Tras varios días en el hospital, vieron que el peliblanco podría salir de allí en cualquier momento pero algo les tenía preocupado al doctor que le atendía.
Es extraño que el chico no utilizara su don de curación en ese momento- le dijo a Haru una vez que estuvo visitando a su amigo.
Supongo que le hablarían de algo que le dejó tocado, ya sabe, cuando a ese chico le da un bajón no usa sus dones ya que le devuelven todo el bien que ha hecho diez veces peor- explicó el de ojos amarillos sonriendo al hombre que estaba más rayado que antes.
Ah, vale- dijo el doctor intentando descifrar lo que le habían contado.
Bueno, yo me voy a rehabilitación para estar en mejor estado cuanto antes- le dijo Haru largandose junto a una enfermera a una sala que había en la planta baja del hospital.
Voy a preguntarle al chaval que significa eso que me han dicho- decía el doctor para sus adentros.
Hola, la habitación de Akio?- preguntó un chico de ojos azul grisáceo con mucha inocencia- somos amigos desde pequeños, y me he enterado de que está en este sitio por algo raro que le ha pasado.
Si, en la tercera planta, la 304, pero ahora estará durmiendo- le respondió el doctor.
Da igual, si soy yo seguro que despertará- le aseguró Sogo quien tenía un extraño brillo en los ojos.
Al llegar a la habitación de Akio, el chico entró como si fuera su propia casa, asustando al peliblanco que estaba dormido.
Podemos hablar un rato, de hijo de villano a hijo de villano- le propuso Sogo de manera pacífica, lo que hizo que el de ojos ámbar cogiese el móvil para llamar a la policía.
Vale, te concedo cinco minutos de charla pacífica, después te largas- le dijo Akio a lo que el otro aceptó.
Odio mi vida, al principio me gustaba eso de hacerte la vida imposible, hasta que ha llegado el jefe y me ha ordenado no distraerme en el trabajo- se quejaba Sogo quien hizo que Akio se riera, como resultado el de ojos azul grisáceo se molestó.
Lo siento, pero es que me hace gracia que le hagas caso a un tercero, si en el pasado le respondías hasta a mi padre- se reía Akio sin poder creerse lo que escuchaba.
Oye, que mi jefe, por decirlo así, es el director de la escuela y puede llegar a expulsarme si no le hago caso- confesó Sogo mirándole directamente a los ojos, haciendo que Akio le sonriera.
Los dos chicos se pasaron la tarde riendo y charlando que no se dieron cuenta de que tenían diferentes ideales.
Bueno, yo me voy ya, bye bye Akio- se despidió Sogo quien no supo porque se tenían que odiar cuando todos los veían juntos.
Adiós So-chan- le respondió Akio muy animado como si no se fuera a ir en ese momento.
Cuando Sogo se largó el de ojos ámbar se quedó pensando en la amistad/odio que tenía él con Sogo.
Si pudiéramos ser nosotros mismos en cualquier parte del mundo, pero lamentablemente debemos odiarnos para que la tradición siga- se quejó Akio mirando por la ventana.
Al día siguiente, Denki fue a visitar a su amigo al hospital para ver cómo se encontraba pero le escuchó hablando con alguien más.
So-chan, debes irte de aquí sino de nada servirá nuestra relación amor/odio- le explicó Akio intentando hacer que el de ojos azul grisáceo entendiera lo que debía de hacer.
Ya lo sé, pero no va a venir nadie, sería una casualidad de una entre un millón que alguien nos descubriera- le respondió Sogo haciendo un ademan con los ojos.
De repente, la puerta de la habitación se abrió dejando ver al pikachu que se sorprendió del sentido de su amigo para detectar amenazas.
Una entre un millón?- repitió Akio con tono de burla mientras que Denki se paseaba incómodamente por la sala.
Yo que sabía que el chico ese iba a estar aquí!- le gritó Sogo bastante ofendido por la pregunta de su amigo.
Oye que puedo volver en otro momento, si queréis- dijo Denki viendo que no hacía nada allí.
Tú te quedas!- le gritaron al unísono Akio y Sogo, lo que les asustó bastante.
Deberíais firmar para hacer un dúo cómico, os haríais famosos- les aconsejó el rubio que se había quedado flipando con esos dos.
Ni de coña me uno a este en una comedia, más bien sería una maldita tragedia y ni eso lo sabe hacer bien- le reveló Akio al pikachu, dejando en mal lugar a Sogo.
En serio crees que se me daría mal?- le preguntó Sogo, haciendo que los otros dos asintieran con la cabeza- te reto a representar una tragedia.
No hay tiempo- le indicó Akio decepcionando a lo dos chicos- además, ni aunque lo hubiera representaría una obra contigo.
Oye!- le gritó Sogo, pero luego rectificó y le dijo- en realidad, tienes razón, mi vida es una tragedia por eso no puedo hacerlo.
Yo me refería a que éramos hijos de villanos y eso nos impide hacer actividades como esa- le explicó Akio para bajarle esos hilos de superior.
Tras eso, Sogo saltó por la ventana, que es lo más normal que hay en el mundo, y se fue a buscar algo que hacer.
Denki, me podrías guardar este secreto, por favor- le rogó Akio para que su amigo no corriera peligro.
Pero si yo no he visto nada- le dijo Denki guiñandole el ojo a su amigo, lo que hizo sonreír al de ojos ámbar.
Pero el no era el único que había escuchado la conversación, Haru que había llegado después de Denki, se escondió tras la puerta, donde escuchó que esos dos eran amigos desde toda la vida.
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𝖀𝖓 𝖍𝖊́𝖗𝖔𝖊 𝖈𝖔𝖓 𝒹ℴ𝒷𝓁ℯ 𝖕𝖊𝖗𝖘𝖔𝖓𝖆𝖑𝖎𝖉𝖆𝖉
FanfictionHace 5 años ocurrió un accidente en la prefectura de Saitama, pero cuando Shinshou entra en la UA se encuentra con su mejor amigo de la infancia, el cuál la palmó en ese accidente... pero seguirán siendo tan amigos? Por qué demostrará esa actitud t...