Capítulo 35: No quiero ir a la Escuela...

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Bitácora de Viaje de Entrenamiento.

Bien, ya que lo más seguro es que Lia sea la que tenga la suficiente paciencia para ver todo esto. Hola Lia, hoy es el día 1 de mi estadía aquí, no quise contar el de ayer porque no hice nada más resaltante que conocer un montón de gente rara con peinados locos... y a un Calvo. Son cerca de las 6 de la mañana y ya escucho ruido afuera, ya tengo mi uniforme y todo, por lo que hoy empezare a ver clases de quien sabe qué cosa, solo espero no sean muy difíciles porque no tengo la paciencia para eso. Aun no sé si estos son los malos, los buenos los neutrales o de que va toda la anomalía de aquí, pero lo averiguare, me esperan largos días en este sitio lo puedo presentir, solo espero a esas sádicas no se les ocurra buscar venganza porque allí si van a ver lo que es bueno. Eso es todo por ahora. Cambio y fuera.

Fin de la transmisión.

Anoche se me acabo la comida así que hoy si o si debo comer de lo que den aquí. Luego de ponerme el algo estúpido uniforme, y de prepararme un poco, sentí como tocaron a mi puerta.

Guil: Que no sean las sádicas, que no sean las sádicas. –Susurre al caminar hasta la puerta.

Al abrir, lo primero que me tope fue a las 2 hermanos estaba justo frente a mí, una riendo y la otra con cara de ni siquiera querer estar aquí.

Grace: Te levantaste temprano. Creí que tendríamos que tumbar la puerta y despertarte.

Guil: Tengo un buen reloj interno. Cuando sé que tengo cosas que hacer me despierto temprano. No era necesario que vinieran solo por eso.

Gloria: ¡Te lo dije! –Quejo la rubia a su Hermana.

Grace: Igual tenemos que darte otro tour para que veas los lugares de interés y conoces a tu tutor.

Guil: Joo ¿así qué eso ya está listo?

Grace: Así es. Desde ayer, entre más rápido aprendas será mejor, tú mismo lo dijiste.

Entre más rápido me den un disco de duelo mejor será, el problema serán las cartas, sé que ahora hay muchos tipos diferentes a las que yo conocía, pero será cuestión de aprenderme los efectos y demás, no creo que el duelo cambie tanto, o eso es lo que quiero creer.

Guil: Bien Señoritas, estoy a su cuidado nuevamente, aunque la que no quiera acompañarme, no tiene por qué hacerlo. –Hable mientas miraba de reojo a la Rubia. Y ella se dio cuenta. Matándome la mirada.

Sé que a ella no le agrado pero si le causo interés, luego esta le herma a la que si le agrado y le causo interés. Solo espero que no sea un interés sádico de verme amarrado mientras ellas sonríen preparándose para hacerme sufrir un rato, porque allí sí que se les regresara la cosa.

Gloria: Ya estamos aquí, así que andando, hay mucho que debes ver.

Sin más, cerré la puerta de mi habitación y me dispuse a seguir a las hermanas por todo el lugar, memorizando en nuestro los lugares pertinentes que no eran muchos la verdad, y a pesar de la hora ya había muchos estudiantes yendo de aquí para allá, y todos tenían la misma expresión de miedo a ver a las hermanas, la razón me la puedo imaginar en base a lo que paso ayer, así que estas deben tener su reputación aquí, yo aún sigo siendo el nuevo, y al que todo mundo ve raro y murmuran a mi espaldas, cosa que no me mortifica mucho.

El último lugar de nuestro recorrido fue la cafetería, y debo decir que justo a tiempo porque ya el hambre me estaba pegando.

Guil: Joder esto en serio que me recuerda a la segundaria...

Todo el mundo tiene buenos y malos recuerdos con respecto a sus estudios, los míos están nivelados en ambos casos, pero no fue nunca una persona sociable que digamos, me gustaba más andar a mis aires y mis ritmos y compartir mi tiempo con personas que compartieran ese tipo de aire, que por mi suerte fueron varios y muy buenas personas debo añadir.

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