Flower despertó, para su sorpresa, aún con vida, desorientada, no sabía que había pasado, su mente estaba confusa, lo ultimo que recordaba era la marcha, el invierno atroz. Termino de despertar, levantándose de golpe cuando su mente reacciono, percatándose de que ya no estaba en la nieve, miro a su alrededor, se encontraba en una especie de cuarto, muros cristalinos, lo que le dijo aún seguía en el imperio. Salió de las cobijas, poniéndose de pie junto a la cama recorriendo el cuarto de decorado simple, unos muebles, la cama y poco más.
Aún se sentía algo entumida del cuerpo, pero le alegraba que el frio no hubiera reclamado ninguno de sus miembros. Sin embargo, le confundía su situación, estaba viva ¿Por qué? Solo había una respuesta alguien la había rescatado, pero ¿Quién? Salió del cuarto con intención de recorrer el lugar, era obvio por la casa que quien la rescatara era alguien bien posicionado. Por algunos artículos imaginaba era militar o al menos aficionado a ello lo que todavía le ocasiono más dudas de quien podría haber salvado a un enemigo.
Siguió vagando hasta que llego a otro cuarto, más grande y decorado, en este en un estante vio varias fotos, en una de estas creyó reconocer a un poni.
-Veo que despertaste. – pronunció una voz.
Flower se volteó inmediatamente, encontrándose con el mariscal Sergeí, lo había visto en la caída de la fortaleza que había estado a su cuidado y de nuevo en la batalla de Kromapolis, donde sus cuerpos de ejercito estuvieron enfrentados. Ella dudo un poco caminando hasta un lado de la cama, haciendo que esta quedara entre los dos, separándolos.
-No tienes nada que temer, no planeo hacerte nada malo.
-¿Por qué?
-¿Hmm?
-¿Por qué me salvaste? ¡Somos enemigos! ¡Nuestras naciones están en guerra!
-Lo sé, pero después de como te eh visto luchar, la voluntad de acero que has mostrado, no me parecía correcto dejarte morir en la tundra helada, si has de morir, te corresponde morir en batalla, no en una desastrosa retirada.
-¡¿Quieres matarme tu mismo?! ¡¿Es eso?! ¡Dame una espada y una pulsera proyectora y aquí mismo nos enfrentamos!
-En tu estado no podrás enfrentarme, estas débil, no confundas mis palabras, no tengo interés de enfrentarte, no aquí, sí hemos de enfrentarnos de nuevo será en un campo de batalla. puedes quedarte el tiempo que quieras, te recomendaría que al menos lo hicieras hasta que te recuperes del todo.
-No necesito tu piedad.
-Que necia eres, lo dicho, puedes irte si así lo quieres, pero intenta no llamar la atención, por el contrario, si esperas al menos hasta recuperarte, te acompañare y saldrás ilesa de la ciudad.
-¿La ciudad? ¿Estoy de regreso en la ciudad imperial? – cuestionó Flower caminando hasta una ventana y moviendo la cortina, confirmando las palabras de Sergei.
La había llevado a su hogar en la ciudad imperial, que ahora a diferencia de cuando la viera antes, estaba viva de nuevo, el invierno se había retirado de la ciudad y volvía a ser habitable. Flower dejó la cortina correrse nuevamente, no sabía que tan resguardada estaba la ciudad, tampoco era la mejor escabulléndose, lo mejor seria esperar y salir con Sergeí, tendría que confiar en él.
-¿Por qué volviste a la ciudad? ¿No deberías estar con el resto del ejercito?
-Los alcanzare, eso no será gran problema, aun no inicia el empuje sobre Equestria, pero pronto lo hará.
-No lograran avanzar.
-¿Qué puede hacer Equestria para evitarlo? Lo vi FLower, vi los rastros del ejercito real, sus aliados los abandonaron y su ejercito se ah reducido peligrosamente. ¿Cuántas bajas han tenido Flower? ¿A cuantos perdiste?
-...No lo sé, no se si queda vivo alguien de mi regimiento, pero Equestria aún puede defenderse.
-¿Con sus milicias? Tal vez, pero sabes tan bien como yo que será difícil unas milicias logren detener un ejército profesional. Se que si juntan todas sus milicias lograrían rearmar un ejercito grande, pero su experiencia no sería mucha y además eso significaría dejar sin guarnición gran parte de las ciudades y pueblos Equestres. Además, las noticias viajan rápido, solo lee esto y sabrás que tan mala realmente es la situación de Equestria. – Terminó Sergeí pasándole un periódico del Empire a Flower.
Quien lo tomó y comenzó a leer el simple título del articulo hizo que un escalofrió recorriera su lomo entero.
"¿Puede Equestria recuperarse?
La batalla de Kromapolis nos concedió a los Ponis de cristal la victoria en nuestra tierra, ahora avanzamos por Equestria liberando nuestras tierras del sur, pueblos que después de tanto tiempo vuelven a control imperial, con esto mucha de la población Equestre de dichos pueblos y ciudades ha huido al sur. La noticia de la terrible derrota del ejercito real resonó hasta Canterlot, la noticia de la captura de la princesa Twilight Sparkle, resonó aún más.
Estos eventos han creado el escenario perfecto para la inestabilidad en Equestria, se han levantado diversos grupos batponi buscando su independencia, en cuestión de tres días estos grupos han asegurado una buena porción del oeste Equestre. También salvajes de las tierras del sur han lanzado incursiones en el sur desértico Equestre, empujando con fuerza causando la pregunta: ¿Sonambula será capturada y saqueada? ¿Los salvajes serán capaces de empujar hasta Applelousa o Equestria lograra detenerlos?
Para el Imperio estas noticias podrían significar un tratado de paz pronto y beneficioso, algo esta claro. Equestria no podrá mantener una guerra en tres frentes, contra alguien deberá de ceder y no es una opción hacerlo contra los salvajes del inhóspito desierto."
Al terminar de leer el artículo, los cascos de Flower estaban temblando, la amenaza se había hecho demasiado grande para sostenerse, ¿Cómo lograrían superar tal adversidad? ¿Sus aliados volverían a su auxilio o los abandonarían?
Sergeí se levantó dirigiéndose a su cocina, Flower se quedó ahí pensativa, tenía que volver a Equestria, tal vez no seria mucho, pero tenia que hacer su parte en la defensa. Sin embargo, Incluso si lograba salir de la ciudad imperial, Sergei tenia razón, estaba debilitada, tenia que darse al menos un par de días antes de partir. Se retiro al cuarto del que saliera, Sergeí fue a verla, dejándole una pequeña cena, que ella no toco inmediatamente.
Se quedo ahí dos días, fue entonces que salió, con ayuda de Sergeí, pudo salir sin problemas de la ciudad, y siguieron el camino juntos por un tiempo más. Fue hasta alcanzada la frontera que se detuvieron y ahí mismo se observaron el uno al otro, ya encaminados cada quien hacia donde iría.
-Gracias, por salvarme y por cuidarme, si en algún momento puedo regresarte el favor, lo hare.
-No te preocupes, podrán nuestras naciones estar enfrentadas, pero no era forma de terminar tu viaje, tal vez si nos hubiéramos conocido en otras circunstancias...
-Sí, tal vez. – terminó ella, antes de terminar la despedida y partir.
Ambos sabían que tal vez volverían a verse, ambos sabían que ahora que se separaban volvían a ser enemigos y la próxima vez que se vieran, seria detrás de un arma, pero ambos guardaban también el deseo inexpresado, de que el otro sobreviviera.
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Impera
Hayran KurguCozy Glow a sido liberada de su prision de piedra por Twilight, pues su sobrina Flurry Heart cree que es posible rectificarla, sin embargo, puede que Cozy Glow encuentre redención de forma un tanto distinta a como Twilight lo espera. esta historia e...