Sun Wukong: Reborn

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Espero que les guste~

Nota: Basado en el Sun Wukong de la película que dice el título.

Nota-2: Tengo poco tiempo últimamente para ver cualquier cosa, así que no pude ver la película entera e hice lo que pude con las escenas que vi pero de igual manera, espero que haya quedado mas o menos acertado

:3

Nota-3: Tengo que decir que me gusto como quedo ^_^

MK se mantuvo quieto, sintiendo las grandes manos con largos dedos y uñas negras como garras posarse bajo sus brazos, soltando un pequeño sonido de nerviosismo al ser alzado, balanceando ligeramente los pies al no sentir el suelo. Frente a él había una extraña versión de Monkie King, mucho más alto y con el pelaje más oscuro, la marca que rodeaba sus ojos siendo negra para su sorpresa, junto a una extraña expresión sería en su rostro y algo parecido a una bincha que sobresalía de entre el pelaje de su frente, vistiendo ropa algo oscura a pesar de sus colores vivos.

-¿Mi sucesor?- enarco una ceja, recordando una de las tantas cosas de las que el menor había divagando por culpa de su nerviosismo.

-Sip- asintió. Había estado tan sorprendido cuando aquel extraño portal se abrió de repente, temeroso y asombrado ante la extraña versión de Sun Wukong que había salido de allí. Divago, soltando todo lo que tenia en su mente en un principio, algo intimidado y nervioso por la seria expresión en el rostro ajeno. -O por lo menos, soy el sucesor del Monkie King se este mundo- cielos, la situación era confusa.

-Eres pequeño, demasiado para ser sincero...- murmuró, pensativo, analizando con la mirada al nervioso y ansioso humano que sostenía. -...algo flaco y blando también...- apretó suavemente el pequeño cuerpo que sostenía, el menor riendo a carcajadas por las cosillas que eso le causó. -...aunque tienes poderes...- era difícil no sentir el aura de poder que ese pequeño humano tenía a su alrededor, aunque algo más llamó su atención. -...y tienes un enorme sello de bloqueo temporal...- entrecerró los ojos, mirando el pecho del chico. -...¿Quién rayos te puso eso?- preguntó con seriedad, frunciendo ligeramente le ceño, parecía algo molesto ante la perspectiva de que alguien hubiera puesto ese sello en el niño.

-¡Fuiste tú!- sonrió con nerviosismo, el mono luciendo confundido. -Bueno, no tu tú, si no mas bien el tu de este universo- por todos los cielos, esto era tan confuso.

-¿Por qué él haría algo así?- bufo.

-Monkie King dijo que era para aprender a controlar mis nuevos poderes a mi propio ritmo...o eso es lo que entendí- extendió sus manos para apoyarlas sobre los brazos que lo sostenían, tarareando ante la extraña textura del pelaje ajeno y sonriendo ante la suavidad. -¿Puedo ver tu bastón, Monkie King?- preguntó con curiosidad, sintiéndose extraño de hablar con otra versión de su maestro, el cual se veía algo más oscuro y serio de lo que esperaba, así que tenía cierta curiosidad por saber cómo se vería el bastón de esa versión.

-Claro- el mono se encogió de hombros, dejando al menor con tranquilidad en el suelo, haciendo un gesto hacia su propia oreja, el menor haciendo una mueca de espanto y soltando ligeros sonidos de incomodidad al ver que el bastón que salía de la oreja ajena no estaba encogido.

-¡¿No te duele?!- chillo.

-Para nada- sonrió, divertido al parecer ante la expresión ajena, girándolo hábilmente antes de extenderlo. MK jadeo, asombrado, aquel bastón se veía en buen estado y muy bien cuidado, aunque sus colores se veían tan opacos como se lo esperaba. -Adelante, pruébalo- el chico dio pequeños saltos de emoción, aceptando el bastón ajeno con manos cuidadosas, sintiendo la familiaridad al agarrarlo. Su textura se sentía diferente y estaba seguro que era ligeramente más pesado que el suyo pero aún era familiar y cómodo de alguna manera mientras lo giraba entre sus manos con sorprendente facilidad.

-Esto es genial~- chillo con emoción, sin notar como aquella versión de Monkie King lo miraba con diversión y moviendo ligeramente su cola con gusto. -¡Mira el mío!- llevo su mano a su oreja y sacó su propio bastón, haciéndolo crecer rápidamente y girándolo antes de mostrarlo con orgullo.

-Es brillante...- tarareo, tomando el bastón de colores vivos y fuertes, haciéndolo crecer un poco para adaptarse a su mano, girándolo con curiosidad. Era mucho mas liviano que el suyo propio. 

-Oh, también sé hacer esto- encogió el bastón que tenía e hizo un movimiento exagerado, mostrando una gran sonrisa mientras hacía girar rápidamente el pequeño bastón entre sus manos, las cuales no parecían tocar su bastón.

-Buen truco~- bufo con diversión, entregando el bastón ajeno y agarrando el suyo para guardarlo, alejándose un par de pasos. -Mira esto, niño- con un destello de luz, exagerado y casi dramático, el mono se transformó en un tigre de gran tamaño, con algunos de sus colores tan característicos en el pelaje naranja y blanco con rayas negras.

-¡Asombroso!- chillo con ojos brillantes. -Yo solo puedo transformarme en águila...y en mitad araña...- se estremeció ante aquel recuerdo de tener la parte inferior de uno de los seres que menos le gustaba en el mundo. Aún les tenía a las arañas, era difícil no temerles, en especial después de enfrentarse a Spider Queen y sus seguidores. El tigre simplemente hizo un suave sonido, avanzando con elegancia hacia el menor y empujando su costado con su hocico. -¿Eh?- parpadeo, confundido, posando su mano sobre la cabeza del gran animal y acariciando ligeramente el suave pelaje mientras guardaba su propio bastón. -¿Quieres...que suba?- preguntó cuando el mayor siguió empujando, insistente, recibiendo un suave gruñido como respuesta. Lo tomó como una afirmación, notando con cierta curiosidad como el gran felino lo rodeaba, chillando cuando de repente el tigre se agachó y pasó por entre sus piernas, el menor apenas logrando mantener el equilibrio para no caerse y acomodándose en el lomo del gran felino, sorprendido. -¿M-M-Monkie King?- jadeo, aferrándose al pelaje ajeno pero teniendo cuidado de no apretar mucho o tirar, temeroso de quizás molestarlo. Wukong soltó una especie de resoplido, avanzando un par de paso para sentirse cómodo con su pasajero, moviendo su cola con diversión. MK grito cuando el felino se lo vio de repente, veloz y ágil, una risa saliendo de su pequeño cuerpo mientras era llevado a quien sabe donde. -¡Esto es genial!- rio alegremente, sintiendo el aire golpeando su rostro y los músculos bajo suyo del gran animal que lo llevaba. Wukong rujió, aumentando la velocidad ante la risa ajena, divertido por su alegría ante un simple paseo.

~Monkie Kid~ 2️⃣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora