«La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.»
Las Vegas oculta secretos que nadie desea conocer o, de lo contrario, todo aquel que lo desee sucumbirá ante un solo destino: la muerte. El perfecto oasis de diversión, perversión...
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H E A V E N
Siempre lo supe, como si fuera un espejismo o una profecía, que tú y yo terminaríamos de esta catastrófica forma.
Como si estuviera destinado a ser de esta manera, como si la inevitable tragedia nos siguiera en cada paso que dábamos. Nuestros caminos fueron marcados, sin darnos cuenta, desde el momento en el que nos conocimos.
¿Coincidencia?
El desastre fue nuestro mejor aliado y, a la vez, nuestro peor enemigo. El fuego que nos rodeaba dulcemente ahora amenaza con destruirnos de la peor manera.
La crueldad de este mundo nos persigue.
Mi mente me suplica, me ruega, que sea racional, pero mi corazón entiende razones que mi mente no. Mi corazón está firme, decidido y preparado para todo.
¡Soy una puta luchadora!
Levantó mi frente en alto y demuestro de lo que soy capaz. Demuestro mi deseo, mi sed, de venganza. Me mofo de su debilidad y declaro en alto que nunca seré la mujer en aprietos. Soy jodidamente peligrosa y ya no le temo a nada ni a nadie.
Vengan por mi.
Vengan por nosotros.
Nunca retrocederé a mi palabra, a mi promesa de justicia. Aunque el mundo entero arda bajo mis pies no me detendré. Porque llevo la sed de venganza marcada con sangre en mi piel, tatuada como un recordatorio vivo del camino que debo seguir y del cual jamás daré marcha atrás.
Bienvenidos sean todos a Las Vegas Bienvenidos sean a mi venganza Bienvenidos sean a mi efímero
