Cap. 64 - A donde vamos.

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— ¿¡Qué!? ¡Nooooo! — dijo gritando con cara seria, evidentemente me asustó, estoy segura de que se lo tomara de lo peor — ¡Calle! ¡Eso es genial! — frunci el ceño.

— ¿Qué? —

— ¡Por dios Calle! ¿Pensaste que me iba a enojar porque me atrae esa chica que ahora me dices que es el amor de tu vida o el amor de todas las etapas de tu vida? —

— wow, esa pregunta es larga, pero sí, si pensé eso —

— ¡Para nada! Obviamente no iba a perder mi amistad contigo por esa chica que evidentemente es tuya, osea si le tengo ganitas y eso pero...

— no, no, no evita tenerle ganitas porque es mía — la miré seriamente.

— pero... Calle ¿Cómo te sientes? —

Suspiré y baje la mirada.

— Awww, amiga ven — dijo estirando sus brazos y acercándose a mí.

Yo simplemente me deje llevar por ese abrazo tan cálido y lindo que necesitaba hace tiempo.

— Pues... ¿Qué te digo? Es un sentimiento extraño, me siento triste y feliz a la vez, osea si pega duro que la chica que amaste y amas tanto no se acuerde de ti, que ni siquiera se acuerda de cuanto me amaba, que hasta arriesgó su vida para no entregarme a la estúpida de Matu — me miró y me volvió a abrazar — pero feliz porque ahora que sé que la veré y obvio no voy a perder la oportunidad de volver a hacer una vida con ella aunque ella ahorita está confundida de su orientación, pero me encargaré de cambiar eso — dije sonriedo como estúpida.

— Calle, sabes que yo te ayudo en lo que sea, así que por lo tanto te ayudaré a conquistarla de nuevo ¿Va? — dijo apretando mis cachetes — Jaja, no sabes cómo me gusta hacer eso

— ¿Cómo no voy a saberlo si a cada rato lo haces? — dije con el ceño fruncido.

— cállate y vamos a comprar churros — dijo jalándome hacia un carrito de churros.

(...)

— Vane, Kim... Las solicito en mi apartamento lo más rápido que se pueda, es demasido urgente — mandé un audio de voz y me dedique a manejar.

— ¡Y los muertos aquí lo pasamos muy bien! ¡Entre flores de colores...! — entré cantando muy feliz al departamento.

Valentina se levantó lo más rápido que pudo de la banqueta en la que estaba sentada y me miró con los ojos abiertos.

— ¡Y los viernes y tal si en la fosa no hay plan! ¡Nos vestimos! ¡Y salimos! ¡Para dar una vuelta! ¡Sin pasar de la puerta eso sí!

— ¡Ayuda! ¡Daniela! ¿Estás bien? ¡Dios! — sacó su celular y comenzó a marcar — ¡¿Kim!? Si ¡Necesito que marqués al 911! ¡Es una emergencia! ¡Estoy temiendo por mi vida! ¡Enserio! ¡Kim! ¡Por favor! ¡Parece que se le metió un demonio a Daniela! ¡No! ¿Sabes que? Mejor llama al exorcista no al 911 ¿¡Qué!? ¿Ya están afuera? ¿Cómo llegaron rápido...

— ¡Vale! ¡Ven y abraza a tu querida cuñada! — dije con una gran sonrisa, extendiendo mis brazos y caminando hacia ella.

— ¡Ahhhh¡ ¡Kim! ¡Vane! ¡Ayuda! ¡Me va a matar! — estaba apunto de tocarala cuando el timbre suena y tres toques en la puerta aparecen.

— ¡Pufff! ¡Que aburridas! — dije volteando los ojos y caminando hasta la puerta para abrirla — ¡Entren rápido y tirense en el sillón! — dije abriendo la puerta con una sonrisa.

— ok, ahora sí te creeré Vale. Vane, Calle necesita ser atendida por un exorcista — dijo entrando para después sentarse junto con Vale y Vane en el sofá — su sonrisa de Jeff the killer me está asustando demasiado.

Sólo Yo (Caché) | Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora