27 La Coronación

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Twilight se quedó en el imperio, no partiría hasta que se cumpliera la coronación de Flurry la que quería presidir, apenas termino el funeral y Shining volvió al palacio hablo con el sobre esto, yo que igual iba a su encuentro espere afuera del cuarto, escuchando así lo que sucedía:

-Shining. ¿Cómo te encuentras?

-¿Cómo me encuentro? No lo sé hermana, mi esposa está muerta, mi hija apenas lista lanzada a la guerra de la política, el imperio siendo un campo duro.

-Ayudare a Flurry todo lo que pueda.

-¿Ayudaras? ¿Cómo ayudaste a Cadence?

-¿Qué insinúas?

-¿En verdad tan ciega eres a lo que pasa? ¿O solo no quieres creerlo?

-Si tienes algo que decirme dilo

-¡Claro que tengo algo que decirte! ¡Me has arrebatado a Cadence! ¡Dio su vida por dar energía al corazón, pues el ánimo de los ponis de cristal no es suficiente para darle fuerzas! ¡El imperio se cae a pedazos, desangrado por tu política y esa política desangro a Cadence también!

-¡Nunca quise la muerte de Cadence! ¡Si ella hubiera permitido las políticas de unificación podríamos haber solucionado los problemas

-No tiene sentido hablar esto contigo. ¿Qué diablos quieres hermana?

-Preceder la coronación de Flurry

-Es trabajo de la madre sacerdotisa, no tuyo. ¿Algo más?

Después de esta frase hubo un profundo silenció, supuse que Twilight no estaría nada feliz con la respuesta de su hermano, una negativa directa, sin oportunidad a negociarlo. Las miradas debieron decirlo todo porque lo siguiente que escuché fue la respuesta de Twilight, en voz baja y sería, decepcionada:

-No.

-Entonces sal de mi despachó.

Al terminar de escuchar la charla me marché al pasillo aledaño, al salir Twilight volví y entré, Shining se veía acabado, se le veía el dolor en los ojos. El unicornio solamente se encontraba ahí con un casco recargado al escritorio y con los ojos fijos en el retrato de la pared, en el que aún estaba con su amada. Al escucharme entrar volteó la mirada hacia mí, sonrió con dificultad, sin ser capaz de ocultar el dolor, regresó ambos cascos al escritorio y preguntó:

-¿Qué pasa Cozy? ¿Necesitas algo?

-No... nada en particular, solo venía a ver como estabas.

-Lo intento sobrellevar lo mejor que puedo, aunque, aun espero que todo sea solo un mal sueño, cada mañana despierto, y busco con mis cascos junto a mí en la larga cama, sin encontrar lo que añoro, cada noche espero leyendo un libro, esperando que la puerta se abra y entré Cadence con una sonrisa en el rostro, ahora por más que espero jamás llega... es como si cada noche se me rompiera el corazón al recordar, que ya jamás la veré cruzar aquella puerta.

Al verlo a punto de romperse, con lágrimas queriendo escapar de sus ojos, me acerqué más a él, tomé su casco, llamando así su atención, le di una tierna y dulce mirada con una cálida sonrisa y el instintivamente me abrazo, guardamos silencio mientras manteníamos el abrazo, lloramos en silencio y en silencio nos separamos y retiramos a nuestras respectivas alcobas.

Lamentablemente los siguientes días Twilight presento ante Shining documentos que validaban su postura diplomática, debía participar de alguna forma incluso si no la coronaba ella misma. Shining obligado tuvo que ceder, Twilight anunciaría la ceremonia y daría los honores, la madre sacerdotisa, sin embargo, seria quien corone a Flurry.

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