"Pov Susan"
Realmente fue una fiesta genial, todos lo pasamos muy bien bailando hasta tarde. Sólo que cuando pusieron lentas Carlos se agobió un poco al echar de menos a Alexa ya que hasta el día de la boda de Camille, o sea en dos días no volvía de Europa con la niña. Pero entre todos intentamos que lo pasara bien. Mientras bailábamos lentas Logan pegó todo mi cuerpo al suyo por lo que cada vez tenía más y más calor.
Logan - ¿Lo estás pasando bien?
- Es una fiesta genial, el vestido precioso, el anillo una pasada y aún no me creo que nos vayamos a casar.
Logan - Pues créelo y aún me quedan un par de sorpresas más.
- ¿Tendré que esperar mucho?
Logan - No mucho, en cuanto nos vayamos de aquí.
- Cuéntame algo, anda.
Logan - No, sino ya no es sorpresa.
- Mira que te portas mal conmigo - Apoyó su frente en la mía y mirándome fijamente a los ojos me dio un beso de lo más apasionado.
Logan - ¿Aún crees que me porto mal?
- Tendrás que hacer mucho más que besarme para convencerme - Logan me miró con una sonrisa muy pícara.
Logan - ¿Cómo que podría hacer?
- ¿No se te ocurre nada? ¿acaso no me echaste de menos este mes que no estuviste? - Logan se acercó y me susurró al oído.
Logan - Lo tengo todo preparado, va a ser una noche que no vas a olvidar jamás - Como ya era tarde nuestros amigos decidieron irse para sus casas. A mi en parte me daba pena y en parte alegría, quería saber que tenía preparado ese loco. Así que en cuanto se marcharon fue a hablar con el dueño y nos fuimos de allí. Me subí al coche y me pidió que me tapara los ojos con un pañuelo, sin rechistar lo hice, condujo un rato y cuando paró me dijo que ya podía mirar. Estábamos frente a una preciosa casa - Bienvenida a tu nuevo hogar. Bueno el nuestro.
- ¿Me estás diciendo que es nuestra? es preciosa.
Logan - Como ya te dije, hacía tiempo que pensaba pedirte que te casaras conmigo así que antes de irnos de gira la compré - Me abracé a él y le di un beso.
- Mi vida, me encanta.
Logan - Aún tienes que verla por dentro pero no será hoy.
- ¿Y eso por qué?
Logan - Porque aún me queda una última sorpresa, así que vuélvete a tapar los ojos por favor.
- Está bien ¿me ayudas? - Me tapó los ojos de nuevo y volvimos a coger el coche. Yo ya estaba atacada de los nervios. Bajamos del coche y entramos en algún lugar y subimos en un ascensor.
Logan - Ya puedes quitártelo... ¿te gusta?
- ¿Gustarme? Es genial ¿pero dónde estamos?
Logan - En el mejor hotel de Los Ángeles ¿sabes que te eché muchísimo de menos este mes? - Se acercó poco a poco a mi y empezó a besarme, al principio tierno pero que se volvieron más y más ardientes. Me quitó el vestido dejándome en ropa interior y yo le desabroché la camisa dejando su torso desnudo. Me cogió en brazos y me llevó a la cama y empezó a besarme por todo el cuerpo volviéndome loca. Paró en seco y me miró.
- ¿Por qué paras?
Logan - Quiero recordar esto para siempre y quería ver tu cara al disfrutar.
- Pues si no quieres ver mi cara de cabreo ahora mismo continúa con lo que hacías.
Logan - Tus deseos son ordenes, haces que me vuelva loco.
- ¿A si? - le quité de encima y me puse yo sobre él, le quité la camisa y los pantalones y empecé a acariciarle y besarle por todo su cuerpo. Tenía razón, fue una noche que no olvidaré jamás, no dormimos mucho pero la disfrutamos al máximo. A la mañana siguiente me despertó con una bandeja de desayuno con todo lo que me gustaba. Así que ambos tomamos el desayuno metidos en la cama.
Logan - ¿Y qué te apetece hacer hoy?