Sombra - Dahyun & Tú.

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—No se si estoy feliz o triste— Dije al ver a la sonriente Boyoung mostrame los números del videoclip. —¡Estamos felices¡ — Saltó de la emoción, siendo perfectamente contrarios en cuanto a reacciones.

—Con esto le callamos la boca a todos los otros presidentes y ejecutivos— Aclaró el porqué de todo. — ¡Tienes via libre para hacer lo que quieras! — Seguía saltando de la emoción.

— ¡¿Por qué no estas feliz?! — Tomó mi mano, jalandome y levantándome. —No es una canción feliz— Respondí. — ¡Ahora puedes hacer todas las canciones felices que quieras! — Me soltó, yéndose a buscar una cerveza.

—De verdad… — La escuché quejarse al sentarse a mi lado. —Deberías de estar más feliz algunas veces— Empezó a tomar.

—No me gusta ser así— Suspiré al decirlo, viendo al monótono suelo de mi departamento. —Extraño a mi yo de trece años por lo mismo— Alcé la vista, viéndome a mi mismo de joven.

—Extraño a esa parte de mi, somos dos personas diferentes ahora— Pasé a ver un momento a Boyoung. —Ella me recuerda a esa época, por eso soy tan insistente— Volví a verme.

Al menos era bueno que no me estuviera insultando. Aunque hasta yo me insultaría, no necesito muchos más motivos.

—Ahora solo me queda seguir siendo hipócrita y tener éxito para que tú puedas hacer películas también— Me levanté, yendo a buscar algo de jugo de fresas.

—Deberías alegrarte no solo por mi éxito— Sonreí, sentándome otra vez. — ¿Por qué otra cosa? — Me miró extrañada. — ¿Yo te importo? — Cuestioné, asintiendo ella.

—Estás siendo de las personas más importantes para mi— Dije sinceramente. —Aún con lo que te hice y sabiendo todo mi pasado, me defiendes como si fuera un niño pequeño— Sonreí.

Me puso la lata fría en la frente, echándome para atrás. —Tratame mal, idiota— Se levantó después de eso.

—Lo siento pero no puedo ser malo con alguien que se esfuerza tanto por mi— Intenté defenderme. — ¿Por qué no tienes pareja ahora? — Le pregunté, siendo una obvia forma de olvidarse de mi.

—Haber estado con tantas personas me hace conocerlas realmente, puedo presentarte idols que son amores puros— Señalé.

—Después, primero quiero enfocarme en ti— Me respondió desde lejos. —Tú estuviste conmigo por el bien de la empresa, yo ahora quiero estar contigo por mi bien personal— Reveló otra de sus verdaderas intenciones.

— ¿No te gustaría actuar también? — Le pregunté. —Conozco a los grandes productores, asi también puedes entrar más rápido a ese mundo— Tanto ella como yo estábamos expandiendo nuestras verdaderas capacidades.

—No creo que me quieran a mi… — Negó. —No tengo un rostro perfecto y soy muy pequeña… — Se excusó. —Entonces si quieres— Sonreí.

—Pesé a ser quien soy y todo lo que he hecho, yo no miento, cuando dije que me parecías de las chicas más lindas con las que he tenido que hacer cosas, era en serio— La señalé, buscando mi celular ahora.

—Supongo que obvias lo que dicen de ti porque investigas mis cosas únicamente— Me levanté, mostrándole las reacciones del público ante su belleza.

—Además, no te imaginas a la cantidad de productores y ejecutivos quejarse porque no hay actrices tiernas… — Insinúe, viéndome ella curiosa.