𝑬𝒍 𝑫𝒊𝒂𝒓𝒊𝒐 𝑫𝒆 𝑼𝒏𝒂 𝑹𝒆𝒊𝒏𝒂 𝒁𝒐𝒓𝒓𝒂 (Editando)

Capítulo 91

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—¿Para qué querías verme?

Se sienta frente a mí con mala cara. El restaurante está casi vacío y me alegra porque quien sabe que hará este idiota cuando le de la noticia

—Me imagino que tienes una idea de por qué estamos aquí

Se acomoda la corbata y niega con la cabeza sin prestar atención alguna, recuerdo cuando estuvimos así antes cenando en algún lugar parecido celebrando algún logró suyo estando casados. Pero esto terminó, ambos seguimos adelante y de los dos yo soy la que es feliz

—Dime lo que necesitas, si decidiste hablar con mi abogado debe ser alguna tontería que consideras importante

Sonrió —Siempre tan arrogante, rarito. Involucre a los abogados porque me ofrecieron un empleo en Chicago en una  empresa de marketing digital, y he decidido tomarlo

—¿Sin mi consentimiento? — suelta ofendido

—¿Qué crees que hago aquí? No creas que me gusta ver tu cara estúpida por las mañanas, quiero hablar como dos personas civilizadas de este asunto

Se cruza los brazos y mira hacia otro lado ofendido por completo, este es un caso perdido pero intento ser un poco más positiva

—Sabes que no es un buen momento para mí ahora en ningún aspecto de mi vida, hoy en día tengo problemas hasta con mi hijo. Ryland lo siento pero no quiero que te lo lleves

Suspiro exageradamente poniendo los ojos en blanco. Me acomodó la manga del vestido que se resbala por mi hombro

—Richard, tú y yo sabemos realmente en el fondo de la supuesta alma que tenemos que nunca has visto a Sebastián como tu hijo, siempre lo viste como una obligación que tenías por culpa de tu familia que solo traía niños al mundo para seguir con la familia. Nunca quisiste tener hijos porque ni siquiera te gustan

—Tienes toda la razón, jamás quise tener hijos pero los tengo y los quiero aunque no logres entenderlo en esa mente retorcida que tienes. No quiero que mis hijos me vean como yo miro a mi padre

—Lo miras con odio porque eso sientes, tu papá nunca estuvo contigo, jamás y ahora lo odias profundamente y lo evitas cada que puedes pero sabes qué aunque yo me lleve a Sebastián o no lo haga va a llegar un momento en su vida y créeme que llegara y no porque yo lo provoque sino porque él se dará cuenta de tu verdadero ser al crecer. Lo que pasará después es que será como tú, no querrá verte, ni hablarte va a fingir que no existes y eso te va a doler en alma

—Por eso no quiero que te lo lleves, me alejaran de él y luego le vas a meter ideas malas en la cabeza sobre mí

—Richard jamás le he dicho algo malo a nuestro hijo sobre ti, a pesar de que tengo mucho que podría decir. No quiero que crezca odiando a su padre como nosotros dos porque vivirá infeliz, pero tampoco vengas a darme el cuento de que al alejarlo se perderán porque es una mierda vives en el mismo lugar que él y tardas meses en visitarlo

—¿Y tú no crees que va a extrañar este lugar? ¿A tu familia, sus amigos? No puedes llevarlo le afectará muchísimo

—He hablado con él desde hace unos días sobre esto y esta emocionado por mudarse lo ve como una aventura, pero si en algún momento se siente mal o triste lo puedo solucionar yo porque ni siquiera en eso ayudas