Lourdes y Martina estaban a cargo de la reunión trimestral con los inversores y los directores de todos los departamentos. La morocha se sentía demasiado frustrada y tenía ganas de gritar.
Había escuchado a su novia quejarse durante horas sobre Nicolas Ferrero, pero ella casi nunca tenía que lidiar con él, ya que ese era el trabajo de Lourdes. Sin embargo, en ese momento le costaba contenerse.
Cada vez que Lourdes hablaba, Ferrero la interrumpía constantemente y Martina se encontró con la mirada molesta de su padre, quien también estaba cansado de las interrupciones.
-Señorita Gonzalez...- comenzó Ferrero interrumpiendola... otra vez
-Señor Ferrero- intervino Martina con firmeza -esto no es un debate. Si deja que la Señorita Gonzalez termine, quizás pueda responder a muchos de sus comentarios. Tiene el resumen de todas las cifras delante, ábralo y espere a que la Directora de Operaciones termine- El hombre se quedó callado, claramente molesto por haber sido interrumpido de esa manera -Por favor Señorita Gonzalez continúe-
La colorada asintió y continuó con su exposición.
Al finalizar, varios directivos e inversores hicieron preguntas a ambas mujeres, a las que respondieron con confianza pero Ferrero permanecía en silencio observándolas a ambas.
-Justo antes de finalizar la sesión, tengo una pregunta- anunció
-Adelante- respondió la morocha
-¿Cuál es la política de la empresa con respecto a las relaciones íntimas entre compañeros?-
Martina había estado esperando esa pregunta durante meses. Ella y Lourdes mantenían una relación estrictamente profesional en la empresa, pero se permitían ser un poco más cercanas en la intimidad de sus despachos. Aunque no lo ocultaban, se habían encontrado con varios compañeros afuera de la empresa, compartían comidas diarias y se iban juntas a casa por las noches. Era un secreto a voces que estaban saliendo pero no habían confirmado nada.
Martina se cruzó de brazos y miró al hombre -Las relaciones están permitidas siempre que se notifiquen a Recursos Humanos y que ambas partes muestren la voluntad de mantener sus asuntos personales fuera de las paredes de esta empresa- dijo desafiante. No apartó la vista de Nicolas Ferrero ni por un segundo.
-Entonces supongo que usted y...- comenzó a decir, pero la ojimarron lo interrumpió.
-El uno de septiembre- dijo firme -Mi relación fue notificada a Recursos Humanos el día uno de septiembre- Mantuvo su mirada fija en el hombre -¿Alguna pregunta más?-
Un incómodo silencio llenó la sala, mientras las personas a su alrededor parecían sentirse increíblemente incómodas con la interacción.
-No- dijo finalmente Ferrero
-Perfecto- respondió Martina rompiendo el contacto visual y dando por finalizada la reunión.
Los directivos comenzaron a abandonar la sala hasta que solo quedaron Martina, Lourdes y Daniel
La morocha tenía la vista fija en su netbook mientras cerraba todas las aplicaciones abiertas y no levantó la mirada hasta que sintió una mano en su hombro.
-¿Estás bien?- preguntó Lourdes con preocupación.
Martina suspiró -Lo odio pero sí, estoy bien-
Daniel se colocó frente a ellas -Esto se está saliendo un poco de control. Nunca me agradó Ferrero pero su comportamiento hoy fue una falta de respeto- negó con la cabeza.
-¿Hay algo que podamos hacer al respecto?- preguntó Martina
Daniel se rascó la barbilla pensativamente -Es complicado. Si lo dejamos de lado de la empresa, perderíamos mucho dinero. No me preocupa el dinero pero sí los puestos de trabajo que estarían en riesgo-
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Love - Martuli
DiversosDos mujeres que viven en un mundo de hombres luchan día a día para que su trabajo se haga valer pero no saben que pasará cuando sus carreras se junten e inevitable sus vidas también lo hagan