Mis manos estaban tan rojas y frías que no podía ni moverlas, comencé a intentar calentarlas frotándolas con rapidez.
—¿Tienes frío?—Alcé mi cabeza para ver al capitán justo de pie en frente mía.
—Entraré rápido en calor, no te preocupes.—Dije, y le dediqué una sincera sonrisa por su preocupación.
Él se arrodilló en frente mía para quedar a mi altura, ya que estaba sentada en el suelo.
Sus mejillas estaban rojas al igual que su nariz, lo que le daba un aspecto adorable, supongo que igual que yo.
De la manera más tierna posible, el pelinegro agarró ambas de mis manos, haciéndolas desaparecer por completo al estar atrapadas entre las suyas, debido a la diferencia de tamaños.
Lentamente, acercó nuestras manos a sus labios y sopló con suavidad para calentarlas. Yo me quedé expectante, completamente congelada.
Sentí el calor de su aliento en sus manos, incluso se me olvidó el frío al tenerlo así, mirándome fijamente.
Esto no puede ser sano para mi corazón, Levi.
—Descansa.—Dijo, y volvió a dejar mis manos a un lado.
—Espera.—Le llamé antes de que se fuera.
—¿Puedes quedarte aquí?—Pregunté agachando la cabeza algo vergonzosa.
Me daba un poco de miedo, escuchar como el viento azotaba de manera agresiva el viejo granero en medio de la noche.
—Claro.—Sonreí y observé cómo se sentó justo a mi lado.
Me volteé para ver su perfil, era algo que me encantaba observar, era perfecto.
Unos segundos después él también se giró, ambos nos miramos a los ojos, profundamente.
Nunca me cansaba de mirarle, no nos cansábamos de mirarnos. Tantas sensaciones inundaban mi cuerpo cada vez que lo hacía.
No era como mirar a los demás, nosotros lo hacíamos de manera distinta, había algo en nuestra mirada, aunque aún no sé el que.
Sonreí. Sonreí de la manera más tierna que pude.
Él no apartó la mirada, solo recorrió con sus ojos cada rincón de mi cara, como si intentase aprenderse cada rasgo de memoria y después alzó una mano.
La apoyó en mi cabeza para atraerme hasta él y conseguir depositar un cálido beso en mi frente.
Todo mi cuerpo se erizó. Sus labios estaban suaves y húmedos, mi corazón se estremeció con el contacto con mi piel.
Sentía los latidos en mi pecho tan fuertes.
—Alma.—Escuché decir a Jean al otro lado de las cajas, que nos ocultaban a mi y a Levi de todos.
—No estés sola ahí, ven con nosotros.—Dijo, pensando que el capitán no estaba aquí conmigo.
Yo me quedé en silencio mirando a aquel pelinegro que me quitaba el oxígeno cada vez que se acercaba a mi.
—Vete con ellos.—Susurró. Yo miré sus labios por un segundos.
—Buenas noches, Alma.—Tragué saliva.
—Buenas noches, Levi.—Había tanta tensión, tanta que no me dejaba respirar con tranquilidad.
Me levanté y rodeé aquellas cajas de madera para sentarme al lado de mi amigo.
Su brazo rodeó mi espalda y me apretó contra él, dejando mi cabeza apoyada en su hombro.
Pasaron los minutos y las horas.
Mi mente no podía despejarse, estaba gastando toda mi energía en pensar en aquel hombre que se encontraba al otro lado.
Su cara, su pelo, sus labios. Recorrían mis pensamientos una y otra vez, me estaban atormentando.
—Eh, ¿no puedes dormir?—Escuché hablar a Sasha a mi lado. Ella se enderezó, quitando su cabeza del hombro de Connie, el cual estaba completamente dormido al igual que Jean.
—No.—Sonreí.
—Yo tampoco, no hay quien pueda con este viento.—Dijo en susurros.
—No es exactamente eso lo que no me deja dormir.—Reí, ella alzó ambas cejas de forma pícara.
—Déjame adivinar, ¿es cierto capitán malhumorado el que te quita el sueño?—Abrí la boca en forma de sorpresa.
—Voy a matar a Jean.—Dije, con una sonrisa vergonzosa en los labios.
—Él no me ha dicho nada, se nota que hay algo especial entre vosotros.—Tragué saliva y miré al frente pensativa.
—¿Puedo hacerte una pregunta, Sasha?—La castaña asintió con la cabeza.
—¿Como se sabe cuando estás enamorada?—Pregunté y una sonrisa apareció en sus labios.
—Desde mi ignorancia, diría que es cuando
sientes un deseo irresistible de estar con la otra persona, de conocerla, de ahondar y profundizar en su vida.—Automáticamente pensé en todo lo que hemos vivido juntos, desde que nos conocimos.—Pero vamos, tampoco me hagas mucho caso.—Rió, lo que dijo fue absolutamente tan precioso, pareció sacado de un libro de romance.
—¿Tú has estado enamorada alguna vez?—Pregunté, hoy estaba muy curiosa al parecer.
—Diría que no. Pero me encantaría estarlo. Ojalá a mi futura pareja también le guste la comida.—Dijo entre risas. Yo la miré sonriente.
—Creo que lo más cercano que he experimentado al amor ha sido Connie. Connie es mi alma gemela, es como yo en chico. Lo amo tanto, pero claro, no lo amo de la manera que amas a una pareja, igualmente creo que es un amor igual de puro y válido.—Sonreí cada vez más a medida que hablaba.
—Es del único amor que te puedo hablar desde experiencia personal.—Finalizó, con una enorme sonrisa en los labios.
—Creo que ya lo tengo claro, gracias Sasha.
—De nada, sabes que me tienes aquí para lo que sea,.—Hizo una pausa y susurró.—Que las chicas no entendemos mejor entre nosotras.—Yo sonreí abiertamente ante su afirmación.
La quería tanto.
—Tienes toda la razón.
—Voy a por algo de comer, ¿quieres?—Yo negué con la cabeza.
—No, gracias. Yo me dormiré ya, buenas noches.—Murmuré.
—Buenas noches, Almita.
A la mañana siguiente, todos amanecimos con dolores de espalda por haber pasado la noche durmiendo en el suelo.
Igualmente nos montamos en los caballos y emprendimos rumbo de nuevo.
Después de una hora llegamos hasta una adorable pero gran casa, parecía algo vieja, estaba cubierta por la nieve pero igualmente me pareció un lugar increíblemente bonito.
Rodeado por árboles nevados, sin ninguna casa al lado, completamente aislada.
Nos comentaron que a media hora de ahí había un pueblo, a el cual tendríamos que ir una vez a la semana a comprar la comida.
A cinco minutos, había una llanura perfecta para practicar la transformación de Eren sin que nadie nos viera.
Además, todo estaba rodeado de árboles perfectos para la leña, y en frente de la casa había un pequeño patio para entrenar todos los días.
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ᴀʟᴍᴀ. [Levi Ackerman]
FanfictionCan I just stay here? Spend the rest of my days here? 'Cause you make me feel like I've been locked out of heaven Basada en Shingeki no Kyojin.