Capitulo 1: Triste despedida

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     Me levanté el domingo con un fuerte dolor de cabeza, había dormido muy poco y me dormí llorando sin parar. Mi móvil empezó a vibrar... era un mensaje de Álex, quería hablar conmigo con urgencia. Me levanté de un salto, le contesté que nos veríamos en la cafetería de siempre en una hora y me fui a la ducha. Me sentó de maravilla y me vestí bastante informal, me despedí de mis padres y fui al encuentro de mi amiga... cuando llegué ya estaba esperándome, la abracé y me senté. Jorge, el camarero, se acercó enseguida...

     Jorge - Hola Su ¿ponemos lo de siempre? ¿café con leche y bollo de chocolate?

     Susan - Si porque no... será una buena despedida.

     Jorge - ¿Cómo que despedida?

     Susan - Si, mañana me marcho a Estados Unidos... a mi padre le salió trabajo allí - Jorge se quedó mudo y blanco de repente, dio media vuelta y se fue hacia el mostrador. Me quedé parada, no entendía que le afectara tanto mi marcha, apenas habíamos hablado en un par de ocasiones... Álex me sacó de dudas...

     Álex - Pobre Jorge, le da mucha pena que te vayas.

     Susan - No entiendo porque.

     Álex - Él siempre ha estado enamorado de ti, y cuando al fin se atrevió a confesarte sus sentimientos empezaste a salir con "don Julio" - Yo sabía que a mi amiga no le gustaba demasiado mi novio pero dijo su nombre con mas rintintín de lo normal...

     Susan - Álex se que no aguantas demasiado a Julio pero ¿me dirás ya por fin el motivo?

     Álex - ¿En serio quieres saberlo?

     Susan - Claro, cuéntamelo.

     Álex - Vale, tu misma... tu novio te es infiel, siempre lo ha sido y siempre lo será - ¿Sabéis como cuando te cogen el corazón y te lo aplastan? esa fue mi sensación... las lágrimas inundaron mis ojos y me quería morir en ese instante. En ese momento apareció Jorge que sin mirarme dejó mi desayuno en la mesa. Álex lloraba y yo igual, Jorge se dio cuenta y sin decir nada me abrazó. Fue un abrazo lleno de ternura y que necesitaba en ese mismo instante.

     Susan - Gracias Jorge.

     Jorge - No es nada Su, para eso estamos los amigos - Le miré a los ojos y vi que los tenia llorosos también, me besó en la mejilla se despidió y se fue a seguir con su trabajo, nos quedamos Álex y yo mirándonos y le pedí que me explicara lo que había afirmado...

     Álex - Su, amiga, sabes que te quiero como a una hermana y tenía que decírtelo, ya sospechaba de su infidelidad pero ayer lo vi con mis propios ojos... Julio se besaba con mi hermana Sheila.

     Susan - Menuda...

     Álex - Si lo es, no estés mal por esa basura no vale la pena. Y mi hermana tendrá su merecido cuando a ella le ocurra igual, porque él se lo hará a ella seguro...

     Susan - ¿Y ahora qué hago yo?

     Álex - Vas a empezar una nueva vida, ábrete a ella, se tu misma y verás como todo te irá genial. Yo siempre estaré aquí para lo que necesites... - Ahí ya no pudimos más y nos abrazamos fuerte llorando, ojalá tuviera razón y todo fuera bien, pero tenía mis dudas, yo era bastante tímida y me costaba mucho hacer amigos. Llegué a casa a comer y mandé un mensaje a Julio decía esto... "Te quise mucho, pero yo fui un juguete para ti. Que la vida te pague con lo mismo que estoy viviendo yo ahora mismo. Adiós. Susana". Acabé de empaquetar las pocas cosas que me quedaban ya y pensé que al día siguiente mi vida cambiaría, cuanta razón tenía. Julio empezó a llamarme y no se lo cogí, no quería más mentiras. Cuando ya lo tenía todo recogido eché un último vistazo a mi casa, la casa que me había visto crecer a mi y mis hermanos y que no se si volvería a ver y me fui a acostar.

     Esta historia tiene como 90 capítulos, fue la primera novela que escribí. Me gustaría que se comente para saber si gusta.

En la distancia encontré el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora