El ejército invencible

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A las afueras de Ponyhattan se empezó a reunir una fuerza militar jamás vista antes en la historia de Equestria, para la primera semana el ejército ya tenía una fuerza de 150.000 efectivos, para cuando termino de llegar el grueso del ejercito Equestre, el numero ascendió hasta los 300.000, disparándose hasta los 450.000 efectivos cuando se unieran a las fuerzas Equestres los Hippogrifos con 100.000 efectivos y los grifos con 50.000.

Twilight, reunida con la Reina Novo y con miembros del consejo grifo, paseo por el campamento militar, pasando lista de todos los efectivos disponibles, además de los presentes, las tres naciones contaban aun con sus milicias y reservas, de querer podían agrandar más el ejercitó, a coste de conscriptos y de dejar desprotegidas ciertas provincias tomando sus milicias para la batalla. sin embargo, esto no debía ser necesario con el ejército profesional que habían logrado reunir, debía ser suficiente. Aunado a esto un pequeño cuerpo de voluntarios dragón mandados por Ember se unió a su fuerza total, un pequeño grupo de cincuenta dragones con tres de estos siendo de gran tamaño.

Los dragones de por si eran uno de los estados más pequeños con menor índice de población con la pequeña ventaja de que prácticamente toda su población era guerrera. Aun así, con las bajas previamente sufridas y el declive de la moral, le era imposible a Ember levantar una fuerza suficiente para armar un nuevo ejercitó. Esos cincuenta voluntarios fue todo lo que pudo conseguirle a Equestria, aun así, Twilight pensaba que debía bastar, a pesar de que le hubiera gustado que la misma Ember se les uniera, entendía que su labor a con sus súbditos se lo impedía.

En cuanto a el equipamiento y tácticas de guerra atrasadas de los grifos, un esfuerzo conjunto de Equestria y los Hippogrifos logro dar una mejor instrucción a los oficiales grifo y armar con equipamiento moderno al menos una parte del ejército grifo. Sin embargo, todos los que quedaban con equipamiento atrasado, serian relegados a un papel de reserva en la batalla, o como fuerza de choque, al igual que los voluntarios dragón. La princesa Twilight aún se encontraba esperando noticias de sus aliados Bufalos y de los Kirin. Al final los primeros solo mandaron un emisario a informar que no pelearían en un conflicto que no les correspondía y los segundos mandaron un batallón voluntario formado por doscientos Kirin, pues como estado tampoco estaban dispuestos a entrar en conflicto abierto con los imperiales.

Sin embargo, similar a los grifos, el equipamiento de estos voluntarios kirin era viejo, armaduras laminadas, algunos traían una bandera al costado, incrustada en la armadura, de armas traían: naginatas, nodachis, kanabos, yaris siendo esta la más numerosa y algunos teppos, armas de fuego ligeramente más avanzadas que las de los grifos, pero más atrasadas que las Equestres, no eran un batallón con un equipamiento regularizado, eso si todos contaban con al menos una pistola de chispa y una katana como armas secundarias acompañada de un tanto.

Al ver este batallón voluntario Twilight lo relego también a ser una fuerza de choque en reserva, rechazaron el equipo que Twilight les pudo ofrecer, prefiriendo su propio equipamiento. Una vez la princesa terminara su recorrido por el campamento, pidió al alto mando preparar a los soldados para salir, había llegado la hora de marchar sobre el imperio.

Entre el ejército Equestriano, se encontraba Flower Dust dispuesta a limpiar su nombre en esta nueva empresa, había perdido a Flurry Heart y una fortaleza, pero ahora se aseguraría de que sus soldados fueran parte esencial del avance. Se le había otorgado el mando de la mayoría de regimientos de elite del ejército, significando que estaría buena parte de la batalla en reserva, hasta que fuera el momento indicado.

Antes de iniciar la invasión, Twilight acompañada del estado mayor y sus amigas, paso al frente del ejercitó, una vez este estuviera preparado para marchar, los observó, pasando su mirada por cada batallo. Contemplando las banderas de los diversos regimientos, las banderas del ejercito equestre, antes de comenzar a hablar en su voz de Canterlot:

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