Cap 13 - El aroma en el aire

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Lin Qiao caminó hacia una ventana al lado de las escaleras en el edificio y miró hacia afuera. A los ojos de los humanos comunes, solo había oscuridad afuera. Los edificios, las plantas y todas las demás cosas en el suelo eran solo sombras y sombras en la tenue luz.

Sin embargo, Lin Qiao pudo ver todo claramente. Los zombis no podían ver los colores, pero los ojos de Lin Qiao eran ligeramente diferentes de los de los zombis comunes.


Sus ojos eran incluso más oscuros que las sombras de la noche. Abrió los ojos de par en par y pasó la mirada por el área que se podía ver desde la ventana. Sin embargo, incluso después de buscar por un tiempo, no detectó ni una sola luz. Supuso que esas personas estaban teniendo cuidado de no llamar la atención.

Después de observar las cosas un poco más y aún no ver nada, sus ojos brillaron mientras cambiaba su forma de buscar.

Levantó ligeramente la barbilla, cerró los ojos y olfateó cuidadosamente el aire una y otra vez.

Se había dado cuenta de que su sentido del olfato era ahora incluso más agudo que el de los perros. Como había esperado, después de pasar un rato oliendo el olor de los vientos alrededor de los altos edificios, sintió algo especial.

Entre todos los olores que detectó, el más fuerte fue el rancio hedor de los cuerpos de los zombis. También detectó algunos olores extraños de plantas y animales mutados, pero eran débiles, diluidos por otros aromas en el aire.

Por ahora, podía distinguir los olores, especialmente los de las personas vivas y los zombis. Sin embargo, todavía no sabía el alcance de su sentido del olfato.

Olfateó durante bastante tiempo en este edificio alto, detectando todo tipo de olores, pero no encontró ninguno que perteneciera a seres humanos vivos.

No quería darse por vencida, así que caminó sin rumbo por este piso, luego corrió en la otra dirección y encontró otra ventana. Quitó el cristal de la ventana, asomó la cabeza y olfateó tan fuerte como pudo.

Pero aún así, no detectó ningún rastro de seres humanos vivos mientras estaba de pie en este edificio.

Encontró esto un poco desconcertante. ¿Ese hombre no enviaría a su gente a buscar a su hija? ¿Por qué no podía detectar a ningún ser humano vivo en esta área?

¿Debería quedarse con la pequeña si no lograba encontrar a su familia?

Lin Qiao luchó un poco con este pensamiento.

Ahora era una zombi, y no importaba lo hambrienta que se sintiera, parecía que no podía morir. Pero a diferencia de ella, la pequeña en su espacio era un ser humano vivo, una niña de cinco años. Un ser humano necesitaba comer, especialmente un niño. Si no tuviera cuidado, la niña podría enfermarse, y eso sería problemático.

Pensando en la pequeña, Lin Qiao de repente se dio cuenta de que no había estado sintiendo nada de ella desde hace algún tiempo, y ya no podía escuchar sus gritos. ¿Y si la niña hubiera tenido un accidente? Este pensamiento cruzó por la mente de Lin Qiao, y volvió rápidamente a su espacio.

Una luz brillante brilló en sus ojos y luego apareció en el espacio, que todavía estaba brumosa y no tenía sonidos que perturbaran el silencio.

Los ojos de Lin Qiao recorrieron el área y encontraron el pequeño cuerpo de Wu Yueling acurrucado en el suelo, envuelto en la pequeña manta.

Su corazón se hundió cuando se apresuró. Reprimiendo su impulso de comer, se agachó para observar el color en la cara de la niña. Su rostro estaba muy pálido, al igual que sus labios, y los bordes de sus ojos eran oscuros y azulados.

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