Once Upon A Time

You better don't

-Camelot, 4 semanas antes.-

-Emma...- Regina la miró directamente. -¿Cuál es la verdad acerca de esta espada..?-

-Os la he contado.- Respondió insegura y acercándose al libro que su amiga sujetaba. -Deben haber dos tipos de...las dos reinas y los dos soldados, sois de los suyos, no de los otros.-

-¿Eso explicaría..?- Zelena se introdujo en la conversación. -¿Que todo el reino lo adore?-

-Excalibur debió de proporcionarle algún tipo de poción o algo así...- Pensó la rubia alejándose del libro.

-¿Qué?- Se sorprendió la morena.

-Bueno...o eso o un hechizo...¿no?- La apoyó la pelirroja. -Tiene razón...-

-¿Cómo lo deshacemos?-

-En esta clase de hechizos siempre suele haber alguien contra quien no lo lanzan...- Dedujo Emily de la nada. -Todos necesitan alguien con quién no tengan que ser perfectos, y en muchos casos eso puede llevar a cosas muy malas...-

-¿Cómo sabes eso?- Preguntó su madre.

-Me ha venido a la mente...Pero es lógico, nadie puede mantener la calma durante toda su vida rodeado de gente que solo dice que es genial, es como una olla exprés, acaba petando, y eso puede ser desastroso.-

-¿Y dónde está esa persona?- Insistió la morena.

-Supongo que en alguna mazmorra...- Sugirió Emma. -Debe de estar cautiva para que nadie sepa la verdad...-

-¿Y eso lo has deducido de..?-

Se hizo un silencio intenso en la cueva, de esos que llenan hasta el último hueco y hacen que el aire se vuelva más pesado.

La pelirroja estaba completamente perdida.
Emily entendía algo, por supuesto ni la mitad de la mitad.

-Su...supongo que aparentar ser perfecto ante todos le hará...necesitar desquitarse con alguien...- Continuó con pies de plomo.

-Gran idea. ¿Se te ha ocurrido a ti solita?- Vaciló.

-Pe..pensé..- Tartamudeó.

-¿En?-
-Ti...-

Regina estuvo a punto de decir algo, pero se paró a si misma y miró a su alrededor.
La cara de su hermana daba a saber que no conocía bien el tema, y la de Emily...quería que el suelo se la tragara...
-Swan...- Respiró. -No sé qué motivos tendrás para pensar así. Todos reaccionan de un modo distinto ante Excalibur, ¿verdad?-

La pelirroja asintió sin entender nada.

-¿Entonces que te lleva a pensar que esta vez hay víctimas?- Esperó unos segundos, pero no obtuvo respuesta. -Olvidalo...- Se largó.

-No...- Murmuró la rubia. -Esto es malo...- la siguió.

°°°°°°

-Bueno...- Se balanceó Zelena.

Emily aún no había reaccionado. -¿Qué hacemos ahora?-

-No sé tu, pero yo me voy de viaje...- Cruzó la esquina.

La niña hizo gesto de incomprensión.

-Era broma.- Volvió. -Venga, vamos...-

-¿Estarán bien?-

-La verdad es que de todo esto, sé menos que tu...- La acompañó con el brazo. -Tu madre, en su infinita gracia.., suele guardarse las cosas para sus adentros...-
Esta tosió tapándose la boca con la mano, pero no llamó mucho la atención.