Mi vista está clavada en el cielo, observando el día tan claro y soleado que hace hoy, en el cielo azul y las grandes nubes blancas que lo decoran dejando una bonita vista a quien lo admira.
Me quedo observándolo, ganándose toda mi atención y fijándome en cada detalle, en las formas de las nubes, en cómo se mueven tan lentamente que apenas es notorio a simple vista y en los pájaros que vuelan tan alto, lejos de lo que hay aquí abajo, algunos independientes y otros en bandada, acompañados en su viaje.Observar el cielo –sobre todo los amaneceres y atardeceres– siempre me relaja y consigue que mi mente se calle y mis pensamientos desaparezcan transmitiéndome relajación y paz.
Recuerdo cuando hace años, e incluso ahora algunas veces, cuando me encontraba mal o simplemente quería estar a solas o relajarme, iba al lugar más alto de la ciudad, a algún mirador o a la playa yo sola acompañada de mi soledad, mientras que mi único entretenimiento era el atardecer o amanecer.
Me encantaba ver la mezcla de colores que se producía cuando aparecían, los colores rosados, amarillos y anaranjados mezclándose y formándose un espectáculo increíble, consigue hacer que te olvides de los problemas y solamente te centres en los colores del cielo. Me podía tirar horas y horas observándolo hasta que amanecería o oscurecía, me transmitía y me transmite tantísima paz y calma, que me encantaba acudir cuando no estaba bien conmigo misma.
A día de hoy lo sigo haciendo pero menos de lo que me gustaría, llevo haciéndolo desde los catorce años, iba yo sola en bicicleta o andando y me tiraba en la arena sentada con las piernas encogidas mientras que admiraba el espectáculo que estaba frente a mi.
Es una opción sana, natural y que realmente consigue relajarte si sabes admirar el cielo. Es una de las mejores sensaciones.Suspiro hondo mientras que sigo mirando el cielo, relaje o mis mente y apagando mis pensamientos ignorando el ruido que hay a mi alrededor, como si todo estuviera en absoluto silencio y solamente estuviese yo sola ahora mismo, sin nadie más.
El cielo limpio azul y cubierto de nubes también tiene su encanto.Otra bandada de pájaros aparece en forma de una 'V' grande, volando todos juntos a la misma vez. Y después, aparecen algunos pero yendo a su rollo y solos, volando por ahí arriba a sus anchas, tan tranquilos.
Me fijo en cómo se mueven por el aire, tan campantes y tan a gusto, moviendo sus alas rápidamente para después dejarse caer en picado haciendo que el aire les lleve, cómo cuando el aire lleva a una hoja, hasta que vuelven a tomar impulso y repiten lo mismo una y otra y otra vez. Sin tener preocupaciones, sin los problemas de los humanos, sin nada. Simplemente siendo libres, volando tanto y tan lejos como deseen, tal vez sin rumbo, pero viajando y viendo el mundo. Sin nada que temer y sin nada que perder.Siempre he pensado que los pájaros son animales muy hábiles y astutos, a la vez que rápidos e independientes. Por eso tengo a el pájaro colibrí, uno de los animales que más me gustan, tatuado en el brazo. Representan: libertad, habilidad y protección.
Es uno de los tatuajes que más me representan y más significado tiene para mí. Por ejemplo: el ser libre, el tener la libertad de hacer lo que quieras sin que nada ni nadie te ate, sin que nada te retenga, ni ninguna persona, ni pasado, ni ningún dolor.
En muchas culturas lo consideran como símbolo de protección y de buena suerte. Y así lo pienso yo también, ofrecen protección y suerte, evitan las malas energías y atraen lo bueno.—Tú y tú admiración por el cielo, ¿eh?
Escucho una voz masculina cerca de mí y con pesadez retiro la mirada del cielo saliendo del pequeño trance de "relajación" en el que estaba metida, volviendo a la realidad.
Desvío mi mirada hacia el chico que está frente a mi, Raban me sonríe de lado y se sienta en la silla que hay al lado de mi, entregándome un botellín de cristal de cerveza fresca.
Lo agarro y asiento con la cabeza, medio sonriendo.
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ONITSED
أدب المراهقينHay veces en la vida que crees tener una buena vida. Que crees tener todo bajo control o al menos eso intentas, pero de un momento a otro, esa luz que estaba encendida y te alumbraba todos los días... empieza a parpadear. Hasta que finalmente esa...