Sombra - Dahyun & Tú.

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—Hoy es nuestro último día trabajando juntos— Dijo Boyoung de la nada a no muchos semáforos de mi hogar.

—Si vas a hacer un chiste al menos haz que de risa— Me burlé. —No es ningún chiste— Respondió instantáneamente, haciendo que la volteara a ver seriamente.

—Cuando grabamos el drama me di cuenta de algo… — Aunque parecía decidida, le costaban las palabras.

—Te sigo amando, aún cuando no tengo ni la más mínima posibilidad, ni aunque no existiera Dahyun— Evitó verme.

—Entonces… ¿Estás renunciando a la compañía? — Pregunté, quería convencerla para que siguiera conmigo, era un pilar fuerte en mi vida, pero ya conocía de primera mano lo que era estar enamorado sin posibilidad.

—No, estoy renunciando a ti— La miré de reojo, estando confusa. —Quiero seguir en la compañía como directora de arte, pero no quiero trabajar en tus proyectos— Aclaró.

—Gracias por eso… — Aunque aquello estaba siendo como una daga al corazón, yo se la había clavado primero a ella, incluso un par de veces.

— ¿Por qué no estás enojado? — La luz pasó a verde, empezando a manejar otra vez.

—A todos les agradas, y eres probablemente la mejor— Miré por el bien de los demás, no me quedaba nada más.

—Intentaré buscarte otra manager de confianza, también buscaré una agencia para tus temas artísticos— Más pronto que tarde me dejó en el estacionamiento.

Tampoco es como que necesitara despedirse después de todo aquello, solo habría sido más incómodo.

Después de un buen rato parado, tomé el ascensor, haciendo la rutina hacia la puerta.

— ¿Cómo te fué hoy? — Preguntó Dahyun al verme entrar.

—Supongo que regular— Respondí, oliendo algo, mirando de paso, estaba cocinando algo, o quizá solo calentandolo.

—Al menos no fué un mal día— Escuché mientras me dejaba caer en el sofá.

— ¿Quieres cenar? — Se sentó a mi lado, buscando mi mirada, pese a que la tuviera pegada a un cojín.

—Necesito comer algo— Me apoyé, levantándome. —Le pedí a mamá que me enviara tu platillo favorito— Sonrió, levantándose.

Sin más, fuí a la mesa, sirvió ambos platos, empezando a cenar.

— ¿Alguna vez has experimentado con varias personas? — Preguntó. — ¿En qué sentido? — Pregunté sin muchas ganas de indagar, simplemente no podía hacerme ver mal.

—Trios y cosas así… — Pese a todo, parecía seguirle dando vergüenza el tema. Asentí.

—Nunca con quienes siquiera me parecieran lindos físicamente, pero si, los he hecho, de todos los tipos— Le aclaré, notando como parecía quererse abrir más en el tema.

—Hace tiempo me dijiste algo sobre si me gustaban también las mujeres, he pensando que quizá si… — Básicamente, estaba plantando la semilla.

—Y quieres comprobarlo pero como estás tan cómoda conmigo, quieres que sea conmigo también— Le apunté con la cuchara, asintiendo.

— ¿Alguna candidata? — Cuestioné, pensando en como negarle a cualquiera que pudiera ser compatible.

—No lo sé… — Empezó a pensarlo, siendo un poco claro que no se lo estaba tomando tan en serio por suerte.

—Pensé en Jihyo, por la confianza que nos tenemos, pero a ella solo le gustan los hombres… — Paró a pensar. —Y no me gusta para nada la idea de que si lo hacemos, la otra chica esté allí solo por ti— Aclaró, siendo tan poco serio que estaba relajado, siquiera imaginarse la barbaridad de esa situación me decía que no íbamos a ningún sitio.

—Después pensé en Sana, pero dudo que alguien tan tierna y dulce como ella acepte algo así— La dejé hablar, mientras fuera cualquiera de la miembros de Twice, era virtualmente imposible de base, y fuera de las ocho, sin tanto problema puedo negarme a las demás.

—Pero Nayeon creo que si accedería… — Iba a ser fácil de hacer que no pasara, solo tenía que seguirle la corriente para que pensara que me estaba negando rotundamente.