Guardians of the multiverse

Capítulo 02: La Gata que Habla.

No sé cuánto dormí, solo sé que en algún momento me costaba respirar en el sueño, hasta que me di cuenta que no era solo en el sueño, al despertar y abrir los ojos; Frente a mi mirándome de frente, estaban esos grandes ojos azules, los cuales recuerdo haber visto anoche. Estaban muy cerca de mi cara por lo que me impresione bastante.

Guil: Este... ¿buenos días?

Sonrió a eso y solo se alejó un poco sin dejar de verme antes de responder.

Gatomon: Buenos días.

No se que tan precavido debo ser con esto realmente.

Guil: ...

Gatomon: Si, entendo ese silencio, y si, se quién eres, se que tu nombre es Guillermo Rafael Rodríguez. Eres un Ingeniero con un exelente promedio, recién graduado, hijo único de un mecanico y de una Abogada.

Guil: ¿Cómo sabes todo eso...?

Gatomon: Me lo informaron antes de venir. Veras me enviaron aquí como tu compañera y también para ayudarte en los próximos retos que puedas llegar a tener.

Guil: ¿Eso qué quiere decir? no me estas aclarando nada.

Gatomon: Parece que aún no estas enterado, y si te lo explico ahora solo podía confundirte más, por ahora creo que lo mejor es que solo sepas eso.

Guil: Ok... ¿Estás diciendo que eres mi compañera, Cierto?

Gatomon: Sip.

Guil: Por lo tanto vas a vivir aquí.

Gatomon: Así es, contigo obviamente.

Guil: ¡Jum!

Mi cara de incrédulo debió ser muy épica para ese momento. Lo diré así, soy hombre de perros, no de gatos, pero bueno, técnicamente hablando, ella viene de un perrito por lo que... es confuso.

Guil: ¿Puedo saber quién te envió?

Gatomon: No.

Guil: ¿El por qué estás aquí?

Gatomon: Tampoco.

Guil: Sabes que de esa manera solo se vuelve más sospechoso para mi verdad, y eso hace mucho mas complicado el que yo confie en ti.

Gatomon: Lo sé, pero lo siento, hasta que ella misma te hable no puedo decir más.

Al menos sé que hay un ella, por lo que es una mujer, o al menos una hembra, y sacando cuenta de las deidades mujeres o hembras del Digital World, la lista es bastante pequeña.

Guil: Ok señorita de otro mundo del cual solo creí existía en la ficción. Si te vas a quedar aquí debemos poner unas cuantas reglas.

Gatomon: Perfecto, no tengo problema con eso.

Guil: Tampoco serán muchas, primero que todo, no podemos dejar que nadie te vea.

Gatomon: Eso es obvio, que dirían los humanos al ver un Gatomon andar por allí, pero no te preocupes, soy muy silenciosa y ágil, nadie me vera, después de todo, soy un gato.

La señorita ágil y silenciosa dejo un cráter en el patio.

Guil: Bien, en lo demás hasta no saber por qué estás aquí, le dejamos en solo esa.

Gatomon: De acuerdo.

Me levante y mire mi teléfono, eran las ocho de la mañana, perfecta hora para hacer desayuno.

Guil: Vamos a la cocina, allá te preparare algo de comer, luego de la arrastrada de anoche, debes tener hambre.

Gatomon: Y no estas para nada equivocado.