{47}

43 6 0
                                    

Escuché mi nombre a la lejanía. Para como estaba mi mente últimamente, quizá no existía.

Seguí limpiando platos. — ¡TN! — Sentí un jalón fuerte hacia atrás, cortándome con un cuchillo de los que estaban alrededor de los platos sucios.

Inmediatamente abrí el agua, limpiándome el corte. — ¡Lo siento! -— Cuando voltee, vi a una Dahyun muy enfocada en mi herida y con las manos temblando.

—Dame un poco de alcohol— Pedí, tanteando que no era tan profunda.

— ¿Tienen alguna prenda vieja que no utilicen? — Pregunté tranquilo, a decir verdad, tampoco estaba sintiendo el dolor.

Fué corriendo, notando su desesperación ya que me había traído una de sus blusas, una que se había puesto la semana pasada incluso.

Negué, tomando la mía propia y cortando un pedazo, impregnandolo de alcohol y luego vendandome.

—Aprendí primeros auxilios hace tiempo— Indiqué al apretar.

—Lo siento… — Se volvió a disculpar. — ¿Me llamabas antes? — Pregunté, dudando de mi mente ahora.

—Parece que estás en otro lado— Seguía viendo mi herida. — ¿Tienen un botiquín? — Pregunté, ya que no fiaba tanto de mi. Asintió, yendo ambos al baño.

—Luego me vendo con estas— Saqué lo que necesitaba, dejándolo fuera y regresando el botiquín.

— ¿Estás bien? — Me preguntó, sentándome en el suelo por comodidad y viendo mi herida.

—No es muy profunda, además cicatrizo hacia dentro, tampoco se me va a notar— Indiqué.

—Me refiero a en general— Sentí como se sentó a mi lado. —No eres tu cuando actúas así— Tomó mi mano sana.

—No he estado pasando por un buen momento— Dije evitando la mirada. — ¿No soy a la segunda que más quieres de las nueve? — Cuestionó, asintiendo yo.

—Dímelo, o al menos deja que te anime un poco— Añadió.

Iba a ser difícil cuando mucho del problema era ella en cuestión.

—Se me pasará solo con el tiempo, son solo químicos en mi cabeza— La miré, sonriendo al decir eso.

— ¿Por qué no te quedas conmigo o Jihyo un tiempo? — Directamente ignoró a sus compañeras.

—No quiero ser una carga para ustedes, de por si son muy amables conmigo— Negué. —No podemos ser más amables contigo porque siempre te niegas— Soltó mi mano. — ¿Por qué no quieres que estemos más cerca? — Cuestionó, pero esta vez sin sonar molesta, solamente tenía la incógnita.

—Seguimos siendo un hombre y una mujer— Aclaré. Diciendo aquello sin pasar por mi filtro mental ni frenos al hablar.

— ¿Y eso qué? — Cuestionó ella, haciendo que la viera. —Ya me demostraste que eres mejor que todos— Volví a desviar la vista.

Reí al escuchar eso último. —Se que suena raro porque sigo siendo un hombre, pero, ¿Tú me amas? — Pregunté, asintiendo ella después de un segundo.

—Todas te amamos, no hay nadie más que podamos decir que se te parezca para nosotras— Aclaró.

— ¿Me amarías menos si supieras donde he estado? — Pregunté serio. — ¿Me amarías menos si supieras todo el daño que he hecho? — Añadí.

—Si me abro contigo y te muestro el verdadero demonio qué soy, ¿Me seguirías amando? — Después de unos segundos sin respuesta, me levanté.

— ¿Eres un demonio porque así lo quieres? — Escuché al salir del baño. — ¿No eres solo un títere para los demás? — Voltee a verla.

—Este es el verdadero tú, el que nosotras amamos— Siguió. —Quizá a algunas les importe menos o más, pero no somos novios, eso no importa aquí— Aclaró, sin contexto tenía toda la razón, pero le faltaba saber mucho.

Sonreí. —Tienes razón— Volví a voltearme, buscando los guantes para lavar los platos sin mojarme la herida.

Sombra - Dahyun & Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora