Deseo Incontrolable II [+18]

Capítulo 80: Despedida

Ay, Dios mío, ¡no puedo aguantar el dolor!

—¡JAMES JODER! —grito sin mirarlo mientras me llevan en silla de ruedas hasta la habitación de parto.

—Cariño, ya queda poco, ya mismo nace nuestra pequeña —dice dándome besos en mí sudorosa frente.

Me suben a una camilla y me elevan las piernas apoyándolas en unos brazos metálicos. Me encuentro expuesta ante una mujer desconocida pero me da absolutamente igual. Quiere que este bebé del infierno salga de mi útero y poder dormir durante una semana. Que James se haga cargo de él, que yo he estado nueve meses, no creo que por una semana se vaya a morir.

No paro de gritar y una enfermera me va pasando una toalla húmeda por la frente y el cuello. Diría que está sirviendo de algo pero creo que mentiría. La mujer que me está viendo todo el coño me grita que empuje y eso hago, pero de verdad, esto es peor que estar estreñida, muchísimo peor. No se puede ni comparar.

Después de mucho sufrimiento y empujones que parecieran que me fueran a partir en dos, escucho el llanto de un bebé y no puedo evitar reírme y sonreír. Por fin lo hemos logrado, después de muchos meses con médicos y cuidados por si acaso el bebé le ocurría algo. Por fin.

Extiendo mis brazos con pesadez, James la coge de los brazos de la mujer que ya tendrá una anatomía perfecta de mi intimidad. Se acerca hasta mí y con cuidado apoya a la niña en mi pecho.

Tiene la carita arrugada, pero aun así se ve preciosa y perfecta. Estoy muy cansada y después de algunas preparaciones por parte de las enfermeras puedo irme a la habitación donde estaré un par de días, o al menos eso espero. Y ya después nos podremos ir a casa.

James está a mi lado todo el rato junto con el bebé que está apoyado en mi pecho. Es muy tierna y huele muy bien después del baño que le han hecho.

Al cabo de unas horas cuando ya me encuentro un poco mejor, vienen las chicas a visitarme y se quedan enamoradas cuando ven a la pequeña.

Hablamos durante un rato y se marcharon para dejarme descansar ya que tampoco lo había hecho mucho antes. Me han traído muchas flores y regalos, no solo para la pequeña sino también para mí. Más que nada comida ya que los hospitales no tienen fama de tener una buena comida, tampoco mala... pero no buena.

James acuna al bebé hasta que lo lleva una cuna del hospital.

—Deberías de ir a casa a darte una ducha y cambiarte —le digo un poco dormida.

—He traído ropa de cambio y aquí hay una ducha, no os pienso dejar solas en ningún momento —me dice y me da un beso en la frente para luego meterse en el minúsculo cuarto de baño. Escucho que enciende el agua y me relajo hasta que caigo rendida en un profundo sueño.

Me despierto en mitad de la noche asustada y con el corazón a mil. Está todo oscuro pero al momento siento la mano de James en mis hombres y su olor.

—¿Has tenido una pesadilla? —yo asiento y él me acuna con cuidado entre sus brazos. Al cabo de un rato me vuelvo a dormir.

Había soñado que mi padre seguía vivo y buscaba vénganla, ¿por qué? No lo sé, no le he hecho nunca nada, ni siquiera he estado en su vida para que me haya hecho tanto daño. Nunca me imaginé que alguien de tu propia sangre, y más siendo tu padre, pudiera llegar a querer matarte o venderte por dinero.

[...]

Dos meses después

—Venga mi amor, te vas a quedar con tita Lizy y tu prima —le digo mi preciosa niña mientras se la paso a mi amiga. Su hija está bastante grande y no para de decir palabras sin sentido y que no existen. Es muy adorable y mi niña tiene unos preciosos ojos y una buena melena. Se parece bastante a James, pero los labios los tiene igual que los míos.

—La voy a cuidar mucho mientras vas al cementerio —me dice Lizy un poco triste.

—Es algo que necesito hacer, además que ya le han puesto la lápida y tengo que ver al hombre para pagarle —le digo para luego darle dos besos y marcharme.

Al rato llego al cementerio con el coche y aparco enfrente del edificio por el que hay que pasar para entrar al interior del cementerio.

Estoy caminando y me fijo en una chica que está con un iPad en el césped sentada y parece que estuviera dibujando. Menuda chica más rara, sentada al lado de unas tumbas de hace muchísimos años. Supongo que hay gente para todo.

Leo en las lápidas "Dimitri Davis" y sigo hacia delante.

Me acerco a donde está la tumba de mi padre y me quedó viéndola.

—¿De verdad esto tenía que acabar así, papá? ¿No quisiste amar a tu hija después de tantos años sin veros? O al menos me podrías haber seguido ignorando, pero veo que es más importante el dinero que el amor... —hago una breve pausa—. Tienes una nieta hermosa, me hubiera gustado que la conocieras y le dieras amor, pero supongo que cada uno decide su futuro. Podrías haberla matado, haberme matado a mí y parecía que no te importaba. Seguiste ciego hasta el final de tus alientos, ¿pero sabes qué? Te perdono papá, ya no me puedes hacer daño y sé que allá donde estés, lo estarás pagando muy duro, así que te voy a quitar un poco de peso perdonándote. Yo no tengo ese corazón frío y manipulador como tú.

Sopla el viento moviendo mi cabellos y veo que cae encima de la tumba una flor, concretamente un tulipán blanco. Me agacho para cogerlo con la mano y lo huelo. Es como los de mi boda. A lo mejor solo es coincidencia, pero me gustaría pensar que es una señal. La vuelvo a dejar en la tumba y me voy dedicándole una ultima sonrisa a mi padre.

Voy hacia la salida del cementerio y me cruzo con la chica que estaba sentada enfrente de las tumbas. La veo que está hablando por teléfono un poco apurada y escucho.

—Adiós familia Davis —¿Le acaba de decir adiós a unas tumbas? Esta chica está loca.

Me voy a mi coche y salgo de allí.

Tenía que despedirme para siempre y cerrar por fin esta etapa que por muchos meses ha sido causa de mis pesadillas.

Se acabó.

Ahora todo será felicidad junto a mi familia de verdad, a la que he creado desde cero.

Mi querida hija Nesiré y mi querido esposo James.

FIN

24/07/2022

¡Holaaa! Perdón por la tardanza pero aquí está el capítulo final 😍😍 también habrá un epílogo así que estad atentos en los próximos días.

Y ahora quiero preguntaros... ¿os habéis dado cuenta? No son muchos los que han empezado mi novela de "Almas Indivisibles", pero ojalá os deis cuenta si decidís leerla 😊

Muchísimas gracias por todo el amor, cariño y tiempo que habéis dedicado a esta historia, y a todas las demás que tengo. Voy a reservarme ahora mismo con los agradecimientos (aunque me cueste muchísimo) porque habrá una dedicatoria muy bonita y especial ❤️

Os amo muchísimo y gracias de nuevo por la oportunidad 🥰