Entre vampiros, lobos, híbridos y magos ~*los compas*~ Yaoi

#12

Anteriormente...

- Tranquilo Raptorcito, me quedaré en la cabaña, tu anda.

- ¿Seguro?... - preguntó dudoso el mayor.

- Sí, no te preocupes por mí.

- Ok

Decidieron que se prepararían unos días para la pelea y después saldrían de la protección del bosque para pelear.

En la tarde

Los compas como no podían salir de la cabaña estaban aburridísimos, pero intentaban gastar el tiempo grabando o editando. Claro que esto era muy incómodo ya que solo tenían una sala de grabación.

- ¡Necesito sangre! - le decía incontables veces Mike a Trolli.

- Calla ya, que nosotros también.

- Sabíamos que tendríamos que salir a cazar en algún momento, la comida humana no es suficiente. - comentó Rius.

- Para ustedes no, para nosotros sí. - dijo Víctor representando a los hombres lobo (Muzi, Raptor)

- ¿No nos acompañan a cazar entonces? - preguntó Timba.

- ¿Quién dijo eso? Que sí, que vamos.

Los vampiros sabían que los lobos no se negarían a salir de la cabaña, les gustaba la libertad y ahí mucha no tenían. Además aprovecharían de practicar para la pelea.

- Yo me quedo con Mayo, Jon, Acenix y Flex. - dijo Sparta.

- Ok, me quedo tranquilo entonces. - le respondió Raptor.

- Esperen un momento. - interrumpió la tostadora. - no salgan del círculo protector sin echarse esto. - les entregó unas pociones.

- ¿Para tapar nuestra aura? - preguntó Mike.

- Y olor al mismo tiempo.

- Bueno, nos vamos, volveremos en la noche. - se despidió Trolli.

Se fueron no sin antes rociarse la poción.

Con los vampiros y lobos (Trollino, Timba, Mike, Rius, Raptor, Muzi, Víctor)

- ¡EXTRAÑABA ESTO! - gritaba Raptor saltando de rama en rama. No se había transformado completamente en lobo, tenía las orejas, manos y cola, al igual que Muzi y Víctor.

- ¿¡Quién no?! - le seguía el perro-vampiro.

Trolli solo se miró con Timba y empezaron a hacer una carrera de quién volaba más rápido.

De pronto pararon en seco, había un ciervo. Como no tenía posibilidades ni se molestaron en guardar silencio y Muzi lo derribo, ya transformado en lobo.

- ¡Comida! - sonrió Rius.

Lo dejaron sobre una rama, no se lo comerían ahí mismo, no eran tan salvajes tampoco.

Siguieron corriendo por ahí, solo regresando con una liebre ya que a los demás animales los habían dejado ir, pues no necesitaban tanto.

Víctor paró de correr, lo que ocasionó que los demás siguieran el gesto.

- ¿Qué pasa?

- Había que practicar, ¿no? - dejó salir sus garras, sus orejas crecieron más, se agudizaron aún más sus sentidos, se le marcaron los músculos más de lo normal, los colmillos crecieron también.

- Cuidado chicos, se puso mamadísmo.