~Monkie Kid~ 2️⃣

Animatronicos #3

Espero que les guste~

Nota: No tengo planeado hundirme mucho en el lore de FNAF, mas que nada porque es horriblemente largo, además de que no tengo ni el tiempo ni las ganas de hacer algo muy complicado

Nota-2: Mei seria la Dj, Sandy seria el que atienda la enfermería, Red Son seria otro integrante del grupo, con Yin y Jin siendo los gemelos, todos ellos robots. Pueden votar si por el que quieren que aparezca en el siguiente cap :3

Nota-3: Se que es un centro comercial pero esto es un AU del mundo de Monkie Kid, así que llamare al lugar "centro de entretenimiento" porque parece mas eso que un centro comercial xD

Nota-3: Tang es guardia de seguridad, al igual que el Mayor, aunque este ultimo tiene la conexión con LBD

Llegaron a la cocina y no tardaron mucho en escuchar dos voces discutir, bueno, más bien una de ellas tenía tono de regaño y la otra tono de súplica. Entraron, la cocina era espaciosa, con un par de robots que parecían estar limpiando aunque todo se veía reluciente de limpio, con un delicioso aroma a comida que llamó la atención de niño.

-¡Por favor, un plato más!- sollozo el humano que allí estaba. Se veía exactamente como Tang, aunque vestido con pantalones y zapatos negros, junto a una remera blanca que tenía la palabra "Seguridad" escrito en negro y en grande en la espalda, con una especie de gorra de policía en la cabeza.

-Eso dijiste hace dos platos atrás- bufo a quién pudo reconocer como Pigsy. Era mucho más grande de lo que esperaba, con lo que parecía ser la puerta de un horno o una parrilla en el estómago, la superficie de su cuerpo pintado de blanco para lucir como el uniforme de un chef y algunos instrumentos para cortar colgando de su cinturón. El cerdo levantó la vista, cruzándose de brazos.

-¿Eh?- Tang se volteo, sonriendo al ver al par de monos, al parecer sin notar al niño aún. -¡Volvieron!- dejó al chef tranquilo por el momento. -¿Encontraron al intruso?- porque el sistema de seguridad había alertado una presencia humano que no debía estar allí a esas horas.

-Sip, yo lo encontré- Wukong sonrió, obviamente orgulloso.

-Es solo un niño- Macaque se adelantó y es entonces que el adulto se fijo en el niño entre los brazos del mono, parpadeando con algo de sorpresa.

-Hola- MK decidió ser educado y saludar con una pequeña sonrisa en su rostro,

-Hey- Tang devolvió el saludo, luciendo confundido ante la presencia del niño. -Supongo que ahora toca llevarte a la oficina y llamar a tus padres- se rasco ligeramente la nuca, esas son las reglas.

-Un problema...- Wukong hablo, logrando que lo miraran. -...dijo que no tiene padres a los que llamar- y la expresión del adulto cae, luciendo triste por un segundo, aunque borra esa expresión rápidamente mientras se aclara un poco la garganta.

-Supongo que en ese caso, podemos esperar hasta la mañana para ver que hacemos contigo- suspiro, algo cansado y triste de solo pensar que debía devolver al niño sin padres a lo que seguro era un orfanato.

-Supongo que si...- MK en serio espera que pueda volver a su propio mundo antes de que algo así suceda. Su estomago gruñe, recordándole la sensación de hambre. -¿Puedo comer algo?- porque el fuerte aroma fideos caseros y sopa que inundaba la cocina solo hacía que su pobre estómago rugiera con más fuerza. Además, se preguntó si la comida de la versión robótica de Pigsy sería tan buena como la de su mundo.

-Claro, chico- Pigsy muestra una amable sonrisa, ya moviéndose para servirle un tazón de fideos y sopa al niño.

-¡Me dijiste que ya no había mas!- Tang hace un puchero, molesto con el chef.

-Para ti no hay más- bufo el robot, dejando suavemente el tazón sobre la mesa, yendo para buscar una silla y colocándola junto a la mesa, Macaque adelantándose para dejar al niño sentado en la silla. -Ahí tienes, disfruta- sonrió ligeramente, viendo como el menor empezar a comer.

-Que rico~- tarareo con puro deleite, agradecido por el cálido tazón de comida. Al parecer no importa que dimensión sea, Pigsy siempre cocina delicioso. Come con tranquilidad, viendo de reojo a los robots hablar con el guardia de seguridad pero sin estar muy atento a lo que hablaban, feliz de simplemente poder llenar su vacío estomago. Tomo el tazón entre sus manos para alzarlo y así poder sorber el resto de la sopa, dejando el tazón nuevamente en la mesa con un largo suspiro. Tenia la pansa llena y el corazón contento ahora. -¿Eh?- una repentina estática de repente lleno su cabeza, el ruido siendo lo suficientemente fuerte como para ahogar todo lo demás a su alrededor y haciéndolo sentir abrumado. Jadeo, viendo de reojo algo moverse y es entonces que voltea ligeramente la cabeza, abriendo los ojos con alarma al verla en una esquina, mirándolo con aquellos ojos rojizos que le daban escalofríos y con su largo cabello blanco pareciendo flotar suavemente a su alrededor, junto a una sonrisa malévola que deja ver colmillos. Es algo transparente, como un fantasma, pero puede reconocerla. Es ella, la LBD de ese mundo. Grita mientras lleva ambas manos para agarrar su cabeza, el sonido de la estática volviéndose insoportable pero esta vez acompañado de risa ligera y llena de burla. Cae de la silla, golpeando el suelo con un quejido, pero a pesar del dolor punzante en su muñeca no duda en levantarse, tropezando mientras corre, sin poder escuchar realmente el llamado preocupado de todos los demás presentes.

Sale de la cocina con prisa y corre ciegamente, solo queriendo que el contante ruido en su cabeza se detuviera y alejarse de ella. Tropezó en su apuro y miro a su alrededor, la vista algo borrosa por las lagrimas del dolor de cabeza que tenia debido al ruido de la estática y de su escalofriante risa. Entonces, lo ve, la entrada a la ventila que no tiene la tapa que lo cubre. Se lanza y se arrastra por la ventila, jadeando e ignorando el dolor en su muñeca, sin detenerse hasta que la estítica desaparece. Se acurruca en la ventila, sintiendo la fría superficie contra su piel tibia por la carrera, sintiéndose agotado y cansado. Se desmaya, sin poder escuchar las voces de los robots y del guardia de seguridad que gritan su nombre, buscándolo con preocupación.