Sam
—¿No te parece que si bebes demasiado no podrás conducir correctamente y terminarás matando a alguien? —Blake me miró seriamente, sosteniendo un vaso de cerveza casi lleno.
Él apenas iba por su segundo vaso y yo ya casi llegaba al décimo.
Apoyé el vaso sobre la mesa.
—No me importaría matar a alguien estos días, con la rabia que traigo encima, me haría bien.
Blake me miró pensativo y sorprendido por lo que acababa de decirle, como si no me reconociera.
—Sé que eres vampiro, pero la civilización sigue siendo parte de tu vida, ¿o te olvidas de eso? —me inspeccionó con la mirada, como si verdaderamente no me reconociera—. ¿Emborracharte por una chica, Sam? ¿En serio? Tú no eres así.
Sí, yo no era así, era detestable, Blake no tenía por qué repetírmelo, pero la situación lo ameritaba. No paraba de pensar en que Skyler estaba en la casa, a solas con Chase, y que probablemente pasaría algo sexual entre ellos. Me volvía loco.
—Hoy todo es distinto, prefiero ser el borracho del bar para olvidarme que Skyler y Chase están juntos en mi casa, los dos solos.
—¿Por qué te atormentas de esta forma? Entiendo, Skyler es bonita y simpática, pero, ¿qué más le ves? ¿Qué es lo que tiene que estás tan enamorado?
La verdad es que ella tenía miles de cosas para que yo quisiese correr y hasta para que no me diesen ganas de ser ni siquiera su amigo, pero supongo que eso la hacía más interesante para mis ojos. Tal vez me gustaban las chicas con millones de problemas, las peligrosas como ella.
—Me he hecho tantas veces esa pregunta, Blake. Ella es ingenua, un poco tonta, mete la pata muy seguido y le encanta discutirme. Pero también es simpática, divertida, espontánea y tiene una risa que me produce una presión en el pecho.
—Jamás pensé que te enamorarías —confesó, mirándome con una ceja arqueada—. Sé que la quieres, pero tienes que pensar en la realidad de las cosas: ella es humana y tú un vampiro. El tiempo para ti no pasa, pero cada día de Skyler, es un día más cerca de su muerte. ¿De qué vale la pena enamorarse de una humana? Cuando ella ya no esté sufrirás mucho. Y no te olvides que es una bruja, Sam, es contra las reglas.
—Esa estúpida regla me tiene harto.
—Pero es una regla que debemos cumplir si no queremos otra abominación.
Si él supiera que ella fue una abominación...
Después de un par de cervezas más, quise regresar a casa conduciendo, pero el pesado de Blake no me dejó hacerlo. ¿Qué le importaba a él si atropellaba a una persona?
Diablos... el puto alcohol sí que me desviaba de mis verdaderos pensamientos. Yo no era así.
Le pedí que me dejara a unas cuadras de casa, así yo podía caminar y respirar aire puro, pues estaba bastante mareado y necesitaba dispersar mis pensamientos antes de llegar a casa y meter la pata. Pero la rabia afloraba en mi interior, parecía cada vez más grande por culpa de las idas y vueltas que mi mente le daba al asunto de Chase.
Ayer me había preguntado si sentía algo por Skyler y le dije que no, y me confirmó una vez más que él sabía que Skyler me gustaba en el pasado, y aun así se metió con Skyler y le importó una mierda. ¿Y era yo quien tenía que callarse todo? Amaba a mi hermano, pero él a veces me pisoteaba, pensaba solamente en sí mismo y, por una vez, quería ser egoísta. Necesitaba gritar mis sentimientos. Cuando me di cuenta, ya estaba dentro de mi casa, en la sala, con una botella de alcohol que ni siquiera recordaba haberme traído del bar.
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Atracción destructiva +18
Romance¿Qué tan dispuesto estás para renunciar a tu vida por la persona a quien amas? Chase White convive con un pasado oscuro y perturbador con el que debe cargar por el resto de su vida. Skyler, por otro lado, no sabe su real identidad y lo peligrosa q...