Tsumi no akuryō (los demonios del pecado)

#16 El enemigo oculto

Cuando sus compañeros vieron a Kenta dormido le hablaron para que despertara y le dieron bofetadas, finalmente uno de ellos lo golpeó en el estómago con todas sus fuerzas haciendo que despertara escupiendo saliva.

Kenta: ¡¿qué sucede contigo?! ¡¿quieres matarme?! ¿hm? ¿qué hago aquí? ¿la prueba...?

?: ya terminó, quedaron empatados, aunque no estuvo tan mal ya que ambos obtuvieron 6 puntos creo que valoraron mucho su esfuerzo, es increíble que tú hayas podido sabotear el hechizo de ese demonio con tu propia fuerza.

Kenta: ¿con mi propia fuerza? ¿de qué estás hablando? –recordó al hombre que lo ayudó a contener el hechizo de Senshi- ¿acaso...? 

"¡Por supuesto!"

Kenta: lo siento, debo hacer algo, espérenme.

?: ¿no estás cansado? Tal vez deberías comer un bocadillo.

Kenta: ¡que no! Estoy bien –se puso de pie- no vengan conmigo, quiero hablar en privado con alguien.

Sus amigos intercambiaron miradas y asintieron, Kenta les devolvió el gesto, se acomodó la ropa y se fue, iba a ir tras bambalinas, debajo de las gradas cuando vio a Senshi y los demás conversando, entonces decidió ir a hablar con ellos primero.

Kenta: hola.

Senshi: Kenta –dijo sorprendida-.

Karina: te obligaron a despertar muy rápido, pobrecillo.

Kenta: gracias por no inducirme un sueño muy pesado.

Karina: no es mi intención que te pierdas el resto del examen –ahora estaba usando la bata de doctor de Gregorio-.

Kenta: lo sé... lamento lo de tu ropa, fuiste muy hábil para liberarte de ese encierro tú sola.

Karina: sí, pero no te disculpes, son cosas que pasan en estas situaciones.

Kenta: -asintió- Senshi, gracias por esforzarte tanto en ayudarme, aunque te pusieras en riesgo de esa manera, no quisiera ser el culpable de que tuvieras que ser exorcizada como estrategia defensiva.

Senshi: -negó con la cabeza- no te preocupes, estas complicaciones son cosas con las que lidio todos los días y tal parece que así será el resto de mi vida.

Kenta se quedó pensativo un momento y desvió la mirada, apretó sus puños con una expresión que reflejaba frustración y luego tomó la mano de Senshientre las suyas, afincándola en su frente con los ojos cerrados a la vez que gritaba: ¡lo siento mucho!

Senshi: -*sonrojada*- no, está bien... tra-tranquilo.

Kenta: -abrió los ojos y sostuvo la mano de Senshi frente a él- me estoy esforzando para contribuir de manera positiva a este mundo, los portadores de demonios como tú merecen ser reconocidos como héroes y valorados más.

Senshi: -sus ojos brillaron- gracias.

Sein desde donde estaba sentado lo veía siempre con desconfianza mientras que Karina lo contenía para que no hiciera ni dijera nada precipitado.

Kenta: -vio a Sein- si tienes alguna clase de problema conmigo dilo de una vez en vez de estar viéndome como a un criminal.

Sein: no te lo tomes a mal, solo me parece que de los participantes de este examen tú eres uno al cual tener en la mira.

Kenta: ¿ah sí? 

"Es una verdad a medias supongo, sabe cosas sobre mí que no debería, pero ellos son los que tienen a los pecados de su lado y los ayudaré, aunque tenga que pasar por encima de sujetos como él".