Capitulo 138

346 42 7
                                    

Era mediodía ya. El sol se agolpaba en las ventanas, pero está vez Miranda no ha amanecido a mi lado por asuntos en el laboratorio con las Winters.

- Hoy no habra desayuno - me digo a mi misma antes de salir de la habitación. Pero con solo abrir la puerta me encuentro con Miranda justo en frente - Eres justo a quién buscaba - digo picara he intento acercarme para besar sus labios pero simplemente ella se aparta. La miro confundida, en cambio ella parece temerosa - ¿Amada?, ¿que pasa?.

- Lo siento...- depronto su apariencia comienza a cambiar hasta mostrar a Eva.

- ¿¡Eva!?.

- No lo volveré a hacer...

- Tú puedes cambiar de forma - exclamo. Es justo como hace su madre - ¿Que más estás ocultando?.

- Te juro que es la primera vez que lo hago.

- Ya veo...- está niña con esos poderes que posee aveces da un poco de miedo, pues aún no se sabe que otras cosas es capaz de hacer - por sierto, ¿no deberías estar con mamá en el laboratorio?.

- Mamá me dijo que podía acompañarte.

- Eso me alegra, al final me preferiste más a mi que a Rose.

La pequeña ríe - Yo no te cambiaría por nadie - me abraza y yo correspondo enternesida.

- Pero Rose es agradable, no entiendo por qué no te agrada.

- Digamos que nos conocimos en una situación desagradable.

- Eso suena interesante, ¿puedo saber cómo fue?.

- Claro que sí, ven acá te contaré en el camino es una larga historia - le ofresco llevarla en mi espalda a lo que ella acepta con una risita divertida.

Y así pasamos hasta la noche, dónde Eva me acompaño a obcervar como es que realizó mi trabajo de infectar el lugar mientras le contaba algunos de los hechos que ocurrieron mientras ella aún era una pequeña bebita.

Íbamos de camino a casa cuando al pasar por esa misma tienda de vestidos de novia no pude evitar de nuevo sentirme conmovida por la imagen de mi amada Miranda.

- Ya se lo que dije antes pero...deberías intentarlo - comenta Eva.

- Otras vez invadiendo mi cabeza pequeña - digo risueña.

- Me gusta saber lo que piensan mis madres, pero de ambas tú eres la más fácil de leer - ríe

Era de esperarse Miranda es una genia en todo.

- ¿Cres que valdrá la pena?.

- Si la vale, además me gustaría ver una boda contigo y mamá.

- ¿Enserio?.

Asiente con la cabeza - Se verían muy hermosas con vestidos grandes.

Rio sonrojada - Si, mamá es hermosa con todo lo que lleva puesto.

- Lo es - sonrie tierna - ¿Cuando se lo dirás?.

- Será pronto.

- Lo esperaré - brinca emocionada.

Está pequeña siempre logra sacarme tantas sonrisas.

Nos encontramos a las Winters pasando un buen rato en la sala de está y como siempre Eva sale disparada a los brazos de Rose.

¡Traidora!.

- ¿Donde está Miranda?.

- Sigue en el laboratorio - responde Mia.

Entonces voy en esa dirección, encontrandome a mi amada de espaldas, aún con la bata de laboratorio.

- Aquí estoy amada, ¿me has extrañado?.

- Siempre lo hago - se da la vuelta y me da la bienvenida con un beso profundo mientras se abraza de mi cuello.

Le sigo el beso de la misma forma lasiva en que ella lo ha comenzado, mientras mis manos comienzan a bajar por sus caderas hasta sujetarla ahí para atraerla aún más a mi cuerpo.

- ¿Podemos llevar esto más allá en este lugar? - mis manos de forma tentadora acarician sobre su zona íntima aún sin quitar la ropa.

- No tienes que preguntarlo - gime.

- Debes estar empapada - susurro en su oído mientras sigo tocandola por todas partes.

Ya quiero sentirla mía otra vez. Ese coñito está mojado solo por mí.

- Miranda eres tan deliciosa - continuo diciéndole en tono pervertido para después lamer su mejilla.

Lo se no actualize ayer para compensarlo les daré un maratón mañana, perdonen chicas, estoy en un pequeño problema pero nada que no se pueda arreglar.

Nos leemos pronto 😘

Flor De AmapolaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora