Sombra - Dahyun & Tú.

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—La idea es que tengas una sonrisa, no que te la pases deprimido— Regañó Boyoung. — ¿Qué razones tengo para sonreír? — Pregunté viendo el cielo desde el asiento.

—Ya que tanto sabes de mi sabes que tengo depresión severa, de no ser por el psiquiatra y mi fuerza de voluntad no existiría más— Advertí.

—Está bien, te peleaste con Dahyun, pero por lo menos ni siquiera de imagina quién te pueda gustar— Intentó darle la vuelta al asunto.

— ¿Y qué pasará cuando de verdad lo sepa? — Respondí. —Da igual, no voy a poder ser feliz en general— Fuí más al pesimismo.

— ¿No hay nadie más que siquiera te pueda gustar? — Preguntó, negando de inmediato yo.

—Lo he intentado, de verdad, ¿Crees que no quisiera arruinar la estabilidad que tengo con mi familia? — Revelé.

— ¿Tú te diviertes en lo que más haces? — Pregunté. —Una vez que eres la mejor del mundo, ¿Te divertiría repetir lo más básico? — Cerré los ojos, recostandome más.

—Tienes solo veintiuno, sal al mundo— Se notaba que no tenía más respuesta a mis preguntas.

—No tengo ganas, aunque lo intentara no conseguiría nada— Medio abrí los ojos. —Ya me aburrí del dinero, me aburrí de esta vida de idol años antes de serlo siquiera— Acomodé mi cabello hacia atrás.

— ¿Por qué no te suicidas? — Preguntó directamente. —Esa no es pregunta muy propia de ti— La miré sutilmente.

—No te estoy invitando a que lo hagas, te estoy preguntando el porqué aún no lo haz hecho si tanto estás aburrido con la vida— Aclaró.

—Si hay un cero con cero uno de porcentaje de estar con Dahyun, prefiero vivir hasta comprobarlo— Respondí.

—Además, suicidarme solo por esto sería faltarme el respeto a mi mismo— Añadí. —Y poner tristes a las nueve y Lily es algo que tampoco me perdonaría, podría sacrificarme por ellas, es la única forma decente de morir para mi— Me apoyé en el cristal.

— ¿Qué harás si no puedes estar con Dahyun? — Preguntó ahora. —Me iré al Tíbet y me haré monje— Respondí rápidamente, haciendo que me viera raro.

—Creo que tanto tú como yo hacemos un par de planes para cada cosa, pero no tengo ningún plan por si eso pasa— Añadí. —Supongo que nadie se muere de amor— Terminé.

—Tienes razón, aunque suene distante que lo diga yo porque mi mente funciona bien, de la persona que más me he enamorado en la vida eres tú— Reveló ahora ella. —Y sin embargo puedo estar aquí, sin verte como te podía ver antes— Suspiró al final.

— ¿Piensas que puedes ganarle a tu mente obligandote a estar conmigo sin ser pareja? — Cuestioné. Negó. —El primer año si qué fué así, ahora podrías decir que te veo como Jihyo te ve a ti— Añadió.

—Creo que es obvio que pensaras que hice toda esta locura porque seguía obsesionada contigo— Fué explicando y enfatizando con una mano. —Estás obsesionada conmigo— Inmediamente la corregí. —Se de muchísimos casos de obsesión, pero al menos el tuyo es en más sano— Terminé de hablar.

—Eso— Hizo un gesto de indicar. —Pero yo que conozco tanto de ti, que he visto como de mal lo has pasado, ni podía dejar que cualquiera tuviera un puesto tan cercano a ti— Se relajó.

— ¿Entonces tengo que verte como una aliada? — La miré lentamente, asintiendo ella. —Los primeros días solo quería molestarte un poco, si hay algo que quiera es verte feliz— Se notaba que quería verme, pese a que tuviera la obligación con la carretera.

—Quizá tenga que pasar una temporada alejado de Twice, ver a Dahyun me pone mal, hay una mínima probabilidad de que mi depresión de vaya o mejore al no tener grandes estímulos o obligarme a sentir falsamente— Miré a las nubes, habiendo un pedazo pequeño de sol y luz pasando entre ellas.