CAPÍTULO 33

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SAUDADE

DEMIAN

Lanzo una maldición al aire mientras veo como Heaven se va del cuartel sin mirar atrás.

Carajo, estoy realmente duro.

Ver a Heaven torturar a una persona sin piedad alguna me dejó al borde, con una jodida erección en los pantalones.

Verla de esa manera; tan jodidamente poderosa, decidida y peligrosa, me hizo desearla.

Heaven lo torturó sin piedad, sin sentir remordimiento por sus gritos. Más bien, ella disfrutaba cada grito, suplica y lágrima que el bastardo derramaba. Tuve que contenerme para no sacar a Zev, tomar a Heaven, empotrarla contra la pared y follarmela.

La sed de venganza en sus ojos era obvia a simple vista, pero también lo era su tristeza, eso me detuvo en cada momento. Heaven cuando lo golpeaba, cortaba y quemaba lo disfrutaba, pero también sufría por dentro.

Conozco ese sentimiento

—La Heaven que acaba de salir es totalmente distinta a la que llegó por primera vez a la sala de torturas —habla Zev a mi lado.

—Nadie que entra a este mundo sigue siendo la misma persona —respondo.

Después de conocer la verdadera cara del mundo; la crueldad y ambición de las personas es imposible que sigas siendo el mismo. Este mundo alejado de la realidad fantasiosa de paz cambia a las personas, porque es la única manera en la que podrás sobrevivir. Si no peleas no ganas. Nadie tendrá piedad sobre ti, nadie te extenderá la mano para salvarte, tu enemigo jamás tendrá compasión por ti.

Debes matar tu propia humanidad para ganar.

—¿Así que O'Niell? Heaven O'Niell —me giro para verlo—. Ahora entiendo porque entró al equipo siendo solo Heaven. En realidad, tiene sentido que ella lo ocultara, fue un escándalo cuando Vanessa e Ignacio O'Niell fueron asesinados. Recuerdo haber visto sus rostros en la televisión por más de seis meses.

Todos en este lugar conocemos la historia de los O'Niell; padres asesinados por Eloy hace 7 años. Sabemos de todos los asesinatos que ha cometido Eloy, su lista es tan grande como la mía.

—Bueno, ya no es más un secreto. Todos aquí saben de donde proviene ella y cuál es su ambición —meto mi manos en mis bolsillos—. Zev, llama al medico de la familia para que venga a sanar las heridas del idiota de allá atrás.

Zev asienta, saca su teléfono y se va para llamar al médico. Giro mi cabeza hacia la mesa de la sala y veo al equipo completo en silencio, pensantes. Rasco mi frente y camino hacia ellos. Me paro en frente de todos y me aclaro la garganta, todos levantan su cabeza al segundo para mirarme.

—Ya lo saben, el apellido de Heaven es O'Niell. Todos saben quién es ella, por esto y su historia, no es necesario explicar por qué ella no dijo su nombre completo cuando llegó ¿verdad? Hagan unas cuantas preguntas para poder irme a casa, el interrogatorio muere hoy. Adelante —comento.

—¿Realmente es Heaven O'Niell? ¿La hija que sobrevivió esa noche? —pregunta Megan.

—No creo que exista otra Heaven O'Niell con una razón para unirse a la mafia, Megan —responde Franco.

—Perdón señor obvio, pero estoy tratando de procesar la información, no me jodas —Megan levanta su dedo del medio hacia Franco.

—No jodo mujeres —rueda sus ojos.

Unos segundos de silencio después de esa estúpida discusión vuelven a hablar.

—Mierda, el angelito es la hija de los O'Niell. Es una información difícil de digerir, demasiado d-difícil —dice Caleb con tristeza, bajando su cabeza.

EFÍMERO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora