaba del día y después dormimos, yo en el sillón y ella en la camilla.





Sólo Yo (Caché) | Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora