— ¿De verdad quieres hacer esto con Nayeon? — Le pregunté más serio. Dejándola un poco pensativa. — ¿No es la única opción? — Me preguntó a mi, dejándome claro que básicamente solo la tenía a ella.—Es la única persona que se que le gustamos físicamente— Añadió. —Y a la que le tenemos mucha confianza— Siguió, sonando cada vez más serio.
—Si no supongo… — Instintivamente empezó a buscar algo en su mente. —Si no tienes problemas con ella, hagamoslo— Dije instantáneamente, pese a que esto seguía sin gustarme en lo más mínimo, no quería escuchar el supuesto escenario donde Dahyun cureoseara con una mujer y yo siguiera existiendo.
—Pensaba que no te gustaba tanto la idea— Dijo al verme decidido de pronto. —Me puedo vestir de chica, maquillarme, ponerme alguna peluca, pero no soy una mujer— Intenté excusarme. —Si yo te fuí generando esa duda— Me senté en una de las sillas de la isla de la cocina. —No puedo decir mucho cuando si quieras probar con una mujer— Intenté ocultar un poco el desagrado.
—Supongo que ahora tenemos que hablar ambos con Nayeon, ¿No? — Me preguntó, dado que el de la experiencia era yo.
Pero aunque efectivamente, tuviera prácticamente un manual con muchos de los caminos y rutas para que nadie se sienta raro o mal en estos casos, el problema es que ahora el raro y mal era yo.
—Dile que venga, aunque no viven muy lejos de aquí, si está libre quizá llegue en media hora como mucho— Me levanté, ahora yendo al sofá y dejándome caer.
Si bien, tenía estrés, también solía sentirme con menos resistencia de lo habitual, aunque también podría deberse a la gran disminución de prácticas de baile.
Quizá estaba dejando de tener un cuerpo de idol para tener uno de un ser humano normal.
— ¡Llegué lo más pronto que pude! — Escuché viendo a una Nayeon entrar. —No se va a acabar el mundo, tenemos tiempo de sobra— Le quité peso.
— ¿De qué querían hablar? — Preguntó tomando algo de agua. —Si queremos hacerlo— Le respondió Dahyun, notando como casi se atraganta.
—Pero tengo una condición— Dije desde el sofá, captando la atención de ambas. —Tienes que cortarte el cabello— Alzé mi mano, levantando un dedo.
— ¿Tienen alguna tijera por aquí? — Escuché preguntar a Nayeon, luego levantarse Dahyun.
Después de quizá un minuto sentí un peso más en el sofá. —Ten— Miré y era Nayeon con la mismas tijeras que pidió. — ¿No importa si te dejo calva? — Le cuestioné su decisión. —No serías capaz— Me dejó suavemente las tijeras apoyadas en mi estómago, soltando su cabello y empezando a airearlo, aunque tampoco era demasiado largo sin las extensiones ya.
— ¿Por qué me das las tijeras? — Empecé a verla. —Tú eres estilista y sabes de cabello, me da algo de pereza ir a un salón y todo eso— Me aclaró, mirando un momento a Dahyun, viendo ella expectante.
—Tengo años que no corto cabello— Me senté en el sofá, empezando a tomar del cabello a Nayeon, intentando imaginarme como cortarselo de la forma que quería.
—No es algo que olvides, de todos modos siempre puedo cortarlo como Chaeyoung cuando debutamos— Y con eso prácticamente había dicho que podía dejarla media calva sin problema alguno.
— ¿Podrías buscar una sabana fina? — Le pregunté a Dahyun, levantándose y yendo a nuestra habitación.
— ¿Lo haces por ella? — Me preguntó en voz baja Nayeon. Asentí. —Podría sugerir muy fuerte que te cortes el cabello en la compañía— Le aclaré.
— ¿Sirve esta? — Preguntó Estirandola, aunque era prácticamente una cobija. —Del grosor del cubrecamas— Le aclaré, yendo otra vez a buscar alguna.
—Lo siento por aprovecharme, no tendría otra oportunidad de estar con ninguno de los dos— Reveló, ganándose un jalón de cabello discreto.
—Algún día me lo cobraré de alguna u otra forma— Dije después de aquello.
— ¿Esta? — Preguntó con una perfecta, haciéndole un pulgar arriba.
— ¿Qué planeas hacerme? — Preguntó cuando la envolví. —Cortarlo como en <More & More> pero con flequillo— Le aclaré, empezando a dividir su cabello y enganchando mechones.
—Pero si ya lo tuve así— Dijo. —No del todo, para cuando te cortabas el flequillo ya te había crecido unos centímetros— Le aclaré, humedeciendo su cabello con un atomizador que solía tener para cualquier otra cosa menos cortar cabello.
— ¿Tienes un estilo favorito de todas? — Cuestionó Dahyun. —Ustedes tienen uno favorito de mi, no veo que esté haciendo algo malo— Le dije un poco burlesco.
— ¿Cuál es tu favorito mío? — Se puso delante de mi, además de Nayeon también. —Cuando lo tuviste gris cenizo, aunque también te cortaría el flequillo— Le aclaré, ganándome un rostro de indignación.
— ¿No podías solo pedirme cortarme el flequillo? — Expresó. —No puedo decolorarlo tanto de momento— Vi su camino hacia sentarse en el sofá.
—Nunca te gustó tenerlo corto, no creo que porque te lo pida yo te lo cortes a mitad del cuello— Aclaré.
—Si le queda bien a Nayeon, puedes cortármelo a mi también— Dijo mientras empezaba a verse las puntas de su cabello.
Miré a Nayeon, Nayeon me miró a mi, miramos a Dahyun, repetimos, luego caímos en la realidad, había accedido por primera vez en su vida a cortarse el cabello.
— ¡¿De verdad?! — Cuestioné. — ¿Por qué no? — Preguntó ella. —Creo que he cambiado mucho, estar contigo me ha cambiado, aunque por fuera no se nota, quiero que se note un poco al menos— Aclaró su pensar.
—Hazlo bien— Me señaló Nayeon, tal parecía que ambos queríamos verla con el cabello corto.
Tiene que ver cero con este capitulo en si, pero es relevante en la historia, hace un rato dije que tenia unas 30 canciones en espera para ponerlas en esta historia.
Lo normal sería pensar que como he ido poniendo algunas, el número iría bajando, bueno, ya van 37, inclusive quitando las que ya pusé, va a estar potente el final, sobretodo porque este final si lo tengo planeado.
Quién te conoce Aureum.
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Sombra - Dahyun & Tú.
FanfictionUn títere, cientos de cuerdas, un actor perfecto, purgado de toda culpa, decenas de corazones rotos. Todo frente al espejo de la redención y un par de simples puertas hacia la sinceridad.