Más tarde, todo iba bien en la granja. Inês trabajaba a tiempo parcial en la clínica, que era una clínica para los empleados de las granjas de la región. Amanda, Mariella y Carlos trabajaban como médicos, claro que los casos graves o con especialistas eran enviados para seguimiento en el hospital de la ciudad.
Y todo iba bien, Lucia salía con Rodrigo Fuentes, la pareja hacía felices a sus padres y hasta hablaban de matrimonio, pero solo después de la graduación de Lucia y por supuesto de su viaje.
Amanda y Orlando vivían juntos, era oficial que estaban casados, vivían en una casa en la ciudad, era la casa que siempre quisieron comprar. Después de una conversación la pareja decidió adoptar un bebé, y los trámites estaban en marcha. Amanda acudió al hospital con el médico de urgencias y algunos días a la clínica de granjas. Estaban bien, Orlando trabajaba casi toda la semana en la oficina y los fines de semana se quedaba más en casa o en la granja.
La señora Cecilia, bueno esa ni se menciona, según Cassandra ella estaba tranquila, porque sus hijos y nietos estaban bien y sus vidas iban por buen camino. Por las mañanas la señora era atendida por Inés, y le encantaban las tardes en el club de señoras que tomaba Amanda.
Por las mañanas, la atención y el cariño que recibía de todos la extasiaban. Victoriano disfrutaba del embarazo de su mujer en todos los sentidos, desde extraños antojos alimenticios hasta deseos sexuales. Y, por supuesto, aquella mañana no iba a ser diferente.
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- Inés, amor ya voy...' - siente cómo ella aprieta su miembro dentro de su intimidad y le clava las uñas en los muslos.
- Mi Toro, aguanta.... - se mueve rápido y siente los ágiles dedos de él tocar su clítoris y ya está, Inés se ha corrido intensamente lanzándose hacia atrás. - Ahhhhh. Amor hummmm.
- Hummmm Ines, qué delicia. Ahhhhhh. - Victoriano la abrazó y se quedó disfrutando del momento. Hasta que Inés se bajó de su regazo.
- Qué Toro más fuerte he sido hoy, quiero que mi luna de miel sea muy placentera.
- ¿Me dejas leer un capítulo de ese libro?
- Hay uno nuevo. - Ella abre el cajón y se lo enseña. - Capítulo 12.
- Inés. Morenita. Sabes que nuestro bebé sigue ahí. Y no podemos exagerar.
- Lo sé, por eso elegí el capítulo 12, está en la cama. Ven a ducharte y baja a tomar un café. Esta mañana de querer a mi Toro mayor me ha dado hambre.
- ¿Está mi pequeño en tu vientre, sigue bien?
- Sí, está agitado. Tengo miedo de que cuando nazca Alejandro sea como tú. No parará.
- Amor, después de Alejandro, ¿intentamos una niña?
- Dios, este ni ha nacido y ya quiere más.
- Ay Morenita, tendremos un par de hijos, será nuestra Constanza.
