Once Upon A Time

The book

-Yo no necesito ayuda.- Insistía Regina. -Ella la necesita.-

-No, por favor, déjanos ayudarte.- Pidió Robin.

-¿No lo entiendes? Cada minuto que pasáis intentando ayudarme estáis perdiendo el tiempo.- Aseguró. -La única persona que puede ayudarme es Emily, y si no recuerda quién es, no hay nada que hacer.-

-¿Entonces que sugieres?-

-Ayudadla a ella.- Sugirió. -No perdáis el tiempo conmigo.-

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-¿De qué manzanas hablaba?- Curioseó la niña a la mañana siguiente.

-Es...tiene un huerto...- Inventó Emma. -Ayer le robaron las manzanas...-

-¿Y vino corriendo en plena noche como una desconsolada a decírtelo?- Se extrañó.

-Bueno...ya sabes...soy la sherif...-

Emily quedó pensativa.

-¿En qué piensas?- Preguntó.

-Es solo... Me parece que hay algo que no encaja...- Aseguró. -Como si algo fuera mal...-

-¿Como qué?-

-...No lo sé.- Dejó de darle importancia. -Es una tontería...-

-No menosprecies tus instintos...- Recordó. -Son muy especiales...-

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-¿Las tienes?- Preguntó Regina.

Zelena negó con la cabeza. -No están en este mundo.-

-¿Entonces dónde están?- Preguntó Robin.

-...No lo sé.-

-Aghhh...- Se sentó Regina en una silla.

-¿Estás bien?- Se preocupó Robin.

-No he pasado por dos vidas como estas para que ahora no sepa quien soy...- Se lamentó.

-...Bueno...- Comentó Zelena. -Eso es parecido a lo que le ocurrió a Angela...-

La mujer la miró molesta.

-Pero eso no significa que vayas a morir.- Rectificó.

Regina intentó ignorar el comentario sin poner los ojos en blanco. Suspiró.

-¿Quién es Angela?- Preguntó Robin.

-Su madre biológica...- Explicó la mujer.

-¿Y qué le pasó?-

-...Que supo ver lo que era mejor para su hija.- Se levantó y se fue.

Zelena y Robin la siguieron.

-No.- Recordó. -Tenéis que ayudarla...- Cambió de tema. -Supongo que se equivocó...habría estado mejor con ella...-

Quisieron seguirla, pero cerró la puerta de su habitación.

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Zelena caminaba por la calle con una bolsa de manzanas verdes.
-Aghr...- Se le cayeron al suelo y se agachó a recogerlas.

Una de las manzanas rodó unos metros calle abajo y se paró al dar con los pies de Emily.

La niña la cogió y vio a la mujer recogiendo manzanas del suelo.
Decidió acercarse a ayudarla.

-Pensaba que te habían robado las manzanas...- Dijo ella.

Zelena la miró. -Oh...ya, estas son otras.- Acabó de recogerlas y meterlas en la bolsa. -Las que me robaron eran especiales.-

-¿Como de especiales?-

-...estaban muy muy buenas.- Señaló. -Pero estas no acaban de convencerme, ¿podrías probarlas haber si te gustan?-

La chica se extrañó. -El caso es que no me gustan mucho las manzanas...sobre todo las verdes...-

-Me harías un gran favor...- Insistió. -Por favor...-

La niña dudó sobre las intenciones de la mujer, pero acabó cediendo y probó la manzana.

-¿Qué tal?- Se interesó.

-Bien, supongo.- Pensó. -No sé mucho de manzanas.-

Zelena se vio un poco decepcionada, tampoco esperaba que funcionara.
-De acuerdo... Tendré que cambiar los ingredientes...-

-¿Ingredientes?- Se sorprendió. -Pero si son manzanas.-

-No es tan simple...- Se fue.

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-¿Estás bien?- Insistió Robin.

Regina abrió la puerta.

-¿Qué te preocupa?-

-Que mí corazón pueda ensombrecer el suyo...-

HAPPY HALLOWEEN!!