Cap 8 - La mujer malvada

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La carne de ratón había saciado un poco su hambre, ¡pero todavía tenía hambre! ¡Quería más carne!

Mientras pensaba, olfateó el aire una vez más. ¡Un ligero aroma vino de lejos, indicando claramente la presencia de una fuente comestible!

Siguió olfateando y no pudo evitar seguir el aroma. Nuevamente se retorció por el bosque, abriéndose camino para llegar a un prado cubierto de maleza. Las hierbas eran altas, de aproximadamente un metro de altura y llegaban a sus muslos.

Siguió el aroma y notó que se hacía más y más fuerte después de llegar a este prado. Sin embargo, cuando caminó hacia cierto lugar, el aroma desapareció. Miró hacia el suelo, sintiendo una extraña certeza de que la fuente del aroma estaba debajo de sus pies.

Se puso en cuclillas y miró hacia las bases, encontrando un lugar que no tenía pasto creciendo sobre ellas.

Rastrilló el área con sus garras y encontró que la tierra era suave. Parecía haber un agujero allí, posiblemente un agujero de conejo.

Sin pensarlo, comenzó a cavar rápidamente con ambas manos. Descubrió que sus nuevas uñas eran especialmente útiles como herramientas de excavación. Estas uñas incluso pudieron penetrar cráneos de zombis, por lo que seguramente no encontraron resistencia de la tierra.

¡Manejó sus brazos y cavó muy rápido! Muy pronto, había creado un gran agujero que estaba conectado a un túnel mientras cavaba a través de él.

En solo unos minutos, ya había cavado medio metro de profundidad en el suelo. Mientras estaba cavando, una figura gris salió repentinamente del túnel.

Afortunadamente, las reacciones de Lin Qiao fueron lo suficientemente rápidas, además de que ya estaba preparada. Cuando la criatura gris salió corriendo, extendió la mano y apretó los dedos, agarrando un animal esponjoso.

Lo levantó y echó un vistazo. '¡Guau! ¡Qué conejo tan grande! El tamaño de este conejo ya no era el mismo que el de los conejos comunes. Este conejo en su mano era dos veces más grande que los conejos normales, casi tan grande como un joven perro chino rural.

Después de ver a este conejo gris, un pensamiento cruzó por la mente de Lin Qiao, '¡Ahora, esta es una comida completa!'

El conejo en su mano era bastante feroz. Le dio una patada en las piernas con una fuerza sorprendente y empuñó sus patas delanteras salvajemente, luchando intensamente y girando su cuerpo para tratar de liberarse de su agarre.

Sus uñas ya se habían hundido en la piel del conejo cuando agarró la piel peluda de su espalda. El conejo luchó con tanta fuerza que Lin Qiao no pudo evitar desnudar sus dientes, abrir la boca y morderle el cuello.

Aproximadamente media hora después, Lin Qiao se secó la boca y miró el pelaje limpio de conejo en su mano.

Se preguntó si podría recoger la piel de conejo en su espacio.

Mientras pensaba en esto, miró el pelaje en su mano y dijo una palabra en su cabeza.

'¡Recoger!'

Tan pronto como terminó de pensar la palabra, la piel peluda desapareció de su mano, desapareciendo en el aire.

'¡En!'

Después de pensar eso, ella también desapareció sin dejar rastro, reapareciendo en el prado poco después.

La razón por la que entró en el espacio fue para verificar si la piel del conejo estaba realmente allí. Como esperaba, este espacio también podría recoger cosas para ella. Para recolectar algo, no necesitaba tomarlo en sí misma y solo necesitaba tocarlo.

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