Escaramuza

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Al poco tiempo de que escaparan del castillo, cargando una casi inconsciente Cozy Glow se dio la alarma, los soldados comenzaron a salir del mismo buscando a la fugada emperatriz y a sus rescatistas. El grupo de rescate no logro alejarse lo suficiente, por más que fueran a todo galope, los pegasos del castillo los encontraron, retirándose rápido para avisar a los demás guardias de su ubicación e iniciar la persecución.

Sergeí y Amatista no dejaron de correr tenían planeado llegar a un pueblo shire y esconderse ahí un tiempo, pero a este paso no lograrían perder a sus perseguidores a tiempo, cargando la carreta con ellos, acelerando más el paso cuando se percataron que ya los habían encontrado, sin embargo, Janina observaba al enemigo acercarse demasiado rápido. Los iban a alcanzar y la única en la carreta capaz de defender era ella, Cozy estaba parcialmente inconsciente y Ruby asustada.

-¡Deténganse esto no funcionara así! – Sentenció Janina

Sergeí y Amatista frenaron esta última volteando a ver a Janina mientras Sergeí observaba sus alrededores.

-¿Y qué hacemos? no podemos esperar a que vengan. – Renegó Amatista.

-Podríamos cambiar lugares, Ruby y Janina llevan la carreta tú y yo defendemos contra nuestros perseguidores. – sugirió Sergeí.

-Podría ser, trajimos nuestras pulseras proyectoras, pero no tenemos armas – añadió Amatista.

-Cuando estuvimos ahí, mientras Janina fue a salvar a Cozy, nos entregaron unas cajas, querían que las entregáramos a su cuartel en la capital ¿Qué traen las cajas?

Janina fue a una de estas cajas, viendo si podía abrirla, mientras tanto Sergeí y Amatista fueron desabrochándose de la carreta, Sergeí fue hacía Ruby para decirle que harían y Amatista ayudo a Janina a abrir las cajas. Lo que encontraron en la primera caja fueron mosquetes, en una más pequeña municiones y pólvora, en la tercera caja había pistolas y en otra caja estaban varias bayonetas para los rifles.

-Bueno solucionado el problema de las armas, pero no hay ni una espada, y las municiones que tenemos tampoco son demasiadas. – comentó Amatista

-Tendrá que bastar- dijo Sergeí mientras ayudaba a Ruby a amarrarse a la carreta – Ahora escucha e intenta calmarte Ruby, tendrás que correr, lo más rápido que puedas, Janina te apoyara, Amatista y yo las cubriremos constantemente, tu soló corre ¿entiendes?

La confundida y asustada Ruby solamente lo observó y asintió al tiempo que Janina se amarraba a la carreta, hecho esto Sergeí subió comenzó a cargar los mosquetes, Amatista ya había cargado uno y tomado unas cuantas de las municiones.

-¿Lista? – le cuestionó Sergeí a la pegaso shire.

-Estarás solo en la carreta, que nada le pase a la emperatriz. – respondió Amatista.

-¿Qué harás tu? – cuestionó Sergeí

-Lo que estoy entrenada para hacer como Húsar, les arrebatare una espada, intentare alejarlos de ti, y diezmar cuantos pueda con cargas aéreas. – explicó Amatista.

-De acuerdo, ¡pero mejor que lo hagamos ya! – sentenció Sergeí señalando al cielo, los enemigos venían.

Amatista inmediatamente emprendió vuelo y Sergeí se preparó a disparar al tiempo que gritaba:

-¡Vámonos ya!

Janina y Ruby comenzaron a correr, los pegasos equestrianos comenzaron a descender, eran carabineros, caballería aérea ligera listos para disparar apenas estuvieran en alcancé. Sergeí estaba igual de preparado para regresar cualquier agresión, cargando el mosquete con la magia de la pulsera, apunto y espero a que estuvieran en rango.

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