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Mientras Gene y Paul caminaban de regreso a casa, Gene tomó la mano de Paul con determinación.

GENE SIMMONS: Paul, hay algo que quiero discutir contigo.

PAUL STANLEY: ¿que pasa, Gene?

Gene vaciló por un momento, reuniendo valor antes de hablar.

GENE SIMMONS: he estado pensando mucho en nuestra familia últimamente, y... me gustaría proponerte algo.

Paul levantó una ceja, intrigado por la seriedad en la voz de Gene.

PAUL STANLEY: ¿que tienes en mente?

Gene respiró hondo antes de continuar.

GENE SIMMONS: ¿qué te parecería si... si adoptamos a una niña?

Paul se detuvo en seco, sorprendido por la propuesta de Gene. No sabía qué decir, pero su corazón se llenó de emoción ante la idea.

PAUL STANLEY:  Gene... no sé qué decir. Es una idea maravillosa, pero...

Antes de que Paul pudiera terminar su frase, Gene lo abrazó con fuerza.

GENE SIMMONS: lo sé, Paul. Sé que es una decisión importante, pero creo que juntos podríamos darle a una niña una vida increíble.

Paul se separó del abrazo de Gene, mirándolo fijamente a los ojos.

PAUL STANLEY: estoy de acuerdo, Gene. Pero antes de tomar cualquier decisión, deberíamos hablarlo con Evan. Él es parte fundamental de nuestra familia y su opinión es importante.

Gene asintió con una sonrisa, emocionado por la perspectiva de ampliar su familia.

GENE SIMMONS: tienes razón. Hablaremos con Evan y tomaremos la decisión juntos.

Con una sensación de esperanza y anticipación en sus corazones, Gene y Paul continuaron su camino hacia casa, listos para compartir su idea con su hijo y embarcarse juntos en esta nueva aventura familiar.

Después de haber compartido esa importante conversación, Gene y Paul caminaban hacia casa con una mezcla de emociones. La idea de ampliar su familia les llenaba de alegría y anticipación, pero también sabían que debían abordar el tema con sensibilidad y consideración hacia Evan.

Al acercarse a casa, Paul detuvo a Gene con una mirada seria.

PAUL STANLEY: Gene, antes de hablar con Evan, quiero que sepas que esto significa mucho para mí. Estoy emocionado por la posibilidad de darle un hogar a una niña necesitada.

Gene sonrió, apreciando la seriedad y el compromiso de Paul.

GENE SIMMONS:  yo también, Paul. No puedo pensar en nada que quisiera más que compartir nuestro amor y nuestro hogar con una niña.

Decidieron esperar hasta que estuvieran todos juntos en casa para abordar el tema con Evan. Mientras tanto, compartieron una sonrisa cómplice, sabiendo que estaban juntos en esta decisión importante.

Al entrar en casa, encontraron a Evan jugando en la sala de estar. Los dos padres intercambiaron una mirada significativa antes de sentarse junto a él.

GENE SIMMONS: Evan, ¿te gustaría hablar de algo importante con nosotros?

Evan asintió, curioso por la seriedad en las voces de sus padres.

PAUL STANLEY: estamos considerando la posibilidad de ampliar nuestra familia, Evan. ¿Qué opinas sobre la idea de tener una hermanita?

La expresión de Evan se iluminó con una sonrisa emocionada, y con un entusiasmo contagioso, respondió:

EVAN: ¡Sí, eso sería genial!
¡Me encantaría tener una hermana!

La alegría en el rostro de Evan confirmó la certeza de Gene y Paul de que estaban tomando la decisión correcta.

Con el apoyo de Evan, se sentían aún más seguros y emocionados por el próximo capítulo en su vida familiar. Juntos, comenzaron a planear y prepararse para darle la bienvenida a un nuevo miembro a su hogar.

Después de una larga conversación llena de risas y planeamiento, decidieron que lo primero que harían sería investigar el proceso de adopción y hablar con un profesional para obtener orientación.

Con una sensación de anticipación en el aire, se retiraron a sus habitaciones esa noche, con el corazón lleno de amor y la mente llena de sueños emocionantes sobre el futuro.

Mientras Evan se acostaba en su cama, observaba la suave luz de la luna filtrándose por la ventana, sintiendo una sensación de calma y emoción por lo que el futuro les deparaba como familia.

En la habitación de Gene y Paul, la felicidad se palpaba en el aire mientras se abrazaban con ternura. Gene rodeaba a Paul con sus brazos, sintiendo una oleada de felicidad y emoción por la decisión que habían tomado juntos. Paul, mientras tanto, acariciaba suavemente el cabello de Gene, sintiéndose feliz y, al mismo tiempo, ansioso por lo que les esperaba en el proceso de adopción.

GENE SIMMONS: -susurrando- te amo, Paul. Estoy tan emocionado por lo que nos depara el futuro.

PAUL STANLEY: -sonriendo- yo también te amo, Gene. No puedo esperar para darle la bienvenida a nuestra hija en nuestra familia.

Con un beso tierno y lleno de promesas, se acurrucaron juntos, sintiendo la conexión y el amor que compartían. Aunque había un aire de anticipación y nerviosismo por delante, sabían que juntos podrían enfrentar cualquier desafío que se presentara en el camino hacia la expansión de su familia.

Y así, con los corazones llenos de amor y esperanza, se sumergieron en un sueño profundo y reparador, listos para despertar al nuevo día con renovada determinación y amor por lo que les deparaba el futuro.

♡My Starchild 1♡ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora