Unos días después Emily estaba corriendo para que no la atraparan porque toda la familia tenía que irse a vacunar y ella detestaba las vacunas, asique Riof, Henry, Antonio y Catherine la estaban persiguiendo por todas partes y al encontrarla Riof la estaba siguiendo en el aire fastidiándola un poco.
Emily: ¡no! ¡no! ¡no! ¡no me gustan las vacunas!
Mientras corrían Emily se adelantó mucho y se escondió detrás de un árbol.
Emily: ¿dónde se metió Riof? De seguro quiere asustarme.
Aun así, aprovechó para tomar aire y se sentó un momento. Entonces Emily escuchó ruidos en la copa del árbol y miró hacia arriba, no vio nada y al bajar lento la mirada Riof estaba frente a ella.
Riof: hola.
Emily: ¡a! ¿cómo es qué...?
Riof: sabes que no puedes escapar de mí.
Emily: no quiero ir a vacunarme.
Riof: no seas llorona... -hizo un puchero y Riof volteó los ojos- de acuerdo hagamos un trato, si tú haces caso y te vas a vacunar durante el resto del año sin hacer dramas yo seré el que te tome la mano en el proceso y cuide de ti las siguientes 24 horas después de cada vacuna.
Emily: -*sonrojada*- ¿y si son dos vacunas en un día?
Riof: entonces serán 24 horas por cada vacuna.
Emily: -sonrojada y muy feliz- ¿en serio? No puedo créelo, pues si es así pienso vacunarme 20 veces hoy.
Riof: -*preocupado*- hay descuento por decena.
Emily: ¿eh?
Riof llevó a Emily con su familia y Catherine le dio un cocotazo por hacerlos perder tanto tiempo.
Riof: jaja.
Emily: ¡Riof!
Durante la vacunación Emily tenía la otra mano sobre el regazo y Riof la tomaba suavemente y la acariciaba para que se distrajera de la vacuna, lo cual funcionaba muy bien.
Llegaron a la casa y Emily se llevó a rastras a Riof hasta el patio.
Riof: ¡Emily!
Emily: dijiste que lo harías.
Riof: si, pero pensé que serían cosas como llevarte comida y té caliente a tu cuarto.
Emily: eso será para otra ocasión.
Henry: ¿no me pedirás que los vigile mamá?
Catherine: no, has lo que quieras cariño, sin importar qué sé que puedo confiarle a Emily, hasta hacen linda pareja.
Henry: no hay duda al respecto, ¿quieres jugar un juego de mesa?
Antonio y Catherine: ¡hecho!
Ellos se fueron a lo suyo y Emily le dijo a Riof que quería que hicieran actividades juntos.
Riof: hacemos cosas juntos todo el tiempo.
Emily: eso es solo entrenamiento y peleas, esto es diferente –puso un radio en el suelo reproduciendo la canción de su vals-.
Riof: ¿quieres que baile contigo?
Emily: no quisiste hacerlo en mi cumpleaños.
Riof respiró hondo y le tendió la mano, Emily emocionada la tomó y comenzaron a bailar.
Riof: esto es algo difícil, no puedo hacer que des un giro.
Emily: no hace falta, omite ese paso... solo quiero estar contigo.
ESTÁS LEYENDO
Tsumi no akuryō (los demonios del pecado)
RandomEn esta historia no se puede hablar sobre el bien y el mal de manera totalmente separada, sino sobre la mezcla de varios mundos por la apertura de la puerta al infierno desde donde las más desagradables y peligrosas criaturas vendrán a atacar a la d...
