Deseo Incontrolable II [+18]

Capítulo 56: La cena perfecta

Necesitaba unas merecidas vacaciones, llevo meses trabajando sin parar en la tienda y por fin esta semana la voy a tener libre para poder hacer lo que me dé la gana. Tenía pensando en ir con Lizy a su revisión, ha pasado ya dos semanas desde que nos dijo que estaba embaraza y todavía no se había atrevido a ir al médico para que le hagan una ecografía, seguramente apenas se pueda apreciar al bichito que tiene dentro pero seguro que algo consiguen ver y le hace mucha ilusión.

Todavía no le ha contado nada a Erick, pero al menos sí ha estado pensando en cómo se lo va a decir y quiere que nosotras estemos con ella en ese momento. En mi opinión creo que es mejor que hablasen solos, pero sé que ella necesita de nuestro apoyo porque, muy a nuestro pesar, creemos que Erick no va a querer saber nada del niño y eso va a derrumbar a Lizy.

Pero ahora mismo no estoy nerviosa porque vaya a estar presente en ese momento, sino porque esta noche, James con todos sus huevos grandes ha invitado a mi padre a que vaya a cenar a su casa, sin consultarme nada, sin preguntarme nada. Y la verdad es que, aunque me haga ilusión, también me molesta que no hayamos llegado a un mutuo acuerdo, ni siquiera hemos hablado sobre mi padre y lo que piensa James de todo esto.

Estoy vestida de manera sencilla, unos pantalones vaqueros ajustados de color negro que tiene por los mulos algunas rajas con hilos colgando, una camiseta de tirantes y encima una sudadera holgada de color rosa pálido. Me he hecho una cola alta y me he puesto un maquillaje natural.

Me miro quinientas veces en el espejo rezando que James no vaya a ir en traje de chaqueta, y mucho menos mi padre.

Suspiro resignada y me pongo en marcha hacia la casa de James, o mejor dicho nuestra casa...

Cojo el coche y en menos de veinte minutos estoy delante de su casa abriéndola con la copia de las llaves que me dio hace tiempo. Cuando entro lo veo hablando con la señora que se suele encargar de la comida, le está dando algunas instrucciones. Parece que está bastante relajado y cuando me ve cruzando por la puerta me mira con una enorme sonrisa de niño juguetón. Al momento lo tengo a mi lado dándome un beso en la frente y un abrazo tierno.

―¿Estás meloso o es mi impresión? ―le pregunto con una sonrisa tímida. Siento que mis mejillas se han puesto un poco coloradas.

―La verdad es que te echaba mucho de menos, incluso estaba impaciente por verte cruzar por esta puerta ―me dice al oído mientras me da unos cuantos besos más.

―Tengo una semana libre, si la aprovechas bien pasarás más tiempo conmigo ―le guiño el ojo mientras empiezo a caminar para dejar mi maleta en el perchero.

―Es una maleta un poco grande para una cena, ¿no? ―me pregunta curioso.

―Es posible que no solo sea una cena lo que me quede ―esta vez le doy media sonrisa y me encamino hacia donde se supone que tendría que estar la mesa, pero no es así.

Me giro para ver a James con el ceño fruncido y él me indica con las manos que camine hacia el jardín. Lo sigo rápidamente y veo una mesa bastante bien decorada en el centro del jardín. Tiene varias velas encima y también con el césped, además ha puesto unas cuantas luces colgadas para que se vea mucho mejor. De momento, solo están puesto los platos, cubiertos y las copas.

―Sí que te lo has currado... y yo pensado en solo ir al kebab de la esquina ―me rio y James rueda los ojos riendo un poco.

―Quería que fuese especial ―se acerca a mí―. Sé que no hemos hablado sobre tu padre desde que lo discutimos, por eso quiero aprovechar este momento que tenemos a solas para pedirte perdón.

―James...

―No, en serio Alex, déjame decirte lo que siento ―me dice y yo asiento―. Desconfío de tu padre, eso es algo que sigo sintiendo y que no va a cambiar hasta que demuestre lo contrario, pero no puedo obligarte a tomar la decisión que yo quiera. Tienes derecho a conocer a tu padre, a entender qué es lo que pasó. Tú decides si quieres que él forme parte de tu vida otra vez o no.