La Muerte del Villano ^^Kny (SabiGiyuu)

Hagamos un trato entre los dos

Cuando abrió de nuevo los ojos era de noche, tal vez ya era bastante avanzada la noche por la cantidad de vela que quedaba en la que estaba en una mesa al lado de su cama. El dolor había disminuido en gran manera, lo que sea que le habían dado funciono perfectamente y agradeció eso.

Busco sentarse afincándose en su mano izquierda, se sentía bastante débil, era la falta de comida. Su estomago gruño con fuerza y su cabeza daba vueltas, para estar dos días sin comer podría estar peor.

Quito la sabana que le cubría y movió sus piernas con las pocas fuerzas que le quedaba, necesitaba comer.

— Espera, ¿Qué haces? — La voz preocupada y adormilada de Sabito le detuvo, el chico se movió rápido y de un momento a otro estaba en su cama sosteniendo su brazo izquierdo y luego paso a un leve abrazo — gracias a los dioses, estaba tan preocupado.

— Tengo hambre — solo menciono eso, no sabia como responder al abrazo del chico.

— Llamare a alguien que te traiga algo de comer, tu te tienes que quedar en cama — el chico se levanto rápido de la cama parecía algo animado, feliz.

— Yo puedo con eso — Menciono tratando de levantarse, sus piernas temblaban.

— Giyuu estas débil, debes descansar — el chico se coloco frente de el un poco preocupado y trato de que se acostara.

El de cabello oscuro estaba a punto de ponerse a pelear, pero ni tenía la fuerza para eso. Además, el de cabello rosa tenia razón, ni podía con su alma en ese momento. Solo dejo salir un suspiro cansado y se sentó de nuevo en la cama. El mayor no tardo de salir de la habitación casi corriendo para buscarle algo de comida y Giyuu solo se le quedo viendo.

Se quedo en la oscuridad de su habitación levemente alumbrada por una sola vela, se sorprendió al notar que su cuerpo no apestaba como debería por estar 2 días completos en la cama y supuso que Hitomi fue quien le limpio. Se sintió muy avergonzado por eso.

Llevo su mano izquierda a su cabeza si efectivamente estaba vendada alrededor de su frente y con una gasa del lado derecho casi en la parte trasera, ahí debió de ser donde se rompió. La cabeza era una zona muy sensible y con un corte podría salir mucha sangre y asustar a cualquiera por más pequeña se sea la herida. Si juzgaba el vendaje de su brazo derecho era probable que se haya roto la muñeca nada más.

Sabito volvió más rápido de lo que pensó y con una bandeja de comida, frutas y pan. Por la hora los sirvientes de la mansión estaban dormidos y el chico solo tomo lo primero comestible y fácil que vio en la cocina. Se sentó al lado del menor y coloco la bandeja al lado de ellos. Giyuu agarro una manzana e iba a llevarla directamente a su boca para comerla de una vez, con piel y todo; aunque fue detenido por Sabito.

— Espera, hay que quitarle la piel antes...

Lo ignoro y solo mordió la manzana.

— Lo que no mata, engorda — siguió comiendo la manzana.

Tenía mucha hambre para ponerse a buscar un cuchillo y de paso no tenía sus dos manos útiles para hacer eso. Podia sentir la mirada del contrario encima de el, pero siguió comiendo, manzanas, peras y frutos rojos. Sus dedos y barbilla se llenaron un poco del jugo de los frutos rojos, pero no le importo siguió comiendo todo estaba muy delicioso.

— ¿A dónde se fueron todos tus modales? — pregunto con cierta dulzura en la voz Sabito y tenia una pequeña sonrisa en su rostro.

Como era común respondió con silencio, trato de ignorar al contrario. Pero este saco un pañuelo de su bolsillo y limpio con cuidado su boca cuando termino. Se quedo en silencio y mirando aquellos ojos color lavanda que le veían con cierta felicidad en sus ojos.