~Monkie Kid~ 2️⃣

Heart

Espero que les guste~

Petición de: Game_LoverT

MK se quejo entre dientes al caer de cara al suelo, haciendo una mueca cuando su boca se lleno de tierra. Se levantó, su cuerpo algo tembloroso por el entrenamiento, escupiendo y tosiendo por culpa de la tierra.

-¡Bien hecho, Kid!- sonrió Wukong, enrollando su cola alrededor de la cintura ajena para levantarlo, soltándolo apenas tuvo los pies firmes en el suelo. -Estas mejorando~-

-...gracias, Monkie King...- sonrió, ligero y cansado, tambaleándose a donde había dejado su mochila, deteniéndose en seco al ver uno de los monos de su maestro allí. Era pequeño, aunque estaba seguro que no era una cría, uno de los pocos que tenía manchas marrón claro en su pelaje blanco pero lo que más llamaba la atención era mancha en su frente con forma de corazón notable. Tenía una sonrisa en su adorable rostro, sosteniendo y extendiendo una botella de agua, una que el menor estaba seguro que había sacado de su mochila. Parpadeo, confundido. -¡Gracias!- aceptó la botella para darle un gran trago, logrando aliviar su sed y sacando algo del sabor a tierra que había tenido. Bajo la vista al escuchar chillidos, notando que el pequeño mono extendía sus brazos hacia él, en una obvia petición. -Amm...estoy sucio y sudoroso...- hizo un gesto a sí mismo y su desastroso estado pero el pequeño mono chillo, insistente. Se encogió de hombros y tomó el resto de su botella antes de inclinarse, alzando al pequeño y enderezándose mientras lo acomodaba contra su cadera, sonriendo ante los chillidos llenos de felicidad que hacia. -Eres adorable~- tarareo con puro encanto, escuchando entonces su teléfono y luchando para agarrarlo con una sola mano, sudando al ver su alarma. -¡Llegare tarde!- chillo con pánico, inclinándose con toda la intención de dejar al mono y agarrar su mochila, solo para encontrarse con un problema. El pequeño no lo soltaba, manteniendo un firme agarre en la ropa del humano y con su cola enrollada al derredor de la muñeca ajena, soltando chillidos de protesta. -Ammm, ¿Monkie King? Tengo un problema- sudo, sonriendo con nerviosismo.

-Oh...ese es Heart- sonrió, reconociendo fácilmente al pequeño. -Es algo pegajoso- agarro al mono con toda la intención de alejarlo de su alumno pero no lo logró, frunciendo ligeramente el ceño ante la resistencia. -Suéltalo Heart, tiene que irse- el pequeño chillo, negándose a soltarlo. -¡Suéltalo!- ordenó con voz firme pero lo único que consiguió fue más chillidos de negación.

-¿Está bien?- preguntó MK, preocupado, dando suaves palmadas a la espalda del pequeño.

-Si, es solo que se niega a soltarte- frunció el ceño, confundido.

-¡Tengo que irme!- se removió, nervioso y ansioso. -¡Y no puedo llevarlo conmigo, Pigsy me echará a patadas!- además de que no debía ser nada bueno traer a un mono que vivía relativamente libre a un lugar tan pequeño y cerrado.

-Ya sé, ya sé...solo déjame...- soltó unos chillidos, MK aguantándose la risa al escucharlo,  pero lo que sea que le dijo al pequeño pareció funcionar de alguna manera porque podía sentir como lo soltaba lentamente, luciendo triste.

-Awwww, lo siento mucho, pequeño...- acarició suavemente la cabeza del mono, quien se apoyo en el toque al instante. -...pero tengo que irme- agarro su mochila y se añejo, gritando una rápida despedida, sintiendo como su corazón se rompía ante los tristes chillidos que soltaba el pequeño. Llego tarde y apenas alcanzo a bañarse antes de que su jefe básicamente empujara su uniforme a su manos, siendo echado a patadas para entregar los pedidos acumulados y con los gritos ajenos resonando en su cabeza.

La próxima vez que corrió hacia la casa de su maestro para entrenar, tropezó hacia atrás cuando un pequeño cuerpo de repente choco contra su pecho, rodeándolo con sus brazos de manera inconsciente y apenas logrando no caer de espaldas, suspirando de alivio al recuperar el equilibrio.

-¡Hola pequeño~!- lo reconoció por los manchones castaño oscuro que tenia encima, derritiéndose por dentro ante los chillidos llenos de felicidad que podía escuchar. Arrullo con puro encanto, abrazándolo con todo el cariño posible, contento al escucharlo chillar un poco mas y sintiendo como enterraba su rostro en su hombro, sus pequeñas manos apretando su ropa.

-Hey Kid...- levanto la vista, viendo como su maestro se acercaba a paso tranquilo. -...veo que Heart te encontró otra vez- sonrió, divertido y con cariño al ver a uno de sus pequeños tan apegado a su sucesor. MK asintió, restregando ligeramente su mejilla contra el suave pelaje del pequeño mono entre sus brazos, riendo alegremente cuando Heart le devolvió el gesto con todo el entusiasmo del mundo.