Sé que el primer final, lo sufrieron al igual que yo al escribir, pero como dije en la descripción del fic, sería corto y basado en películas, en este fic usé mi imaginación con la película "El misterio de la Libélula", claro que hice muchas adaptaciones, pero espero que hayan disfrutado la historia en su totalidad.
Muchas gracias por seguir y comentar, sus comentarios fueron muy importantes para mi.
La abrió y ella entró y se tumbó en el catre, cuando oyó sonar el teléfono y fue a contestar.
E: Hola, sí, soy yo, qué pasa. - Al otro lado de la línea una persona le decía que en una isla cercana a Nayarit informaban que habían encontrado sobrevivientes del accidente. Colgó, hizo una llamada, se preparó y se fue.
Horas después se dirigía en lancha a reunirse con el capitán Mendoza, quien antes los había llamado a él y a Luiz. Cuando llegaron allí les llevaron a una sencilla casa de pescadores donde les esperaba una señora. Allí escucharon todo lo que había pasado con el avión y cómo los pescadores habían encontrado a las personas en el mar.
Señora: Encontramos a los dos hombres sujetando a la niña para que no se sumergiera, estaba demasiado débil, habían permanecido demasiado tiempo en el agua fría. Cuando los trajeron aquí, uno de los hombres respiró profundamente y pronto murió, estaba débil y deshidratado, el otro aún requiere cuidados. - Esteban la interrumpió tratando de averiguar sobre María, pero siguió hablando aunque estaba nervioso. - La chica con el niño en su vientre dio a luz el mismo día que la encontramos. - la señora se levantó y fue a una habitación de la casa, entró dejándolos allí y volvió con algo en brazos. - La muchacha dio a luz a Esperanza, pero estaba débil y tenía heridas profundas por la caída. - Miró a Esteban y le entregó a la niña.
I: María le puso nombre a nuestra hija, se llama Esperanza, ¿ha visto a su hija? - preguntó la señora que asintió con la cabeza. - Mi hija, mi Esperanza.
Se quedaron un poco más en la isla, la señora les enseño donde estaban enterrados los cuerpos, Esteban no podía apartar los ojos de su hija, la niña era preciosa, blanca como su madre, pero con el pelo claro, pero sus ojos pertenecían a María. Después de confirmar oficialmente las muertes, Esteban, el capitán Medonza y Luiz volvieron a la reserva, desde allí se remitieron las documentaciones.
Esperanza crecía hermosa, cada vez que Esteban la miraba sentía la presencia de María. Una tarde la pequeña dormía en brazos de su padre, cuando una mariposa se posó en su cuna, Esteban miró y sonrió, Esperanza se despertó.
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E: Hola pequeña, ven vamos a cambiar este pañal y luego papá te hará dormir y cuando despiertes jugaremos fuera en el jardín, hoy hace un día precioso. - Esperanza sonrió con ganas de ir a cogerle la carita, "venga pequeña, duerme, que aún es pronto, vamos a dormir. - La acunó y le canturreó a Esperanza que pronto se durmió y él se fue a su habitación.
