𝑬𝒍 𝑫𝒊𝒂𝒓𝒊𝒐 𝑫𝒆 𝑼𝒏𝒂 𝑹𝒆𝒊𝒏𝒂 𝒁𝒐𝒓𝒓𝒂 (Editando)

Capítulo 33

—Ojalá no me hubieras visto — le dije avergonzada.

—No soy nadie para opinar — dice dando una calada.

–Eres alguien muy especial en mi vida, Erik— dije mirándolo.

—Pero no soy nadie para decirte algo sobre tu matrimonio, porque aún son esposos, así que lo que tú decidas hacer esta bien — dijo sin ánimos — de hecho, debo irme porque tengo que ir a recoger mañana temprano a mi hermana.

—De nuevo gracias por todo — asintió.

—Adiós, Rory.

—Adiós, Erik — esta vez no se acercó a besarme la mejilla solo se despidió con la mano.

Camine a la casa sintiendo que estaba siendo parte un paseo de la vergüenza o caminata lo que sea. Lassie me espera sentada en el sillón.

—¿Qué pasó? — pregunta con el ceño fruncido.

–Fue una de las mejores noches de mi vida y la cague Lassie — dije cerrando las puertas, pero de pronto ya la tenía cerca.

—Richard estuvo aquí ebrio buscándote, ahora los veo llegar y ambos están raros por favor dime que no volviste con ese pedazo de estiércol.

—No volví con él, solo me buscaba porque quería que habláramos de nosotros, me encontró tuvimos una conversación y después acordamos vernos mañana temprano para hablar en el palacio después de dejar a Sebastián en la escuela.

—No quiero volver a caer en este círculo donde yo te digo que no te conviene, pero recapacita por favor, estás mejorando y él solo terminara destruyéndote y todo lo que has avanzado.

La mire sin decirle nada, ya bastante idiota me siento como para que alguien me siga recordando eso. ¿Qué tal si está vez podemos ir en serio? No seas absurda Ryland por favor.

—Me iré a acostar estoy cansada, si te quedas a dormir te deje unas mantas en la gaveta de ese mueble — le señale antes de entrar al pasillo.

Toqué la puerta de Sebastián para decirle que era hora de dormir, pero nadie respondió, abrí la puerta y lo veo dormido con media pijama puesta además de que con la televisión encendida. Entre para apagarla y acomodarlo bien en la cama sin despertarlo le acomode una almohada bajo la cabeza y lo arrope me quede sentada en la orilla de su cama mirándolo.

Nunca me había parecido que luciera casi como Richard, pero ahora sí, no tiene la barbilla de él, ni esa forma de mirar a la gente para intimidarla, aunque eso puede aparecer en el futuro. Quiero lo mejor para él y no sé cuál de las decisiones no le hará tanto daño me inclino al buró que tiene al lado con la lámpara y veo que tiene un portarretratos con una foto mía y de Richard es del día antes de la boda él me llevo a San Francisco a pasar el día

–¿De dónde la sacaste? — le susurró sabiendo que no me responderá.

En la foto me tiene abrazada y estamos sonriendo tan simple, todo antes era tan simple con él así.

***

Desperté cuando alguien abrió mis cortinas y dejó el sol entrar para molestar a mis ojos.

—¿Qué carajos? — solté dándome la vuelta en el colchón

–Arriba, niña, arriba, tienes un intenso día por delante y es mejor que te empieces a preparar. El desayuno estará listo en veinte minutos date una ducha rápido y te veo en la cocina — dice Lassie saliendo de mi cuarto.

Me levante un poco, pero al ver el sol me vuelvo a arrojar al colchón.

–¡Si no te levantas y te duchas te juro que te echaré un balde de agua con hielo en la cama! — amenaza y me levanté de un salto.