Empecemos bien:
19:00
– Spartita mgh⁓
– H-hombre ya... hm⁓ que tengo hambre, que quiero ir a comer con los demás.
El mayor lo estaba besuqueando en su habitación y le estaba impidiendo el paso.
– Ok, jeje... – le gustaba tanto el olor a limón que a veces no se resistía a él.
Cuando Raptor lo soltó, hubo un cambio en Sparta.
– ¡B-bebo! ¡te convertiste en un lobito!
En el lugar donde debería estar el menor había un lobo del mismo color que el pelo de Sparta.
– Que lindo... – le acarició la cabeza, el lobo bajó las orejas y movió la cola alegremente. – para volver a tu forma humana debes hacer lo mismo de antes, cuando te salieron las orejitas y la cola.
Sparta lo intentó, tardó varios minutos lograrlo, eso era mucho más complicado.
– Que raro se sintió eso... – no todos los días te conviertes en un lobo.
– Te acostumbrarás. – le dio un besito en la mejilla. – tanto me reclamabas que tenías hambre, vamos a comer.
– ¡Yeyyy!
Fueron a la sala para cenar con los demás.
– Adivinen quién se transformó por completo en lobito. – anunció con alegría el reptil.
– No sé, ¿tu madre? – dijo Mike.
– Nop
– ¡El peque! – gritó Timba.
– Sip
– Cada vez más severísimo el hombre. – dijo un recién transformado vampiro.
– ¡Soy severíiisimo! – gritó con alegría.
– ¿Mañana vuelve al cole? – preguntó Trollino.
– Pasado
– Pero yo creo que mañana ya está, míralo, se sabe transformar.
– Trolli, el peque va a volver pasado mañana, aún no controla su fuerza, puede hacerle daño a alguien.
– ¿No has aprendido a controlar tu fuerza peque?
– No, y Raptor tiene razón, le puedo hacer daño a alguien.
– Apreta mi mano. – el vampiro pelinegro se la extendió.
Sparta la sujetó algo dudoso.
– Ahora cierra tu mano lo más fuerte que puedas.
– ¡P-pero te la rompería!
– Hazlo, no pasa nada.
El menor apretó un poco.
– Jaja, claro que controla su fuerza, debe haber aprendido hace poquito.
– ¿Cómo sabes? – preguntó Raptor.
– Si no la pudiera controlar, me hubiera roto la mano sin más, aún no lo ha hecho y eso que ya aplicó presión, ¿entiendes?
– Entiendo... el no sería capaz de rompértela.. Sparta ya suéltalo.
– Oki
– Entonces volverá mañana mismo.
– Bueno, te lo acepto. – se sentó en la mesa de mala gana.
– Tranquilo, nada pasará. – intentó calmar a su novio.
– Lo sé, pero no me gusta. – le sirvió al menor un poco de carne.
– Uuh, nunca la carne me había parecido tan atractiva. – dejo crecer inconscientemente los colmillos.
– Bebo, esos dientecitos.
– Oh, perdón. – los hizo volver a la normalidad.
– Es normal que te pase cuando vez carne, a mí me pasa cuando veo a mi Mayito.
– ¡¡Vic!! – se sonrojó y los demás solo rieron por la broma.
– Pero debes controlarlos, ahora que sabes que pasa cuando vez este tipo de comida, no será difícil. – explicó Raptor.
Muzi y Flex no habían llegado aún a comer, cuando se aparecieron por el umbral de la puerta todo quedó en silencio.
– ¿Que pasa chicos? – preguntó el mapache. – están muy callados.
– Sí, ¿tan bien?
– Los voy a matar. – informó el reptil.
– Vaaleeee, que yo recuerde no te robé tus mangas. – Flex no se explicaba la repentina amenaza.
– Turbia la cosa. – dijo Rius.
– ¿No habrán hecho algo interesante en su habitación? – preguntó nerviosamente Timba.
Se tensaron al instante.
– No... me cago en tu prima... – Muzi había entendido.
– Mi*rda – insultó el mapache.
– No se preocupen, yo lancé el hechizo para que no se siguiera escuchando.
– ¡¡Mi héroe!! – Flex lo fue a abrazar.
– No es para tanto jeje... – empezaba a sentir la mirada de Víctor.
El mapache se separó rápidamente y se sentó en la mesa junto a su novio.
______________________________________
Mi primera historia con más de 1000 votos :'D
ESTÁS LEYENDO
Entre vampiros, lobos, híbridos y magos ~*los compas*~ Yaoi
FanficLos compas tienen un secreto que le ocultan a sus seguidores, tienen poderes sobrenaturales. Aquí ellos viven en una mansión, pero no todos tienen los mismos poderes, son de diferentes especies. Entra y deja de leer esta peda :v una aclaración, Flex...