La mujer contra la que ahora peleaba Karina era joven, con grandes y fuertes piernas y brazos tonificados, piel color caramelo, cabello marrón oscuro atado con una trenza que caía sobre su hombro y que cada vez que se enderezaba acomodaba de nuevo en ese mismo lugar, ojos color avellana y una vestimenta compuesta por un pequeño traje que no tenía ni mangas ni piernas, era como un traje de baño negro hecho de cuero con un cierre en medio, unos guantes que solo cubrían el dedo medio de sus manos también negros y unos protectores en sus piernas que comenzaban por debajo de sus rodillas y cubrían sus pies por arriba, pero por debajo solo se sujetaban con una cinta que pasaba justo por el medio de la planta de sus pies.
Toda esta indumentaria le daba una gran flexibilidad y ligereza para moverse.
Karina: ¿en qué circo crees que estamos? –se preparó para disparar con una de sus armas sin quitar la mano de la que tenía en el cinturón- esto se acaba ahora.
¡Bam!
Karina le disparó directamente al abdomen de la chica, pero esta se impulsó con sus brazos para dar un gran salto en el aire y varios giros en el cielo
Momo: -mientras giraba- ¡clonación! ¡fabulosa Momo seis!
En el cielo a partir de ella comenzaron a aparecer 6 iguales haciendo los mismos giros y cayeron alrededor de Karina.
Karina: no le diste mucha cabeza a ese nombre ¿o sí? –se dio cuenta de que los demás también esquivaron el disparo con facilidad- son muy fuertes todos los de tu equipo, pero era de esperarse... la familia de Hank siempre ha sido muy popular por eso.
Momo: no nos confundas, nosotros somos de la rama secundaria de la familia, por lo que nuestro apellido es distinto, y nuestra fuerza individualmente es 10 veces superior a la de Hank, el único hijo de la familia De la Torre.
Dijeron las 7 al mismo tiempo.
Karina: ¿ah sí? ¿y por qué tan gentil en contarme eso? ¿acaso piensas matarme?
Momo: no es algo que no sepan todos, solo eres estúpida, así que no tengo porque guardarlo como un secreto, pero descuida, no te mataré, a menos que me obligues claro está.
Karina: ya veremos, sin embargo, tú me atacaste primero.
Momo: los humanos son competitivos, sobre todo en nombre de su familia, y está bien así, mi ángel está allá y solo él tiene derecho a decir cuando ya sobrepasé los límites ¿verdad Traion?
Un hombre fuerte y muy grande, musculoso y moreno que no tenía camisa, sino unos pantalones verdes, sin zapatos, con cabello negro erizado y ojos verdes, sus alas eran de su mismo tamaño, grandes y blancas con una franja de plumas doradas al final.
Karina: se ve algo discordante, pero peligroso también, esto no será sencillo.
Ikki estaba frente a Sein y por alguna razón estaba llorando en todas partes, lloraba en la pared e iba al mueble, y de ahí iba a llorar a la esquina.
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Tsumi no akuryō (los demonios del pecado)
RandomEn esta historia no se puede hablar sobre el bien y el mal de manera totalmente separada, sino sobre la mezcla de varios mundos por la apertura de la puerta al infierno desde donde las más desagradables y peligrosas criaturas vendrán a atacar a la d...