Esa Mujer VII

125 16 4
                                    

Capítulo 7 - A grandes pasos

- ¡No puedo! - Maria interrumpió el beso de Esteban y salió de la habitación prácticamente corriendo, subió al ascensor y abandonó la empresa, caminó hasta una plaza cercana y observó a unos niños, después cogió un taxi y se dirigió a su nueva casa. Cuando llegó a la casa,  la niñera estaba jugando con los niños en el salón, tuvo la impresión de que por allí había pasado un huracán.

- Hola Rosa, buenas tardes, hola mis amores. - dijo abriendo los brazos a sus hijos.

- Hola señora - la mujer se levantó del suelo con Estrella en el regazo y se acercó a María, y Héctor se agarró a las piernas de su madre.

- Mamy, cuando vamos a ver a papi, lo echo de menos. - habló astutamente Héctor.

- ¿Queréis ver a papi? - Héctor y la pequeña Estrella dijeron que sí con la cabeza. - Muy bien, le diré que venga a buscaros para dar un paseo, ¿qué os parece?

- ¡Eba! - el niño saltó de alegría.

Rosa se llevó a los niños a merendar, María se quedó en el salón, cogió el teléfono y le llamó, no quería hablar con él después de lo ocurrido, pero sus hijos eran más importantes en ese momento.

- Hola, soy yo - respiró hondo al oír su voz.

- Hola Maria, ¿va todo bien?

- Sí, los niños te echan de menos, ¿puedes venir a dar un paseo con ellos?

- ¿Qué te parece si vamos todos a la casa de campo? - oye su respiración profunda. - Todavía no me he deshecho de ella, podemos ir allí y quedarnos unos días, ¿qué te parece?

- Puedes ir con los niños, así conocerás a su niñera. Rosa es una mujer muy estupenda.

- María, por favor, yo me quedaré en la habitación de invitados y tú te quedas con los niños en la habitación principal, ¡vamos todos!

Héctor entra en la habitación gritando y María sonríe al niño.

- Héctor, estoy al teléfono, ¿es tu padre el que quiere hablar con él?

- Sí. -  grita el niño.

- Esteban , Héctor quiere hablar contigo.

- Papá, te echo mucho de menos, ¡ven a buscarme!

- Eh campeón, papá también te extraña, ¿vamos a la granja? Dile a mamá que venga y vamos todos, ¡sí!

- Le pasa el teléfono a María y le dice: -Vamos a la granja, mamá, vamos, hay un lago y muchos caballos.

-¡Creo que alguien es feliz allí!

- Sí, nos vamos dentro de una hora? - dice sonriendo al teléfono y Esteban se da cuenta.

- Una hora y estaré allí para recogerte.

- Ok, hasta luego. - estaba a punto de colgar el teléfono cuando oyó.

- María, ¡te quiero! - ella cuelga el teléfono y contesta: "Yo también te quiero, Esteban ", y se va a hacer las maletas.

A la hora que habían acordado Esteban estaba con su todoterreno delante de la casa de Maria, la esperaba con una bonita sonrisa, Héctor al ver a su padre, se soltó de la mano de su niñera y corrió a sus brazos. María llevaba una Estrella en los brazos, Rosa la ayudó con las bolsas y luego las metieron dentro del coche.

- Gracias Rosa, tienes la semana libre, volveremos el domingo por la tarde. - dijo Maria mirando a su hijo que abrazaba a su padre.

- Volveremos el lunes María, el domingo nos encontramos con tráfico, mejor volvemos el lunes, porque no queremos quedarnos atascados en la carretera con dos niños, y uno de ellos todavía usa pañales, ¿te acuerdas Héctor de lo que pasó? - dijo besando a su hijo y yendo a besar a su hija, que casualmente estaba en el regazo de María, y Esteban aprovechó la ocasión y la besó en la mejilla, en la comisura de los labios y sonrió mientras se alejaba. - ¿Nos vamos?

Cuentos cortos en español ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora