Impera

Una con las aves

Al poco tiempo Twilight informó a Cadence que mandaría una de sus amigas a quedarse conmigo un tiempo, vigilando mi actividad, yo estuve con Janina viendo se pusiera bien, no tardo demasiado en hacerlo y le dieron un cuarto cercano al mío. Por su parte Cadence intercedió por mí y logró que Twilight mandara a una de sus amigas, que al menos no estuviera tratándome como criminal las veinticuatro horas.

Sin embargo, me sorprendió cuando me enteré que sería Fluttershy, aunque pensándolo fríamente, tenía sentido, Fluttershy se había posicionado de parte de Janina en lo ocurrido más no estuvo abiertamente encontrar o a favor mío como Starlight, era responsable y había logrado la redención de Discord.

Cuando llegó yo estaba en el gran balcón con Janina, Fluttershy fue llevada a nosotras por un guardia y esta se acercó diciendo:

-Hola a las dos me da gusto verlas, veo que tu amiga se ha mejorado Cozy ¿por qué no nos presentas?

Observé a Fluttershy le di una sonrisa, pasé mi mirada a Janina y continué:

-Janina, ella es Fluttershy, fue una de mis maestras, Fluttershy, mi amiga Janina.

-Un gusto – dijo Fluttershy con suavidad.

Janina no supo responder, solo se escondió detrás de mí, Fluttershy se rio suavemente al ver esa actitud que ella solía tomar en otra poni, se debió sentir curioso estar al otro lado de la moneda. Fue entonces cuando lo pensé ya que Fluttershy estaría conmigo un tiempo, tal vez podría aprovechar y aprender a comunicarme mejor con mi colibrí que me trajo, hasta ahora era solo mi compañía cuando estaba sola en mi alcoba haciendo trabajos o descansando.

-Sabes Fluttershy, me gustaría aprender mas sobre las aves, especialmente a comunicarme con ellas.

-Bueno no es tan sencillo, pero podemos ver que enseñarte, saber comunicarte con tu mascota es importante además puede abrir un mundo de posibilidades.

-Tenemos tiempo – le respondí

-Entonces no creo haya problema en que te enseñe algunas cosas.

Mostré una sonrisa a su respuesta y hablamos un poco más, los días siguientes comenzó a enseñarme, me explicó como hacia ella para entender las aves algunas formas de comunicarme a base de señas con mis alas. Pues me explico que siendo nosotros pegasos, seres alados, teníamos una serie de ventajas al adiestrar aves, una era la capacidad de seguirlas en vuelo, aparte que básicamente todas las señas de comunicación que me mostro eran hechas con las alas.

Aparte de estas clases, Fluttershy conoció a Ópalo y a Angelina, sin embargo, actuaron mucho más reservados con ella y más tranquilos. Iba a tener que ser así al menos por un tiempo. En una de nuestras salidas Angelina entretuvo a Fluttershy y Ópalo me aparto un poco preguntándome a modo de susurro:

-¿Sabes cuánto tiempo estará aquí?

-La verdad es que no, no me dijo.

-¿Por qué la mandaron?

-Le mande una carta a Angelina sobre eso

-¿El problema de la prisión?

-Sí, y al menos di que no soy una estatua.

Angelina, Janina y Fluttershy entonces se acercaron y continuamos nuestro paseo. Incluso cuando asistía a la escuela Fluttershy andaba rondando, tenía cierta curiosidad de saber exactamente que le había dicho hacer Twilight. Fuera de su constante presencia todo fue tranquilo, siguió enseñándome cuanto pudo, y viendo como practicaba junto a mi colibrí. Corregía algunas cosas y cuando veía ya lo dominaba me introducía nuevas, así funcionaba.

Un día mientras practicábamos un guardia nos interrumpió, había llegado una carta para Fluttershy, agradeció al guarda la leyó y al cerrarla me llamó a que me acercara. Fui con ella y la pegaso se levantó antes de decirme:

-Volveré a casa Cozy, Twilight ha dicho que esta complacida con como han ido las cosas y ya no requiere que te vigile.

-¿Entonces ya no soy sospechosa de nada?

-No dice nada sobre eso la carta, solo que recuperas la libertad que tenías antes de... de ese día.

-Oh bueno, en todo casó gracias por enseñarme Fluttershy seguiré practicando.

Ella asintió sonriendo antes de dirigirse a la puerta, una vez apunto de salir del gran balcón volvió a voltear y me dijo:

-Oh y escríbeme cualquier cosa que necesites respecto a tus mascotas, también si tienes alguna duda.

-Lo haré, cuidado en el caminó – le respondí, se terminó de despedir y fue a su alcoba a empacar para retirarse.

Una vez partió dejé, el acto, estaba tremendamente alegré de que se iba, pero también de haber podido aprender todo lo que me había enseñado. Ahora pasaba a probar mis propias técnicas. Quería probar si colibrí podía ayudarme más que en hacerme compañía, decirme si alguien se acercaba, donde estaba alguien, llevar mensajes, sí lo hacía podía darle varios usos.

Para saber si podía usarlo para mandar mensajes, primero debía ver si podía encontrar a alguien, eso sería lo primero a practicar. Al atardecer de ese día hable con Janina, le expliqué lo que planeaba y acepto ayudar, ella se escondería y el ave la buscaría. Muchas criaturas en Equestria a pesar de no poseer habla, posen cierta inteligencia a veces comparable a la de los seres más razonables, confiaba en que podían reconocer al menos siluetas, para esto Janina hizo un auto retrato.

Al siguiente día comenzamos, Janina se escondió en las cercanías del castillo y yo le ordene al colibrí buscarla, mostrándole el retrato.

Los primeros intentos no salieron como lo esperamos, pero eventualmente logro encontrarla, Janina regresaba con el colibrí en su lomo cuando esto pasaba. Entre más logró encontrarla, más distancia aplicamos, hasta que decidimos agregar algo más. Para esto usamos a Angelina sin decirle, la orden ahora era encontrarla y traer algo de regreso, algo perteneciente a ella, una pluma.

Sorpresivamente, el colibrí lo logró trajo la pluma y al siguiente día que fuimos a la escuela Angelina fue a nosotros y nos contó:

-¡Saben me paso algo demasiado extraño ayer, mientras estaba en mi jardín regando mis flores un colibrí bajo y se poso en mi lomo, lo observé extrañada y lo siguiente que hizo, fue arrancarme una pluma! Fue extrañó

Janina y yo nos vimos entre nosotras, reímos dejando confundida a Angelina una vez pasada la risa le dije:

-Ese fue mi colibrí mascota, lo mandamos a buscarte, le eh estado entrenando últimamente, te tenia que buscar y traer prueba de que te había encontrado

-¡Oh entonces fue su culpa! – Dijo riéndose – ¡Al menos avísenme!

Con el tiempo incluso enseñe al colibrí a moverse según le señalaba, a vigilar una zona por mí, comencé a sacarlo del castillo y le marcaba cuando llegaba a la escuela que vigilara y volviera a mi al ver llegar a Angelina, así lo hacía.

Con el tiempo adopte otros tres colibrís más que igual planeaba entrenar y cuidar, les había agarrado el gusto, fue entonces que Janina se acercó y me preguntó:

-¿Cómo les vas a llamar?

La observé llevándome un casco a la barbilla, no lo había pensado aun, debía darles uno.

-No sé, ¿tienes ideas?

-Tal vez, a esta podrías llamarla Artemisa, a esta otra Athena, y ¿Que tal si a este le pones Apolo?

-Sí me gusta, creo que así se quedaran, a la primera que tuve la llamare, Gea

-Suena bien – Terminó Janina sonriendo.

Los siguientes días comencé a familiarizarme con los nuevos colibrís si funcionaba bien todo lo que planeaba a la larga podía darme varias ventajas.