Capitulo 100: Un beso que sabe a gloria

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     Pov Natalia:

     Subí corriendo a mi habitación y sobre mi cama había una caja, envuelta con un gran lazo rojo. "Que raro, hoy no es mi cumpleaños ¿por qué me habrá hecho un regalo Dylan?" pensé para mi, pero enseguida lo abrí. Eran unos patines en linea, en el interior de la caja había una nota...

     "Nat: ¿Te apetece pasar un rato conmigo patinando? Te espero en el paseo de la playa a las cinco. Sino vienes entenderé que no quieres verme. Te espero guapísima."

     No quise perder más tiempo y los puse en mi mochila y salí escopeteada de nuevo de casa en dirección al paseo. Llegué justo a la hora y allí me esperaba él, de lejos ya resaltaba, estaba guapo hasta con ropa deportiva.

     Dylan - Viniste...

     - ¿Creías que no lo haría? - dije llegando hasta él.

     Dylan - Tenía mis dudas, hemos estado un poco distantes últimamente y no sabes cuanto te he echado de menos.

     - Yo igual a ti, ven tonto - le dije abrazándolo - primero muchas gracias por el regalo, segundo... no quiero volver a distanciarme nunca más de ti... te quiero mucho.

     Dylan - Ya sabes lo que yo siento por ti, pero no podría soportar que las cosas fueran mal y dejaras de hablarme.

     - Eso nunca pasaría, pero he pensado mucho últimamente en ti... y no solamente en plan "amigo" - Me miró con los ojos muy abiertos y sorprendido. A mi me dio un poco de vergüenza y bajé mi mirada al suelo. Él sólo levantó mi cara con sus dedos y se acercó a mi lentamente. Notaba como mi corazón se me iba a salir del pecho, lo tenia a escasos centímetros de mi cara y muy lentamente rozó sus labios con los míos haciendo que todo mi cuerpo se estremeciera - Dylan, yo...

     Dylan - Perdona Nat, tal vez no tuve que hacer eso, yo sólo creí... - le agarré la cara y lo besé, cuando me separé de él... - te quiero Nat.

     - Y yo a ti, ahora ayúdame a ponerme estos patines y enséñame a patinar.

     Dylan - Encantado jajaj... ¿Y ahora tu y yo qué somos?

     - ¿Tu qué crees? - le agarré de la mano y entrelacé mis dedos con los suyos.

     Dylan - Ahora mismo soy el chico más feliz del mundo y todo gracias a ti.

     - Al final me pondré colorada jajaj.

     Dylan - Está bien, patinemos entonces - A mi se me daban muy bien los deportes y pensé que esto no sería diferente, pero caí varias veces al suelo. Por suerte Dylan me tenía bien cogida y no me hice daño. Fue un rato muy divertido - ¿Quieres pasear un poco por la playa?

     - Me encantaría - agarré su mano y nos unimos a otras parejas que paseaban enamorados por la orilla. A lo lejos vi a unos "conocidos" - ¡Su, Logan!

     Su - Hola chicos ¿qué hacéis por aquí? - me sonrió al vernos cogidos de la mano.

     Dylan - Creo que todos tuvimos la misma idea, pasear por aquí.

     Logan - El médico le dijo a Su que le diera el aire y por eso vinimos hasta aquí.

     Dylan - ¿Estás bien ya Su?

     Su - Si, mucho mejor gracias.

     - ¿Queréis pasear con nosotros? - Cuando Logan iba a contestar, Su le tapó la boca.

     Su - Nosotros ya nos vamos, me entró hambre. Hasta luego pareja jajaj - y se fueron.

     Dylan - Fue poco disimulada, se le notó que quiso dejarnos solos.

     - Así es ella jajaj, pues aprovechemos este momento de estar a solas. Conociéndolos a todos como lo hago, creo que no tendremos muchos de estos a partir de ahora.

   Al final tanto Nat como Dylan confesaron sus sentimientos, ¿que futuro les espera a todos ellos? Seguid leyendo en la tercera temporada :-)

Una triste realidad (2a temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora