No quise atormentarme con más ideas, así que como hacía buena temperatura decidí darme un baño en la piscina. Era genial estar un rato allí relajada y sin pensar en nada más que disfrutar del baño. Vi que Álex se acomodó en la hamaca de mi lado pero no le dije nada y ella igual a mi, estaba con su móvil y sonreía, supongo que hablaba con James. De golpe se levantó y sin decirme nada se fue ¿Qué habría ocurrido para que se fuera sin despedirse ni nada? ¿o es que aún seguía enfadada conmigo? Salí de la piscina y me tumbé al sol, de golpe algo se interpuso entre él y yo, al abrir los ojos vi que era Kendall que parecía muy enfadado la verdad.
Kendall - ¿Se puede saber qué te ha pasado con Logan?
Susan - Ante todo hola ¿no?
Kendall - No estoy para juegos ¿me respondes?
Susan - Si me hablas así, olvídate.
Kendall - Logan me llamó llorando, nunca lo había escuchado así. No se que le hiciste pero ponle remedio.
Susan - ¿Se puede saber con quién te crees que hablas? Yo no cumplo órdenes de nadie, así que no me impongas nada ¿vale?
Kendall - Ya veo que me equivoqué contigo, mejor será que no volvamos a vernos. Adiós.
Susan - A mi también me lo parece - Y salió de mi casa ¿Qué demonios acababa de ocurrir? Maldito orgullo el mío, en unas horas había perdido al que yo creía gran amor de mi vida, a Álex y a Kendall. Ahora si que tenía claro que tenía que empezar de nuevo, en otro lugar, con otros amigos... Tenia que irme de allí - ¡Mamá! ¿encontraste esos papeles?
Mamá - Si aquí te los traigo, pero dime ¿a qué viene tanta urgencia? - Yo empecé a llorar.
Susan - Tengo que irme de aquí.
Mamá - ¿Y eso? ¿Y qué pasa con nosotros? ¿y tus amigos?
Susan - Tengo que cambiar de vida. A vosotros os visitaré a menudo y ¿amigos dijiste? yo no tengo ya amigos.
Mamá - ¿Y Alejandra? ¿qué pasa con ella?
Susan - Ella ya eligió y como ves no fue a mi así que me matriculo en este instituto de belleza a estudiar diseño y en un par de días me voy.
Mamá - Bueno hija, ya eres mayor para hacer tu vida pero te echaré mucho de menos.
Susan - Y yo mamá. Sólo te pido que no les digas nada a Álex ni a mis ami... quiero decir ex-amigos.
Mamá - Vale, como desees - Llamé a aquel salón y había vacantes así que me apunté. No dije nada a nadie y en dos días me dirigía en autobús a mi nuevo hogar, una residencia de estudiantes al lado de la academia. Compartiría apartamento con una tal Lola. Al llegar estaba muy nerviosa porque no sabia como iría todo. Abrí la puerta del apartamento.
Lola - Hola, soy Lola, tu debes de ser Susan ¿no? encantada.
Susan - Hola, pues si soy Susan pero puedes llamarme Su, encantada igual - Parecía ser muy simpática, me dijo que dejara las cosas y que le acompañara que la clase iba a empezar ya, así que me fui con ella.