Capítulo 43: No te Entrometas.

155 27 3
                                    

Al salir de la mansión me di cuenta de una cosa, no podía abandonar esa dimensión por mi cuenta, no sin House quien era las puertas de entrada y de salida.

Guil: Ahora cómo diablos salgo de aquí.

Engorrado: ¿Problemas con el Peaje Extranjero?

De la nada nuevamente ese sujeto apareció.

Engorrado: ¿Ya hiciste todo lo que ibas a hacer aquí, tienes tus papeles al día? Si es así, ¡nos vamos!

Dicho y hecho, en instantes reaparecimos en el justo lugar donde nos habíamos visto en la tarde.

Engorrado: ¿Que harás ahora?

Guil: Si están usando mi ADN para replicar Ki, entonces es algo que puedo sentir sin importar lo lejos que estén.

Con solo centrarme un poco, pude dar con la locación de la base de la academia, estaba lejos sí, pero no era una distancia que no pudiera hacer rápido.

Guil: ya los tengo.

Engorrado: Y qué esperas. Corre extranjero. Corre.

Ignorando la referencia a Flash, llene todo mi cuerpo de Ki y sin más di un salto tremente directamente hacia ese lugar. Me tomo algo de tiempo llegar pero lo conseguí y luego de ver mis posibilidades y los huecos en su seguridad, me vi un camino por el cual podía infiltrarme.

Guil: Akaba los entrenaste para matar, pero no para estar alerta estúpido calvo de mierda.

Llegar a la fuente de la maquina fue solo cuestión de minutos.

Guil: Por esta porquería todo se salió de control... pero hasta aquí llegaste maldita.

Tome ambas espadas y con mi energía cubriendo mi cuerpo hice cachitos toda la maquina solamente para luego con una gran ráfaga de mi hacerla cenizas.

Guil: Solo para estar seguro. Ahora el marcador se igualo.

Cuando iba a dejar ese lugar, escuche unos pasos correr en esta dirección, y al ver a los dueños, no eran nada más y nada menos que Aster y las hermanas.

Grace: Tú...

Aster: ...

Guil: Ustedes y yo tenemos una cuenta pendiente. –Aclare al momento que mi pelo se tornaba dorado y una gran ráfaga de energía salía de mi cuerpo. –Y es hora de que saldemos cuentas.

Vi a los estudiantes elite de Akaba entrar en la gran habitación ya activar sus discos de duelo y seguidamente invocar a sus monstruos. Yo solo toque mi baraja y respire profundo.

Guil: Chicas sé que están dolidas, yo también lo estoy, pero justo ahora, necesito el apoyo de todas.

Mi baraja brillo y todas mis doncellas salieron en compañía de mis espectrales amiguitas, todas con determinación en sus ojos.

Guil: Aquí me tienen.

Gloria: ¡Eres como una maldita plaga! Porque no te mueres de una vez.

Guil: Jajajajaja soy una cucaracha, yo no muero, me multiplico. ¡Tengo a Dios de mi lado, me oyes Perra! –Burle al momento de tomar mis armas mientras sonreía como un completo loco.

Gloria: ¡Maldito sea el día en que llegaste a nuestra academia!

Grace: ...

De esa manera comenzó una batalla campal entre mis doncellas los monstruos de los de la academia y yo.

Sabiendo sus artimaña me las arregle para burlarlas y acabar con sus bestias yo mismo, ahora que no tenían su maldita maquina no había manera de que pudieran hacer algo contra mi desmedida fuerza y al llegar el momento de no tener monstruos en el campo, estaban completamente vulnerables a mi merced por lo que me materialice justo delante de Aster.

Guardians of the multiverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora